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Capítulo 16

Escrito por: Alendra Mac
Wattpad: AleMacAmor

GABRIEL

¿Está celosa?

Es una descarada. Ya veremos si continúa burlándose de mí cuando la tenga comiendo de mi mano.

La beso con intensidad mientras estamos en la alberca, recorro su cuello con mis labios y ella no para de moverse, se que la tengo en mis manos y no me iré que aquí hasta hacerla mía.

—¿Lo sientes?— la cuestiono pegándome a ella, bastan unos cuantos besos para que me provoque una erección.

—Exactamente, ¿qué?— cuestiona mientras sonríe con picardía.

—Lo que provocas. Me tienes deseándose desde hace horas, ¿crees que es justo?— me prendo a sus labios sin dejarla responder.

Nos besamos de forma tan intensa que le arranco un gemido, me desea tanto como yo a ella, lo siento en cada centímetro de su piel, se encuentra completamente erizada y yo la deseo más a cada segundo

—Detente— me dice entre besos y yo bajo mis manos a sus caderas pegándola más a mí, después hasta sus piernas para acariciarla y prenderla aún más, no me detendré aunque suplique que lo haga —Demon detente— me dice con la voz poco audible ante su grado de excitación.

—Detenerme no es lo que demanda tu cuerpo— respondo mordiendo sus labios, logra librarse de mis manos y sale presurosa de la alberca.

—Mejor me invitas a cenar— dice mientras levanta su ropa —Me daré una ducha y tú deberías hacer lo mismo en la habitación de Damián— se aleja de la alberca, yo sonrío derrotado.

Me sumerjo en el agua y nado por algunos minutos más, no puedo continuar acrecentando en mi el deseo de hacerla mía y dañarla a la vez, no puedo engañarme a mí mismo cuando se que siento algo más que atracción por ella.

Salgo de la alberca en su búsqueda, prefiero enfrentarla y aclarar todo en lugar de iniciar con algo que se que terminará mal si no le digo lo que en verdad siento.

Toco a la puerta de su habitación después de ducharme en la de Damián, escucho el ruido de su secador, se que no me escuchará así que abro la puerta para entrar, el ruido del secador  se mezcla junto con el sonido del celular, apaga el secador y atiende la llamada, sonrío, no le ha sido difícil dar con el, debí esconderlo mejor, camino hasta la puerta del vestidor para decirle que estoy fuera pero su conversación por teléfono me hace detenerme quiero escuchar lo que dice.

>>No teníamos una cita<<
....
>>Me he quedado sin batería y acabo de encontrar mi celular pero no tengo mensajes tuyos<<
....
>>Armando, lo lamento no puedo salir contigo<<
....
>>Sí, saldré con alguien más<<
....
>>Sí, si es un chico el cual me gusta y mucho. No lo hago por dañarte, tú y yo quedamos que sólo seremos amigos<<
....
>>No, no, no, no te equivoques, fuiste tú quien me besó, te recuerdo que yo no correspondí a ese beso y te dije que si piensas que aún tienes una esperanza conmigo pierdes el tiempo<<
...
>>Armando no te importa quien sea el chico con el que estoy saliendo, es mi decisión<<
....
>>No Armando!!, adiós... te voy a colgar, no voy a discutir<<

Vuelvo en silencio hasta la puerta para salir y no note que he escuchado su conversación por teléfono, sonrío, me siento satisfecho con lo que he escuchado, al final estaba equivocado, Venus es una niña buena. Toco una vez más.

—¿Lista, bonita?— digo al entrar, la tomo de la cintura y le doy un beso, ella acaricia mi rostro mientras sonríe —Te ves espectacular como siempre— sin importar lo que vista se ve bellísima.

MI IMPERFECTA VIDA AMOROSA  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora