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capitulo 6

Viajar en coche jamás había sido tan incómodo y más aún cuando los niños se quedaron dormidos tan solo al subir al coche, Blake iba de copiloto, pero tampoco aportaba ningún tema de conversación; por otro lado Aixa manejaba como estatua sin virar a los lados a menos que fuera para cruzar alguna calle.

En la radio sonaba una linda canción coreana llamada love myself una canción que Aixa amaba en particular por la letra que hablaba sobre amarse a sí mismo.

Aixa estiro la mano subiéndole un poco de volumen al radio.

—No te molesta, ¿cierto?

—No, no, para nada.

El silencio volvió a reinar al igual que la incomodidad que flotaba como humo dentro del auto, Aixa miro a los niños por el retrovisor dispuesta a informarle a su copiloto lo hermosos que eran sus hijos. Abrió la boca decidiendo en mirarlo si le diría algo, sería muy grosero de su parte hablarle como si el no estuviera ahí, pero el sonido de una llamada entrante a través del enlace del carro le corto la inspiración.

Volvió a estirar la mano ahora presionando el botón en el volante del coche para tomar la llamada, la música paro y la voz de un chico resonó ahora por las bocinas dejando atrás la bellísima voz de uno de los siete vocalistas del grupo en la radio.

—Hola hermosa— Aixa rodo los ojos después soltó un suspiro aburrido, sinceramente no deseaba hablar con él, después de la última vez que hablaron y ella termino con una mejilla adolorida, se juró no volver a estar a solas en la misma habitación con él.

—Que es lo que deseas Stev...

—Quiero verte cariño, que arreglemos las cosas.

—No hay nada que arreglar Stev.

—Estoy en tu departamento, amor.

—No llegare... me quedare en casa de mis padres— dijo despectiva, oyendo el movimiento ofuscado del otro lado.

—Oh, vamos Aixa. Tu y yo sabemos que no iras, o al menos que vayas a la fiesta del amigo de tu hermano. Siendo así ahí estaré también yo...

—Tampoco iré... no me apetece beber, ni tampoco verte Steven.

—Oh, vamos cariño ambos sabemos que te encanta— Aixa miro con los ojos abiertos a Blake quien le regalo una sonrisa ladeada volviendo la mirada a las calles de la ciudad, ignorando a duras penas la charla que mantenía la chica con su —"novio"— quizá.

Aixa enfureció, Steven no podía estar insinuando eso, menos delante de este hombre que no la conocía bien, ¡¿ahora qué pensaría Blake de ella?! Que era una alcohólica que pasaba de fiesta.

Blake miro boquiabierto a la chica a su lado quien había empezado a hablar en un idioma que él no comprendía pero de algo si estaba seguro y era que la chica contenía en ese pequeño cuerpo suyo todo un arsenal de defensa. Miro por el retrovisor a los niños, aún estaban detenidos en un semáforo en rojo, el trafico estaba empeorado conforme se adentraban más a la ciudad, Abei se removió en su lugar dejando caer la cabeza en el hombro de su hermano y el volvió la vista a la chica a su lado observando ese bello ceño fruncido en su fruncida cara.

—Vous et moi ne sommes rien, Steven. Et si vous m'appelez encore pour m'agacer, je vous poursuivrai en justice pour ce que vous savez déjà...— (Tu y yo ya no somos nada Steven. Y si vuelves a llamarme para molestar te demandare por lo que ya sabes.)

Lo siguiente que se escucho fue la otra línea colgada no sin antes haber maldecido en aquel idioma que habían estado hablando Aixa y Steven.

Mordiéndose el labio Aixa giro en el siguiente cruce —la-lamento eso.