DIME QUE SOY UN PSICÓPATA© ✔️[Completa]

CAPÍTULO 26 "Rompecabezas"

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Segunda Temporada

  En el camino Valentina me dijo que cuando estuvo charlando con Mauro este le chismeo que había escuchado a Eneas hablar con Julieta íntimamente y que hablaban de mi acerca de que supuestamente me habían visto en una gasolinería con otra chica que no era Valentina pero Valentina al parecer fingió estar al tanto de la situación aunque moría por dentro saber de quién se trataba y sin más que decir pensó en la señorita Vicente, quién era mi mejor amiga y vivía en la esquina de la Shell, en parte no le molestaba para nada que habláramos. Ame cuando le conté sobre Sofía pues siempre mis palabras fueron sensatas a la hora de hablar o aclarar alguna cosa y en consecuencia de eso me dijo que quería conocerla de modo que verdaderamente no esperaba aquella reacción de su parte, fué tan amable y bonita que hasta me había hecho pensar que iban a llevarse muy bien; No obstante parecía tener dudas acerca de quién fuese aunque realmente no sabía hasta ese entonces qué era lo que pasaba por su mente, no hasta que habláramos después de ir a la casa abandonada. Suponia que de una vez tendríamos que aclarar aquel mal entendido.
  El problema no fué el chisme de Mauro sobre Eneas y Julieta sino lo que le Inventaron de mi pues era que me había citado con Julieta en un bar para charlar sobre quién sabe quién. Todo un inventario de chismes para que Valentina y yo nos pelearamos y a consecuencia de eso le confesé todo lo que había hecho anteriormente a Valentina pero al parecer no me creyó ningúna palabra porque me miraba con duda durante todo el camino hacia el lugar donde íbamos a ir pues se había tornado un silencio incómodo entre el auto, nosotros y la calle repleta de flores violetas caídas de los árboles puesto que habíamos tenido una breve discusión por causa de Eneas, de modo que me enojé con Valentina porque al enojarse asumí que realmente desconfiaba de mi y en parte mí enojo se hizo notar más por el mensaje de Eneas anteriormente, nunca llegué a pensar que Valentina desconfiara de mi pero creo que no es necesario llegar a detalles aunque me hubiese gustado que hablara conmigo antes de armar su papel de detective.

- ¡Sabes cuáles son mis movimientos rutinarios, no entiendo tu enojo Valentina! - reclamé.

- ¡Los conozco demasiado y es por eso que me hace dudar! - regaño.

- ¿Qué he hecho para que pienses cualquier cosa?... ¿Te di algún motivo? ¡por favor dime si te di al menos uno! - permaneció en silencio - Creo que debería estar enojado por tu desconfianza pero sabes ahora no quiero discutir contigo... el tema que veremos enseguida es mucho más importante que tus desconfianzas absurdas - trataba de simular mí enojo.

- ¡¿No son importantes mis desconfianzas?! ¡¿Acaso crees que me agrada ver tu última conexión a altas horas de la noche?! - elevó la voz. Miré de costado.

- ¿Eso qué tiene que ver Valentina? ¡sabes que tengo contactos importantes en mí celular! - levanté mis cejas.

- ¡El mío debería ser uno! - rodeó los ojos.

- ¡¿Es en serio?! ¡Además de eso!... ¡tengo a mí madre enferma! ¿cómo crees que podría pensar en serte infiel justo en momentos de dolor de cabeza diarios? - elevé la voz.

- Creo que tienes razón - asintió.

- Es que la tengo, mira no quiero pelear contigo pero debemos hablar de esto en otro momento cuando estemos más calmados ya que tengo que preguntarte algo sobre lo que acabamos que hablar y quiero que me seas súper sincera cuando lo haga... - advertí enojado - Ya casi llegamos - Bajé la voz.

- Entiendo perfectamente… - su voz parecía temblar - creo que en casa lo hablaremos mejor, por ahora no pensemos en eso - ni siquiera me miró. No pude evitar mirarla directamente a los ojos como señal de que verdaderamente me estuviera diciendo lo que salía de su boca en ese instante pues luego de apreciarla en silencio por unos minutos acepté terminar la conversación aunque aún estuviera enojado.