DIME QUE SOY UN PSICÓPATA© ✔️[Completa]

CAPÍTULO 4 "Fiesta e ira"

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   Una mañana me desperté y me acordé que Fede nos había invitado a unos dieciocho, Joaco tenía fútbol y de vuelta se quedaba en lo de Mauro, así que no podía venir.
En casa solo estábamos nosotros dos. Mis viejos se habían ido a casa de Cristian y se quedaban ahí hasta la otra semana.

  Bajé a tomar algo y lo ví en el sillón con el celular

- ¡A las 9:30 salimos! - dijo prendido al celular.

- ¡bueno! - fué mi respuesta con el saquito de café en la mano sentandome a ver tele.
  Quedamos ahí un rato, pedimos algo para comer y yo me fuí a mi cuarto. Al parecer me había dormido que cuando desperté Fede estaba abajo, en la cocina, ya listo y yo apurado buscando que ponerme. Lo primero que hice fue tomar unos vaqueros que estaban ahí, quería buscar una camisa que combine pero no había nada, así estaba en cuero dando vueltas hasta que escuché la bocina de un auto. Eran ellos, los amigos de Fede, que nos pasaron a buscar.

- ¡Marian! ¡apura! - gritó.

  Entonces no tuve opción, agarré el desodorante, hice un círculo a mi alrededor, tomé una sudadera gris que estaba a mano y bajé.
  Aún recuerdo lo que pasó esa noche. Cuando llegamos a la fiesta de entrada un cartel luminoso que decía:

"Felices 18 Mateo".

  A un costado la barra de tragos repleta de alcohólicos, para el otro las minas perreando. En eso Fede me dijo que me divirtiera y se alejó de mi porque vió a su mejor amiga Chels (según el), que le gustaba mucho pero no quería decirle porque pensaba que iba a acabar esa amistad entre ellos. Ella estaba ahí con unos amigos bebiendo alcohol, al parecer ella también quería con él, se re notaba la cara de felicidad que puso al verlo que se abrazaron y ahí quedaron.
  No sabía qué hacer, ni a dónde ir, ya que bailar no era lo mio, amigos ahí no tenía y tomar no quería. Decidí quedarme a un costado de la carpa mirando a los demás, me aburría verlos ensalivarse y perrearse unos a los otros. Miré para la barra, ví unos vagos re volados pidiendo tragos y pensé:

"vamos a ver qué honda".

  Asi que le pedí Ron a la mina y me preguntó si lo mezclaria entonces pasó algo inesperado. Una mina de pelo Lacio con un vestido azul que le ajustaba al cuerpo contestó por mi.

- con limón por favor y que sean dos.

  Cuándo me miró no lo podía creer, me sonrió, sin dudas era ella, ese pelo, ese cuerpazo, esas piernas, ella, July, la mina que me dejó bobo en una noche y que hizo que dejara de masturbarme tan seguido, estaba ahí en esa fiesta. Estábamos ahí los dos sentados en un tronco con el vaso en la mano, ella sacó un convertible y se lo metió a la boca cuando me preguntó si estaba solo, le dije que había venido con mi hermano y que andaba por ahí.
  Ella estaba rara no sabía que le pasaba, parecía como si algo la estuviese molestando. Le pregunté si se sentía bien pero no me contestó justamente eso, sino me preguntó quién era mi hermano y se lo mostré desde lejos, no quería que se conocieran porque sabía que Fede se le lansearia. La cosa es que se puso el pelo atrás de su oreja, tiró la ceniza del cigarro y me atreví a preguntarle una cosa que me tenía en duda.

- ¿Sos amiga de Mateo? - pregunté intrigado. Ella contestó rápido.

- No en realidad mi hermano lo conoce, y me dijo que lo acompañe porque a él no le gusta que esté sola en la calle - dijo al tocarse el pelo.
  Yo quería saber quién era su hermano, en realidad, saber si lo conocía, pero no me dió mucha bola la mina y la dejamos ahí. En eso ella se recostó en mi hombro y me dijo que se sentía bien estando conmigo y me dió la mano, después se acomodó, me miró fijo a los ojos, me agarró del cuello y me besó. Como ella se lanseaba más la agarré de la cintura y la acerqué hacia mí.
  Cuándo se levantó y me dijo que se iba al baño luego me dió un corto beso y se fué. Me quedé sentado mirándola y le ví el tattoo en la espalda, era un camino de estrellas, entonces recordé que Pancho y Eddy también lo conocian, mientras tanto no me dí cuenta que me había tomado todo el vaso de Ron y me fuí a pedir otro, entonces al hacer unos pasos sentí que me empujaron, era un tipo borracho, podía oler alcohol apoderarse de él.

- ¡correte flaco! - Lo miré y era el boludo de Benjamín, entonces recordé que Fede me había dicho que este era muy amigo de Mateo, pues todo coincidía.
El flaco me miró fijo con cara burlista mientras reía.

- ah bueno, lo que me faltaba, el faltadito este!… ¡¿Qué?!, ¿No viniste con el mariquita? - ríeron a carcajadas.

  Cuándo me calenté y sin miedo me acerque.

- ¡¿Qué te pasa?!, ¿Quedaste caliente con lo de la última vez? - sentí que alguien me agarró los brazos.

- ¿La última vez que Ví al marica con el ojo morado? - dijo provocándome.

  Otra vez esa sensación rara se apoderaba de mí, sentía que mi cuerpo temblaba pero que estaba dispuesto a todo, lo miré fijamente que noté el miedo en su rostro. Iba a matarlo, muchas opciones no tenía y oportunidades tampoco. A pesar de estar en la fiesta no me importaba nada, mi mente en blanco estaba. Pero tuvo suerte porque la cosa no fué así, mi hermano llegó junto con Mateo y me preguntaron que pasaba casi gritando, ami me sacaron de ahí y a él lo apartaron de mí, para mí esto no había quedado así. Fede me llenó de preguntas pero yo estaba tan furioso que ni le contesté solo grite cuando habían colmado mi paciencia ellos también.

- ¡APENAS SALGA TE AGARRO GIL!… ¡HIJO DE PUTA!,¡SOS UN GIL WACHO!.

Con mucha bronca le gritaba, y me enojé con Fede un poco porque no me dejó sacarme las ganas, pero bueno, hasta que me senté, luego me calmé, en eso llegó Mateo ya que se había ido a la entrada junto con Mauro (amigo de Joaquín), y dijo que a Benjamín lo habían sacado de la fiesta y que estaba re tomado.
Después no me acuerdo de nada, según Fede yo estaba muy en pedo, solo me acuerdo que llegamos a casa y nada, me fuí a bañar y a la cama. Estaba completamente ebrio.

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