Himler ex sicario

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Hugo se fue junto a Peter en la ambulancia, los demás los siguieron en el microbús que Dai había alquilado.

- ¿creen que sea una buena idea que todos vayamos al hospital? - cuestionó Ambra - dudo que eso sea productivo, recuerden que la Reina se quedó solo en casa con Betty y dudo que ellos estén precisamente bien con eso.

- vayan al hospital ustedes, yo tomaré un taxi para ir a cuidar a esos dos niños - Ester suspiró sin remedio.

- no, no, iremos a dejarte y luego vamos al hospital, ¿ok? - Juan la miró.

- como quieran - se alzó de hombros.

Fueron a dejar a la chica y ella se quedó en la casa mientras los demás se fueron.

- ¿Ester? - se extrañó Betty - ¿qué haces aquí?

- vine a asegurarme de que no vayan a matarse... - se sentó - por cierto, ¿qué estás haciendo tú con ropa de Tanner?

- es mi ropa de psicóloga - le explicó - estuve atendiendo a mi paciente...

- claro, ¿dónde está Chris?

- está dormido... - señaló el cuarto - empezó a hablar de Kitty y esas cosas y luego se fue llorando hasta dormirse, no creo haber sido una buena psicóloga, pero no te preocupes, para animarlo un poco acabo de ordenar comida de muchos restaurantes - le mostró el teléfono de Chris y sonrió.

- mm, claro... - fue a verlo y estaba dormido.

- ¿ustedes qué hicieron? ¿y por qué solo viniste tú? - empezó a hacerle preguntas.

- hicimos muchas tonterías, y Peter empezó a sentirse mal, así que los demás están con él, yo vine a asegurarme de que estuvieras bien.

- estamos bien, pero la comida aún no ha llegado y tengo hambre...

- descuida, ya llegará... - la calmó. Betty empezó a entretenerse jugando con Colita y los demás animalitos que estaban ahí.

Luego de unos cuantos minutos, el timbre sonó, por lo que la niña se puso muy emocionada.

- iré yo - Ester la detuvo y fue a abrir, ahí estaba un repartidor de comida.

- hola bella dama, no solo te traje la comida, sino la diversión - dijo malicioso y sacó unas esposas.

- eh, creo que nos estamos confundiendo un poco - ella se alejó y él la siguió, por lo que empezaron a corretearse por toda la casa - ¿qué es esto?! - se espantó cuando él la atrapó y empezó a desvestirse él mismo.

- así me gustan, me encanta que se hagan las difíciles.

- n-no, enserio no sé quién eres - se asustó mucho, él siguió sin hacerle caso por lo que Ester recurrió a usar la fuerza y le dio una tremenda patada por donde no alumbra el sol.

- auch! - el tipo cayó de rodillas al piso - no era necesaria tanta violencia! ni que te fuera a violar!

- ¿quién eres y por qué estás aquí? - ella fue por la pistola que compraron y lo amenazó.

- oye oye tranquila - él se veía muy extrañado - sé que puedo tomar a la gente por sorpresa y que tengo muy muy mala fama, pero ya no soy un sicario, ahora soy animador de fiestas y una persona llamó para ordenar mi "paquete especial", dijo que tenía hambre.

- fui yo! - dijo Betty molesta - ¿dónde está la comida?!

- creo que llamaste al número equivocado... - Ester suspiró mirando a la niña - este sujeto seguramente se aprovecha de la gente para sacarles dinero!

12 ángeles, 1 amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora