Give me back my body!! [Bang Chan]☆

D I E C I N U E V E

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Sky se dejaba llevar por la melodía pegadiza de Every Night de Exid. Movía inquieta sus pies de un lado a otro mientras esperaba los resultados de la resonancia que le habia hecho, o más bien que le dijera su padre que todo estaba bien.

Hundió su mano derecha en su bolsillo para sacar su celular y volver a repetir la canción, para que se volviera escuchar a través de los auriculares.

Ella estaba sentada en la sala de espera, pero a unos metros podía ver el consultorio de su padre, varias personas salían y entraba del aquel sitio, que eran atendidos por su progenitor.

Haru la había visto hace varios minutos acompañando a unos pacientes, y pero se detuvo a preguntar como estaba, y ella sólo respondió un simple "Bien".

Miro al pasillo que se extendía a la derecha, vio aquella mujer caminando acompañado del rubio. Bajo su mirada al saber que se aproximaba Chan y su madre.

— Oh, Sky, cariño ¿Cómo estás? —Preguntó la señora sonriéndole.

— Bien —respondió devolviendo la sonrisa. —. ¿Qué hacen aquí? —Preguntó Sky, sin recordar lo que había comentado Haru ayer.

— Venimos a que vean la resonancia de Chan —Respondió la madre del rubio. —. Sé que también te desmayaste ayer, me imagino que por eso estas aquí.

— Sí, mis padres querían descartar algún problema que pudiera tener debido al golpe que me di cuando me desmaye —Aclaró Sky mirando a Chan.

La mujer sonrió pero después comenzó a buscar algo con la vista. —. ¿Sabes donde esta el consultorio del doctor Rodríguez? —Preguntó la señora.

— Ese de allí —Señaló Sky sonriendo, en donde se encontraba el consultorio de su padre.

Ella asintió y le ordenó a Chan que se quedase con Sky.

Ninguno de los dos dijeron algo para poder entablar una conversación, solo se mantuvieron en silencio mientras miraban a los pacientes, enfermeras, o doctores pasar de un lado a otro sin parar un segundo.

Sky se quitó lo auriculares y los guardo en el bolsillo de su sudadera, y inclino su cabeza para mirar el techo blanco, pero la voz del australiano hizo que lo mirase.

— Sky..

— No, Chan —Lo interrumpió sin dejarlo hablar.

Estaba muy claro lo que había dicho ayer, y aunque sonase muy egoísta era mejor así en muchos términos.

Ella no podía permitir que Chan fuera ofendido, que recibiera burlas, o cualquier tipo de ataque de sus compañeros, porqué le dolería mucho, y también tenía muy claro, que a sus amigos no le agradaba ni lo más mínimo, y por lo tanto, tampoco iba permitir que él los perdiera.

Ella sabia muy bien que era estar sola, no confiar en nadie ni siquiera en su propia sombra, para venir y arrastra a Chan esa vida. No lo quería. Si quería que fuesen amigos debían hacer así. Aunque doliese.

— No —Habló Chan obstinado. —. Sky no importa nada, si no puedo hablarte.

— Solo lo dices para que acepte que debemos hablarnos —Rodó los ojos la venezolana, sabiendo que Chan era más dramático que una novela hecha en Venezuela. —. Es mejor así.