INTERCAMBIANDO DESTINOS

Introducción

Juliana

Solo tengo 20 años y el ser la única hija de Jacobo Valdés, no me es tan grato porque mi padre, aunque es muy cariñoso espera demasiado de mí.

Él quiere que a futuro me haga cargo de los negocios de la familia, los bienes raíces y la bolsa de valores no son para nada mi fuerte, mis padres son desde siempre emprendedores y aun cuando se podría interpretar que me tienen consentida pues no es así.

Mi madre es la DISEÑADORA Guadalupe Valdés, ella confecciona de manera magistral desde un calcetín hasta un ajuar de novia.

En cambio, a mí no se me da eso de coser botones y mucho menos el diseño.

Mis papas me exigen que termine la carrera de negocios Internacionales, a cambio de eso puedo estudiar a la par fotografía que digamos es mi pasión

En mi reciente cumpleaños mi padre me regalo una cámara fotográfica profesional y es sin duda el regalo que más agradecí.

Mi madre me regalo un viaje para dos personas a la isla de Bali, todavía no sé si iré con mi novio Sergio o con mi mejor amiga Fernanda

Sergio es un chico lindo, es mi novio desde que cumplí la mayoría de edad, ese fue requisito de mi padre, pues decía que si salía embarazada de menos no sería siendo una pubertita.

Mi padre y el de Sergio están muy contentos de que nosotros seamos novios, dicen que su sueño es que el algún tiempo formalicemos y lleguen pronto los nietos, las familias Henkel –Valdés, estarán unidas no solo por los negocios sino también por nosotros sus hijos, realmente todo es perfecto.

Sergio y yo consideramos que estamos muy jóvenes para casarnos y hemos platicado que nos gustaría esperar de menos un par de años. AL menos no es ahora cuando quisiéramos tener descendencia, es más ni siquiera ME IMAGINO casada.

Me encantan las fiestas al contrario de Sergio si fuera por mi haría fiestas diarias pero El a veces es un aguafiestas que prefiere andar en su coche.

También se enoja porque unas dos veces por semana me gusta ir al autódromo y tomar uno de los autos de la escudería de mi padre y correr la velocidad me da adrenalina al por mayor.

Me da miedo tener una vida tan resuelta es como si viviera en un mundo donde hago lo que quiero sin restricciones, mi lado económico está resuelto y el lado sentimental ni se diga Sergio es muy especial.

Valentina

A mis 24 años estoy a punto de terminar mi carrera de negocios ha sido muy difícil para mi familia sostener mi carrera, aunque a la par el periodismo es lo que más me apasiona.

Ser la mayor de los hijos de la familia Carvajal Pineda, realmente es un compromiso para mí es como si fuera mi responsabilidad sacar adelante a mi familia, no vivimos en la opulencia, aunque económicamente hay problemas en la pequeña editorial de mi padre.

Espero que esto cambien cuando mi papá me permita colaborar con él en el negocio, mi padre es excelente, es el mejor diría yo, pero se la vive trabajando, algo así como un vicio, porque sábados y domingos también está en la oficina o quizá es una forma de huir de los problemas financieros.

No es sencillo, vivir en Estados Unidos, y que papa tenga que pagar la escuela de mi hermano Henry, que según esto está estudiando Psicología, con especialidad en español, le digo que eso es trampa porque mamá y papá nos han enseñado idiomas alternos.

Además, Henry es todo lo contrario a mi tan desparpajado, nada le da miedo y para colmo tiene problemas de alcohol a sus 18 años ya se ha metido en algunos conflictos con la ley.

Mi hermanita menor Eva, tiene 15 años y ella no da tanto problema, pero al final de cuenta esta en la edad de la rebeldía.

Mi madre se llama Lucia, es muy joven creo yo y muy bella administra la casa de manera magistral y por las tardes hace pasteles para llevar al centro de caridad donde es voluntaria, no tenemos de sobra, pero tampoco nos falta, por lo que nos ha enseñado que compartir con quien menos tienes es una bendición.

No me gustan las fiestas ni los ruidos fuertes, amo sin dudar estar en la naturaleza eso me permite soñar con tener una vida mejor, y me encanta pensar que viajo a tantas partes de mundo como lo permite mi imaginación.

Papá dice que sueño hasta con los ojos abiertos, lo que él no sabe es que me da miedo cerrarlos porque se pueden volver realidad, y la verdad es que papa dice que cuando sueñas y vuelas alto el golpe es doloroso y se te puede romper el corazón, o hasta el alma.

Mi papá dice que es mejor no soñar y vivir con los pies en la realidad, por lo que no me gusta estar en el mundo de la fantasía, sino por el contrario vivo imponiéndome metas cortas, la primera de ellas es terminar mi especialidad para trabajar en serio y poder viajar.

Dentro de mis planes de vida no está el casarme creo que ninguna mujer debe depender de que un hombre te mantenga y mucho menos se siente dueño de ti, bueno eso creo la verdad es que no creo en el amor sin interés.

Mi único pasatiempo es escribir, la poesía, y los cuentos son como las cosas que más me traen paz, a través de la escritura viajo, vivo y ella me permite ser yo, quizá por la dificultad que tengo para hacer amigos, creo casi nada en la amistad.

El único amigo que tengo es Leonardo, es un niño de una posición económica envidiable nos conocemos desde el 5to. Grado, es un chico como todos bastante inestable pero siempre está ahí cuando lo necesito.

Algún tiempo fuimos a la misma congragación ahora sus padres pastorean su propia iglesia, viajan tanto a dar predicas que Leonardo casi siempre está solo o por no decir con mi papá parece más Leonardo su hijo que mi propio hermano

Algo que me encanta es cocinar, lo hago tan a menudo como lo permite la economía y claro en los cumpleaños de la familia, amo salir al jardín y asar carne, salchichas pollo, me gusta la vida campirana.

En la universidad casi no tengo amigos porque en lo que ellos se divierten yo tengo que subir a mi bicicleta e ir hasta la casa a modo de ahorro en gasolina, así papa no tiene que ir por mí a la universidad.

La fe en casa no se pierde somos cristianos de cuna y mamá siempre dice que los tiempos de Dios son perfectos.

Ellos dicen que el respeto y la educación abren las puertas del éxito sin olvidar al creador, sobra decir que mi Padre es Pastor de la iglesia del vecindario.