El mate de la alfa

Cap13

En la manada "luna sky" después aver superado la pérdida de la luna Elena, vino una etapa de esplendor, el Alfa lunev empezó a formar alianzas con varias manadas Europeas, emprendiendo unos cuantos viajes con la esperanza de poder encontrar tal vez a su mate, pero desafortunadamente no había señal de esté, en ninguna.

Ahogando las esperanzas, cansada de hacerse falsas ilusiones, se concentro en la búsqueda del Cazador asesino de sus padres, con la ayuda de su beta y amiga Cassandra, como también Dylan su amigo y aliado, con la excepción de Jhon, esté había sido mandado por ella a supervisar una zona donde se habían reubicado híbridos, al otro lado del mundo.

Cada día era revisado el perímetro del territorio de la manada, por lo que había escuchado, varios vampiros se revelaron contra el Rey vampiro Adrián, por qué estaba acatando las órdenes del consejo del cual era parte, y estaba prohibido atacar a el pueblo humano.

Así mismo, varios de sus guerreros le había comentado que habían visto a varios vampiros pasarse cerca de los límites de la manada. Siendo así aumentaron la seguridad.
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Alfa lunev:

Me encontraba en el despacho revisando unos papeles, cuando ordene revisar el perímetro ya que pronto anocheceria.

Entro Cass al despacho y me miró fijamente, sabía que pasarme los días encerrada en mi despacho no era lo mejor, pero me ayudaba a no pensar tanto.

Se  acercó a mí me dijo:
+. Alfa!, Dejé eso por hoy porfavor ¿si?, Puedes seguir mañana ¿no?.+ Me miró con carita de perrito y no pude negarme.
-.Aaahh bien.. ¿para qué?.- era mi beta pero además mi mejor amiga siempre sabía cómo convencerme.
Sonrió por mi respuesta.
+Vamos lunev a dar una vuelta y que te distraigas un rato, no tardaremos lo prometo.+
-.bien.. pero solo poco tiempo Cass.- asintió, y salimos de la casa, adentrándonos cada vez al bosque.

Aspiré el aroma de la naturaleza y me sentí relajada. Dejé salir a mí loba y Cass hizo lo mismo dimos un paseo alrededor.

De pronto mi mirada cayó en una chaqueta que apestaba a sangre de vampiro pero no contenía olor de quién podría provenir, me inquiete al pensar en un intruso, recorrimos más caminó y encontré a mis hombres rodeando algo o alguien no lograba oler algo.

Me acerqué hasta donde estaban y lo que vi me sorprendió era un jovencito muy apuesto, tez blanca, labios color rojo carmesí, cabello negro como la noche, y con sus ojos cerrados que expresaban en su rostro ternura, tirado en el suelo, un poco sucio, y con un poco de raspones en el rostro se veía que era un humano, uno de mis guerreros lo estaba oliendo y se subió a él sin querer, me vió y se bajó de inmediato haciéndome una reverencia me dejó acercarme a ese muchacho y nada no olía a nada.. cómo podía ser que no tuviera olor me inquiete.

Ordené que lo llevaran a la casa, para poder curar sus raspones y después de despertar, pues supongo que dejarlo regresar con su familia que a lo mejor estarían preocupados por este joven.

Nos dirigimos a casa y lo metieron a la habitación de huéspedes, y con cuidado empecé a limpiar esos raspones estaba por alejarme para dejarlo descansar.

Pero depronto me sujeto la muñeca y murmuro.
+.Quédate... no me dejes...no te vayas.. porfavor.+

Mi mirada cayó en el agarre que hacia en mi muñeca, sentí algo extraño. Me volví a reincorporar a lado de su cama y lo observé, parecía ser un jovencito de no más de 12 años, tal parece que aún a su corta edad a sufrido, me le quede contemplándolo que no supe cuando me quedé dormida.

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En la mansión del Sr. Gales:

Acababa de llegar con los pocos hombres que me había acompañado, y me alerte al ver el panorama en la entrada no había nadie vigilando estaban las puertas abiertas, en el pasillo yacía los cuerpos de mis hombres sin vida y también una gran parte de mi servidumbre. Mi mirada recayó en el suelo lleno de sangre humana, varios de mis hombre habían perdido a sus esposas, e hijos que trabajan conmigo y que se habían queda a vigilar la mansión. Mi mirada recayó en el cadáver la joven mujer que justamente hoy había llegado con retardo, en su cuello se encontraban marcas de estrujamiento y leves marcas de colmillos en su piel.

De repente se escuchó un ruido en una de las habitaciones parecía ser que provenía de la mia, me dirigí a ella con cautela, seguido de mis acompañantes, abrí la puerta lentamente y me encontré con mi cocinera Gloria temblando de miedo y al verme me abrazó sin objeción, me sentí extraño por ese gesto, pero trate de comprender a la pobre mujer.

+. Señor....por fin regresó.+
Fue lo único que dijo porque se puso a llorar sin detenerse.

-.Gloria, tranquila ¿qué ocurrió?.-
Ella no me contestó, solo empezó a temblar..
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