Tenía aproximadamente diez minutos viendo fijamente al técnico trabajar en su pc.
Cuando compro su computadora no imagino que la tienda le enviaría ese hermoso hombre que parecía tallado por los mismo angeles, ver como sus músculos se tensaban y fruncía el ceño al conectar los cables era otro nivel de sensualidad.
Joey era un joven no muy apegado a la nueva tecnología y cada vez que podía defendía medios antiguos, la única manera de que su amiga le convenciera de escribir en una computadora fue mostrándole que no gastaría tantas hojas y podría enviar todo por email, así fue como le convenció de decirle adiós a su maquina de escribir.
No podía evitar ver a su técnico y morderse su labio inferior, sus dedos picaban por correr a escribir docenas de historias eróticas donde él hombre frente a él sería el protagonista.
- Listo. Su computadora ya puede ser usada correctamente.
- oh.. Si.. Sí, gracias.. ahmmm.. ¿debo pagar extra?
- No, todo corre por cuenta de la tienda.
- Oh entiendo.. ¿Supongo que debe irse? - Joey quería darse cachetadas, estaba hablando como tarado y haciendo preguntas estúpidas. Vio al técnico sonreír de manera cómplice. Seguramente se estaba riendo de él internamente, estaba seguro que ese hombre sabía lo hermoso que era.
- Supone bien..
Le acompañó hasta la salida de su casa y le despidió. Pero antes de cerrar la puerta sintió como el hombre la trababa con su pies.
- ¿Eh?
- Me llamo Henry.. Si tiene alguna duda en computadoras o en otras cosas puede llamarme - le dijo mientras metía la mano en su bolsillo y le daba una tarjeta.
- Oh... Soy Joey, seguro, si debo llamar a la tienda preguntaré por usted y..
- Es mi número personal.
- Vaya...
- No lo olvides.. Puedes llamarme cuando quieras y para lo que quieras.. - le dijo antes de irse.
Joey estaba súper sonrojado y no podía dejar de sonreír, quizás las computadoras no fueran tan malas... Quizás debería ir al otro día o por una impresora....
#Fin
