CAPÍTULO 11 "Me gustan tus ojos"

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Valen's pov:

  El día en el que conocí a Austin estábamos doblando la esquina de la facultad con mi mejor amigo y nos habíamos demorado en un Drucstore por comprar dos turrones que nos gustaban mucho y jugos de fruta para el receso pues cuándo teníamos laa comida en las manos, Alejo me había dicho que me adelantara un poco porque a centímetros se acercaba la chica que le gustaba y quería hablar con ella pues no quería que ella pensara que él estaba conmigo osea que ya tenía a alguien, cuando eso no era verdad, ni siquiera tenía novia puesto que se quedó ahí a propósito hasta que ella esté sumamente cerca de él y yo desde el otro lado de la calle lo miraba intentando ligar mientras tanto revisaba mi celular y luego de un descuido los ví hablando mientras sonreían, pues eso me gustó bastante que en consecuencia él se dió cuenta que yo aún continuaba ahí parada como una sospechosa entonces me miró disimuladamente y le hice un gesto dándole suerte que me guiñó un ojo y se volteo rápido. Entonces como ví que se iba a tardar decidí entrar sola a la clase con los libros, los turrones y los jugos en las manos, contenta por Ale y al día con los trabajos prácticos.

En la puerta del aula buscaba un lugar vacío para sentarme pues me paraba de puntitas para ver mejor y en el centro a tres escaleras para arriba había uno vacío al lado de un chico que estaba sentado esperando a que entrara el profesor para iniciar la clase, subí los tres escalones para llegar hasta el asiento y le pregunté si estaba ocupado que al parecer no me había escuchado y tocándole el hombro volví a preguntarle con un tono de voz más fuerte que la anterior.

- ¿Disculpa, está ocupado el lugar?.

  Me miró y se disculpó primero por no haberme escuchando largando una sonrisa nerviosa.

- No, no adelante - acomodandose en el asiento llevando su mano para tapar su boca y con la otra enredaba la lapicera entre sus dedos. Se notaba nervioso.
  Era incómodo el silencio y el sonido de los demás estudiantes hablar alrededor de nosostros, porque a mi derecha estaban sentados una pareja que escuchaba su hablar y se estaban diciendo lo mucho que se amaban que por cierto también resultaba incómodo y un poco vergonzoso.
  Yo estaba ahí entremedio de un chico guapo y esa pareja que hacía que mis nervios se notaran, saqué mi teléfono para mirar la hora-y también para de alguna manera cubrirme de los nervios con eso- y el profesor tenía cinco minutos de retraso, entonces como no tenía ningún mensaje y ninguna notificación importante lo bloqueé para ponerlo en el apoyabrazos y recostarme un poco para esperar a que el profesor llegara. Estaba con la mano en mi mejilla haciendo que mi pelo caiga para el lado donde estaba el chico. El cuál al acomodarse tiró mi pelo con su codo.

- ¡Auch! - me quejé sin darme cuenta que él era el principal responsable. No pasaron segundos que él se asustó y me miró asustado fijamente, ahí pude ver que tenía unos hermosos faroles verdes. Creo que lo había quedado mirando con cara de boluda.

- ¡Uh! Disculpa disculpa, no me di cuenta - mojó sus labios pues no evité mirarlo por unos segundos ya que:"por dios es  hermoso", pensé. Hasta que miró confuso hacia adelante.

- ¿estás bien? - levantando una ceja. Tomé aire y apreté mis labios pues había hecho un papelón pero me había gustado porque almenos tenía alguien con quién hablar aunque me incomodaba que fuera el chico más lindo de la clase pero viéndolo de ese modo había logrado que me hable.

- Si, si gracias… por… preguntar - me había trabado cómo nunca con las palabras y en eso entraba el profesor a la clase.

"Buenas tardes multitud", habló por el micrófono. "Espero que estén al día con los trabajos prácticos, hoy tendrán que formar grupos de a díez y uno deberá presentarlo con los nombres de todos. Para eso deberán juntarse porque tendrán que hacer física y uno será el ordenador"

  Aclaraba el profesor con las copias en las manos. "Tienen tiempo hasta el miércoles, estos son días de evaluación ya que es un modelo del parcial".  Sentándose en el escritorio. Realmente no tenía grupo, solo éramos Alejo y yo. Aunque para todos era la popular de la clase yo no me veía así, necesitaba ocho personas más y completabamos el grupo, en parte se me hacía complicado buscar ami sola a alguien quien hiciera grupo con nosotros. Alejo siempre era el que encaraba y en estos momentos él no había entrado a clase.

- ¿Nos dan poco tiempo no crees? - Nerviosa me atreví a preguntarle. Él contestó con esa postura seria que me vuelve loca en los hombres.

- Si, no sé cómo haré… no he tenido tiempo de hacer amigos como para formar un grupo - quejosamente llevó su mano a la frente.

- Bueno en eso coincidimos… - me miró después de tocar su ojo - yo tampoco tengo muchos amigos no creo poder terminar el trabajo - sonreí sin mírarlo.

- Pero pareces una chica inteligente y que está al día con los trabajos prácticos… ¿o me equivoco? - buscó mi mirada levantando las cejas. Me gustaba que hiciera eso.

- Bueno no creo ser una nerd pero me gusta cumplir con las tareas - sonreímos juntos. Tomando un poco más de confianza levanté la mirada.

- Hagamos el trabajo juntos - esperé su respuesta. Me miró sorprendido mientras fruncía el ceño al sonreír.

- ¿Segura? - dijo contento. Asentí.

- Claro, ¿que te parece si nos juntamos en mi casa y así terminamos el trabajo antes, quieres?… mmm? - arrugue la frente al no darme cuanta que no sabía su nombre.

- Ah perdón, soy Austin - saludo con un beso en la mejilla.

- Un gusto, soy Valentina - sonrió. Yo hice lo mismo al ver su cara.

- El gusto es mío - mojó sus labios.

- Lindo nombre - tocó su ojo. Puse un mechón de pelo hacía detrás de la oreja.

- Gracias, tu tienes… es decir me gustan tus ojos - sonrió de costado. Definitivamente me había hecho poner nerviosa.

- No digas eso.

- ¿Por qué? - negó sonriente con la cabeza.

- Porque no es cierto - frunció el ceño.

- Espera te pusiste como un tomate - sonrió.

- Ok basta, solo diré que también me gustan tus ojos - levanté una ceja. Río.

- Está bien, ¿Cómo podré comunicarme contigo para realizar el trabajo? - preguntó serio.

- Mira este es mi número, márcame o enviame un WhatsApp - expliqué. La clase había terminado.
Salimos hablando juntos hasta el portón de la calle principal, nos saludamos con un beso en la mejilla y acordamos en vernos al día siguiente en mi casa para hacer el trabajo práctico pues ya tenía su número, antes me preguntó si me volvía sola a casa pero su cara cambió cuando le dije que tenía que esperar a un amigo y entonces dobló la esquina y desapareció. Yo tenía que caminar unas cuadras hasta el garaje del auto y me acordé que Alejo no había entrado a clases él cuál se había enfadado en un principio conmigo porque no le caia bien Austin. Porque para él, el chico que ahora es mi novio era muy antipático y egocéntrico.
  Austin siempre le cayó bien Alejo y eso me encantaba.

Aquel día en la facultad fué sin dudas el mejor día para nosotros dos porque Ale había hablado con la chica que le gustaba desde hace tiempo y nunca había podido hablar con ella, yo había conversado con el chico más lindo de la clase e iba a venir a casa dentro de veinticuatro horas, estaba muy emocionada.









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