Al día siguiente Dai se levantó tarde, cuando bajó al lobby se dio cuenta de que todos lo estaban esperando. Luego fueron a buscar a los ángeles y como era de esperarse, no los encontraron.
- esto es inútil - suspiró Dai algo decepcionado y se sentó en una banca de cemento - no están aquí!
- tranquilo! - Ambra se sentó a su lado - de seguro van a aparecer, deberías relajarte un poco!
- tienes razón - suspiró otra vez - creo que dejaré que las cosas fluyan.
- que se haga la voluntad de Dios - dijo Gabriel.
- no creo que vayamos a encontrarlos pronto - confesó el ángel - debo resignarme a quedarme en la tierra por siempre - comenzó a reír - digo, a menos que un astronauta me lleve a mi casa! pero claro... como si esas cosas pasaran!
- tranquilo - Juan se sentó a su lado - como decía mi padre... necesitas vacaciones!
- ¿vacaciones? - se extrañó - ¿estás seguro? - Juan asintió con la cabeza.
- ¿hay algún lugar donde quisieras ir a conocer?
- ¿la torre de Pisa? - dijo Kitty bromeando - ¿el Empire State? ¿El Salvador del mundo? - Gabo sonrió al escuchar este último.
- pues... hay un lugar - sacó su mapa y señaló Estonia - dicen que tiene bonitas playas, me gustaría ir ahí.
- Dai - se acercó Hugo - ¿estás seguro de esto?
- el gran sacerdote siempre está seguro de lo que hace! Gabo... encarga los boletos, hoy mismo nos vamos.
- espera - se asombró Ambra - ¿hoy?!
- bienvenida al club! - Kitty le dio un codazo.
- ¿me perdí de algo? - apareció Peter comiendo un raspado de limón.
- ven acá - Dai hizo una señal para que se acercara y cuando Peter fue hacia él, este le quitó el raspado y se lo comió - tienes buen gusto!
- pero... - Peter se quedó muy extrañado y Hugo se burló en silencio.
- deberíamos regresar al hotel - sugirió Paulo - el vuelo es en unas horas.
- si - dijo Dai y le entregó las llaves a Ulises - señor Calderón... lleva a la chica a su casa para que traiga sus cosas - le dijo un poco malicioso y el chico, sorprendido, asintió con la cabeza.
- los acompañaremos! - dijeron Peter y Hugo con la intención de interrumpir su momento con Ambra.
- pudranse! - les dijo pero no tuvo más remedio que llevarlos.
Luego de unos minutos de estar conduciendo guiados por Ambra, al fin llegaron a su casa.
- es aquí - le dio un beso en la mejilla a Ulises y entró a la residencia, él se quedó en shock.
- huy Ulises! - lo molestó Hugo - ya vas a conseguir novia!
- no - dijo serio - estoy bien soltero... gracias.
- ¿seguro? - Peter sonrió malicioso, este asintió con la cabeza con la mayor seriedad del mundo.
- que aburrido - se cruzó de brazos el Brasileño - yo antes literalmente tenía una novia por noche, ahora se volvió mi trabajo!
- ¿alguna vez te han dicho que te pudras pelipecas? - dijo Hugo indignado - eres un puerco!
- lo dices porque ni siquiera has dado tu primer beso y tienes 26! - lo molestó y Hugo se sonrojó apenado.
- ya cállense - se desesperó Ulises.
Tiempo después Ambra estaba lista y Ulises condijo hasta el hotel, mientras lo hacía hubo un incómodo silencio hasta que Peter empezó a silbar una canción romántica llamada "Quizás Quizás Quizás" para fastidiar a Ulises.
- discúlpeme - le dijo a la chica y detuvo el auto, se pasó al asiento de atrás y comenzó a pelear con el otro chico.
- que le pegue! - comenzó a cantar Huguito - que le pegue!
- niños! - los regañó la chica y se llevó a Ulises de la oreja hasta el otro asiento - ya cálmense!
El chico volvió a conducir hasta que llegaron. Luego, cuando todo ya estaba listo, subieron al auto y Paulo los condujo al aeropuerto.
Pasaron las horas y emprendieron su viaje a Estonia, cuando aterrizaron, Dai rentó un microbús allá y condujo hasta el hotel que escogió. Se distribuyeron en las habitaciones y Dai reunió a todos en el lobby.
- oficialmente estamos de vacaciones - dijo algo alegre - y el día está soleado y tranquilo ¿por qué no vamos a la playa?
- suena bien! - dijo Kitty y todos menos Ulises fueron a ponerse trajes de baño, luego se dirigieron al lugar.
- oye Ulises - Peter se acercó a él - ¿qué te pasa? ¿no te gusta la playa?
- es que está en sus días! - lo molestó Hugo.
- no soy una mujer - se cruzó de brazos.
- ¿y entonces?! - Peter le dio un codazo - vamos a nadar! ¿o te da miedo?
- era bombero - lo miró serio - ¿cómo le voy a tener miedo al agua?
- no importa - suspiró Huguito - entonces hagamos un castillo de arena!
- ¿estás seguro de que no eres un niño? - lo molestó Peter. Hugo le dio un empujón.
- oigan! - Dai se acercó a ellos tres con un helado de fresa en la mano - ¿quién lo quiere?
- yo! - dijeron rápidamente.
- ¿ah si? pues... a quién le guste el helado de fresa es una señorita! - sentenció Dai.
- igual lo quiero! - dijo Peter.
- señorita! - comenzó a molestarlo Dai - señorita! ahora si ¿quién lo quiere? - los 3 se quedaron callados - ¿a quién le gusta el helado de fresa? - siguieron sin responder - ¿a nadie? entonces me lo comeré yo! - comenzó a comerlo y se fue.
- que gay! - le gritó Hugo a chiste.
- ¿gay me dices? - se acercó en broma y tomó su combate, Hugo hizo lo mismo y comenzaron a pelear a chiste, la pelea fue bastante reñida porque ambos eran casi de la misma estatura y Dai no tenía sus poderes.
- hay no! - Gabriel molestó a Dai - el gran sacerdote peleando con un pequeño niño! - comenzó a reír.
- Hugo va a perder! - comenzó a cantar Peter - Hugo va a perder!
La pelea siguió hasta que Dai dejó al pobre en el piso, pero por suerte no le sucedió nada porque la arena amortiguó su caída.
Continuará...
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12 ángeles, 1 amor
Fiksi PenggemarDaishinkan afirma no sentir amor, pero cuando sus 12 hijos están perdidos, 12 personas completamente diferentes estarán dispuestas a entregarlo todo para ayudarlo, incluyendo su amor incondicional, demostrando que el amor esta presente sin importar...