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Era sábado y como se esperaba Sua estaba de nuevo en el cuerpo de Siyeon. Aunque nunca lo admitiría si había una sola cosa que le gustaba, es que se sentía más alta, estando en ese cuerpo.

Se arregló, con algo cómodo, en sí el armario de Siyeon estaba lleno de ropa cómoda.

—¿Vas a salir hoy? —Gahyeon interrumpió, entrando en su habitación.

—Sí, videojuegos—decirlo en voz alta era raro, no era para nada lo que Sua solía hacer sus sábados.

—Diviértete—una gran sonrisa en el rostro de la más pequeña.

Sua no podía creer lo tierna que era la hermana de Siyeon, debe ser lindo vivir con alguien así, pensó.

Una vez en la casa de Dami, las tres chicas se sentaron en el sillón y comenzaron a jugar con la consola.
Al principio a Sua le costó demasiado entender como funcionaba, pero poco a poco se fue adaptando.

—Andas un poco oxidada, ¿no Siyeon?—Yoohyeon se burló.

—Es como si fuera algo nuevo para mí —Y Sua no mentía.

—Te entiendo, hace tiempo no nos juntamos para esto—Dami se quejó —si no fueran tan malas amigas y me visitarán más seguido.

—Ya Dami no empieces, sabes que te queremos mucho—Yoohyeon la rodeó con un brazo, haciendo que perdiera la partida—y así amigas mía queda comprobado quién es la mejor.

—Tramposa—Dami se quitó su brazo de encima.

Lo que pudo aprender Sua hoy, fue que Dami y Yoohyeon eran divertidas, también competitivas sobre todo Yoohyeon. Pero se la estaba pasando bien.

—Oye, Siyeon, me quedó una duda—decía Dami mientras comía unas papas fritas—¿Sua y tú se han vuelto cercanas?

Sua no sabía que decir, de alguna manera si eran cercanas, digamos que estaba en su cuerpo, eso era muy cercano.

—No lo creo—interrumpió Yoohyeon—a Siyeon no le cae Sua ¿verdad Siyeon?

—Bueno, yo...

—Recuerdo que la otra vez me dijiste que no te caía la gente que se creía superior, y que Sua era una de ellas.

Sua se molestó un poco al escuchar esto, después de todo eso era lo que pensaba Siyeon de ella.

—Como la última vez dijiste que hablaban de la tarea yo pensé que eran cercanas—Dami agregó—a mi me parece que no es tan mala como todos piensan.

Sin embargo Sua, ya no estaba escuchando.

—¿Estás bien, Siyeon?—Yoohyeon preguntó, al notar rara a su amiga.

—Sí, sólo que ya me tengo que ir.

—¿Tan temprano? Si apenas comenzamos—Dami se quejó.

—Lo siento, tengo cosas que hacer, nos vemos en la escuela.

Se despidió y se dirigió a casa, mientras pensaba en el camino, claramente si había despejado su mente pero fue momentáneamente, otra vez tenía la cabeza llena de dudas. En estos momentos extrañaba mucho a Jiu, ella sabría como hacerla sentir mejor.

Entonces se detuvo y se dió cuenta que estaba siendo muy tonta, llorar por que todo salía mal y dejarse caer en su miseria.

¡Inexcusable!

Ella era ¡SUA!, no iba a dejarse caer tan fácil, iba a recuperar a sus amigos, recuperar su reputación y hacer de este año el mejor, cueste lo que cueste.

En tus zapatos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora