CAPÍTULO 42 "Nuestro primer beso"

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Segunda Temporada

Dormidos nos habíamos quedado en la playa. Me desperté por el ruido de los niños que jugaban a centímetros de nosotros y reían a todo pulmón. Mauro dormía profundamente y no me habían dado ganas de despertarlo pero de todos modos tenía que hacerlo, no iba a dejarlo sólo ahí acostado con la arena fría por el clima ventoso. Aunque parecía un gato de lo acurrucado que estaba, no me aguanté la risa y de bajito lo llamaba.

- Mauri...Mauri - le susurraba, pero jamás pensé que hablaría estando dormido.

- Solo un segundo más - habló de bajito, provocando que mi carcajada saliera del todo y él despertara sobresaltado.

- ¿Que pasó?, ¿Que hacemos aquí? - me miró con esos ojos abiertos y bien celestes por el sol poco notorio.

- Nos quedamos dormidos - sonreí.

- No estás hablando en serio - se sentó mirando para todos lados con la boca abierta.

- Vamos, vamos a desayunar algo - me levanté extendiendole la mano.
Él me agarró e hize impulso para ayudar a levantarse. Sólo encontramos un par de zapatillas al lado del cartón en donde habíamos dejado como cama para acostarnos, mis Vans no estaban. Entonces nos pusimos a buscarlos por los lugares que recordabamos haber estado pero nada, a lo que tomamos como robados y por eso me puse un poco triste. No tenía a mis zapatillas favoritas, habían desaparecido.
Mauro se apiadó de mi y decidió quedarse en medias y darme ami sus DC que tanto amaba, a lo que me quedaban enormes. Mis piesesitos eran súper pequeños al lado de los suyos, él parecía ser unos treinta y ocho y yo unos treinta y cinco.

Mucha diferencia.

Mientras caminábamos hacia un café, la buena suerte comenzó a llover a cántaros y con más razón el viento no nos dejó seguir buscando. Nos quedamos sentados abajo de un lugar en donde no nos tocara la lluvia y así luego llegar al hotel donde estábamos nosotros. Todo parecía horrible que ya nos imaginábamos que algo peor nos ocurría por la tanta mala suerte que teníamos hasta ese entonces pero eso cambió totalmente cuando un deportivo rojo se frenó frente de nosotros y alguien de adentro nos gritaba cuando las ventanillas se habían bajado.

- Suban!, Vamos!.

Mauro y yo sólo nos mirábamos con el seño fruncido intentando entender lo que estaba pasando. Pero abrimos los ojos a más no poder cuando bajaron el vidrio y al mirar bien nos dimos cuenta que los de adentro eran nada más que Eneas con Gaby, mi primo Benjamín y mi ex Novio Mateo, a lo que nos mirámos sonrientes y sacándome las DC descalzos, subimos al coche rojo _que no se de dónde lo habían sacado pero yo me subí porque ahí iba mi hermano_ saludaron y nosotros hicimos lo mismo.

En todo el camino a la casa de Mateo, Mi ex. No dejaron de decir boludeces literalmente aúnque parecieran unos idiotas, solo querían llamar la atención. Mauro se copó con ellos, en realidad no sabía nada que Mateo y yo, ya nos conocíamos desde mucho antes, desde que tengo Catorce años para ser exacta.
Bueno simplemente ellos se pusieron a hablar un montón de tonterías sin rencores algunos por parte de mi ex. Por parte de mi primo Benjamín hablamos un poco en el camino y sentí como que me había tirado unas indirectas con respecto a Mariano que ahora pasaba a ser el innombrable, porque Mauro me dijo que tratara de olvidarme de él y eso era exactamente lo que quería hacer pero es que Benjamín me quería sacar información al parecer. Mariano, el innombrable, me había comentado algo acerca de Benjamín, recuerdo que me dijo que había peleado con éste y otros dos tipos más que no me dijo quiénes eran pues él tampoco lo sabía o quizás no lo recordaba.

DIME QUE SOY UN PSICÓPATA© ✔️[Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora