INTERCAMBIANDO DESTINOS

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Jacobo. - ¿Lucia, te molestaría que hablara a solas con Valentina? Por favor dijo esto besando la mano de Lucia en tono de súplica.

Lucia. - ¡Por favor Jacobo puedes disponer de esta casa tal cual si fuera tuya ¡

Pasa a al estudio, que ahí nadie los molestara y podrán hablar con toda la tranquilidad.

Jacobo. - Vale, primero que nada, te debo una disculpa por el comportamiento por el de Juliana contigo, comprendo el porque te fuiste tan prontamente de la casa, no es excusa, pero sin duda Juliana no estaba en sus cabales, se encontraba confundida.

Ahora bien, hay un sinfín de cosas que tienes que saber a lo cual desde ya suplico sin duda tu comprensión pues esto que te diré es demasiado fuerte para mí, estuve pensando si recurrir a ti, aunque eso implica decirte muchas verdades, pero el tiempo que estuviste en la mansión me hizo saber que eres una joven madura y al mismo tiempo sentimental.

Quiero que sepas Valentina que a tu madre y a mí la vida nos ha enseñado que los destinos se cruzan tarde o temprano, la mayoría de las veces la experiencia no se antepone a los errores que cometemos podemos culpar a las situaciones que no tenemos controladas, o a todo aquello que no podemos solucionar, vamos no quiero ser tan rebuscado... Pero mi niña, quita ese rictus de angustia o miedo, soy yo el que tiene pánico de lo que te diré y aún más del pequeño favor que voy a pedirte, me aterra tu reacción.

Valentina, sabía que algún día llegarías a este mundo y que este sería tu nombre, porque desde que conocí a tu madre su mayor deseo era ese tener una pequeña igual a ti, con esos hermosos ojos, y esa sonrisa de sol decía ella.

Te vi nacer nunca olvidare ese día, tuve la fortuna de ser testigo de tus primeros pasos y tu primeras palabras, papá y mamá.

Pero la vida tiene su propia rueda de la fortuna y toda gira, siempre por eso la importancia de la buena consciencia, los buenos actos, era demasiado joven aun y por segunda ocasión el destino decidió separarme de tu madre y su hermosa familia.... Sin embargo.

Es por eso que me atrevo a pedirte esto confiando en tu discreción.

Narrador

Jacobo y Valentina conversaron por alrededor de un par de horas tanto que cuando terminaron su conversación León Carvajal ya se encontraba en casa.

Jacobo.- Buenas noches amigo Carvajal, disculpa que este aquí en tu ausencia si no fuera preponderante, te aseguro que bajo ninguna circunstancia me presentaría a importunar tu vida, por cierto León conocí a tus hijos Leonardo pronto alcanzara la mayoría de edad, y Daniela a sus 7 años es una chiquilla muy despierta, veo que les ha funcionado vivir bajo los preceptos de una religión, tienen temor, amor y agradecimiento al universo, por tanto estoy seguro que los 3 chicos Carvajal tienen unos valores firmes.

León. - A los años Jacobo, ya me explico Lucia el motivo de tu presencia en casa y siéntete bienvenido, no te doy un abrazo porque la hipocresía no va con mi modo de vida, y en efecto los tres tienes valores firmes y una rectitud, que es lo que nos ha enseñado el vivir bajo el amor al Creador.

Jacobo. - Quiero aprovechar para informarte que Valentina prontamente hará un viaje, es algo especial y te aseguro como dirías en tu idioma recibirás sin duda una gran bendición por ayudar a tu prójimo.

León. Ve, Valentina no tengo problema con ello solo nunca olvides hacer lo correcto lo que te hemos enseñado tanto tu madre como yo.

Val. ¿ Papá no te vas a oponer? Te desconozco, de verdad.

León. - No Valentina, ve con Jacobo en este caso el considero tomara las decisiones correctas.

Días después.