DIME QUE SOY UN PSICÓPATA© ✔️[Completa]

CAPÍTULO 30 "Depresión"

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Segunda Temporada

  Habían pasado tan solo horas de que mi madre respiró por última vez, es que las horas en el hospital me habían dado algo de fuerza para afrontar la verdad digamos que el tener que esperar me hizo comprender y entender que ya no iba a estar sufriendo en aquella cama conectada a tubos y cables que le daban respiración porque ella ya no podía hacerlo sola, pero aún no llegaba en mí la aceptación.
  El viaje al cementerio eran llantos y sollozos, abrazos de tristeza, nostalgia y apatía, si, la que tenía yo. Un montón de sensaciones y sentimientos al igual que pensamientos cálidos y débiles completaban mi ser para llegar a uno y este era la depresión.
  Estábamos en absoluto silencio. Federico con su novia Chelsea, Valentina y yo íbamos camino al cementerio sentados en su auto, tristes y apenados y sobretodo cansados. Mauro, Sofia, Alejo y Maggie fueron junto con nosotros pero en el auto de Sofia y ellos nos habían traído algo de comida y ropa negra como para funeral, los chicos buscaron un saco negro junto con una remera que les había dicho en donde tenían que buscarlo, también un jean negro y los zapatos y para Valentina su madre decidió que fuera un vestido negro con tacones del mismo color. Los demás llegaron después, entre tantos colores oscuros y en un día soleado la única con un sombrero grande y negro era mi suegra y sin tardar demasiado el ataúd de mi madre se había llenado de distintas flores y rosas.
Valentina llorando le dejó su pulserita, que era muy importante para ella siendo ésta el recuerdo que le quedaba de su abuelo. Con eso me demostró amor y cariño al igual que aprecio, me miró con la cara colorada y triste entonces no dudó en levantarse y abrazarme bien fuerte puesto que sentí sus manos tocar mi espalda y no evité cerrar mis ojos y respirar profundo.

"Los amigos que tengo, no los tiene nadie" - pensé

  Lo único que tenía en el estómago eran los mates que me había dado Irina saliendo para el maldito hospital era lo único que había comido junto con los croissant que para ser exacto fueron dos, tenía mucho hambre y hastiosidad. Estos días no venía durmiendo ni tampoco comiendo para nada bien, todo se trataba de cuidar, ver, bañar, acompañar, esperar, estar y animar a mi madre, no tenía tiempos para mí ya había faltado mucho a la universidad pues me había perdido dos parciales además de eso casi siempre me quedaba a dormir en el hospital, me daban de comer pero la comida era una porquería. Realmente estaba cansado.

- ¿Y ésto como pasó? - frunció el ceño.

- también me lo pregunto - contesté desanimado.

- En verdad no entiendo ¿Que fue lo que hice mal? - negó con la cabeza.

- No te sientas culpable - consolé.

Lo abracé, nos estuvimos abrazando varios minutos. Fede al igual que yo estaba destruído. También aún no caía en la realidad, y lamentaba mucho no poder visitarla estos cuatro años, la verdad se había desaparecido por así decirlo. Solo nos hacíamos videollamadas pero ustedes saben, eso no es suficiente ni lo mismo, oh no sé.
  Doña Eva estaba presente también al igual que mi tío Germán junto con su esposa, mis primos y mis sobrinos y algunos vecinos como el señor Anderson y vecinas amigas de mamá. Eneas también se encontraba ahí junto con Frank, Franchesca y Gabriel. Ignacio y Margareth me habían dado su palabra de fuerzas en el hospital antes de llegar al cementerio, ellos estuvieron ahí conmigo. Ignacio no podía salir del hospital de lo contrario tampoco quería que saliera solo para presenciar un funeral es por eso que Margareth se quedaba con él toda la noche como solía hacerlo porque a las 7:00 AM le darían quimioterapia otra vez. Eso me preocupaba mucho, y toda la mañana estuve preguntando por él, digamos que estuvimos en contacto con Margareth.
Todos vestidos de negro hablaron por si mismos con la mirada, no me gustaba para nada ser el centro de las atenciones y menos cuando no soy tan sentimental como lo era Fede que a pesar de ser muy simpático también era muy amable en cambio yo solo respondía con una sonrisa sin mostrar los dientes, lo único que quería es que ésto pasara pronto, odio los velorios.