INTERCAMBIANDO DESTINOS

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La vida en el condado de Denton no es nada fuera de lo común la única ventaja es que los centros comerciales me quedan cerca y puedo ir a ver los aparadores caminando o mi bicicleta.

Puedo notar que las cosas en la editorial no van tan bien como mi papi quisiera, aunque él lo niegue lo puedo notar cuando estamos en la mesa, el solo come así callado viendo al plato como si mi madre, mis hermanos y yo no existiéramos.

Papi termina de comer, se para de la mesa nos besa a cada uno en la cabeza y se marcha a hacer oración, solo escucho que pide ayuda del creador, pero aun no logro descifrar ayuda para que, así que ayudo a mi madre a levantar la mesa y meto los trastes en la lava vajillas y me voy a mi habitación no puedo estar en paz porque Daniela  se la pasa hable y hable por teléfono.

Así que tomo mi inseparable libreta y corro al único refugio donde puedo estar sin que nadie me moleste, el cedro que esta plantado en el jardín de la casa y me siento bajo su sombra, puedo sentir como el viento juega con mis cabellos, en tanto sale un exquisito olor por la ventana, mi mamá está horneando un pan de nuez, mi preferido.

Por un instante me pierdo escuchando a mi papi orar, como pide por nosotros sus hijos para que nunca nos apartemos dice el del buen camino.

Quiero escribirle algo a Luis mi reciente novio, llevamos 15 días saliendo las cosas van bien, pero, él dice que soy muy fría y nada detallista, jura que escondo mis sentimientos.

Garabateo palabras sin sentido, tengo la necesidad como cada día de escribir algo, de viajar a través de las letras entonces imagino las nubes me escuchan y le pido un deseo, comienzo escribir entonces algo dirigido al universo.

Querido amor de mi vida:

Aun no sé si ya te conozco si tienes los ojos verdes, azules, cafés, si tu barba es partida, no lo sé, no sé si vives en este planeta o en Júpiter o en Saturno, espero que aparezcas algún día para que llenes esta soledad que me hace sentir completamente vacía.

Te imagino con una enorme sonrisa dos hoyuelos en tus mejillas, no sé ni siquiera si ya se tu nombre y te llamas Leonardo, Pedro, Mario, no lo sé.

Pero tengo la necesidad de estar con alguien que ame tanto o más que yo la vida misma, espero que al igual que yo tu amor de mi vida ames el campo, los niños y que seas capaz de ver como en cada nube se dibuja la figura de un dinosaurio, o un oso, o nada estoy siendo cursi lo sé.

Amor sin nombre, sin rostro, quiero que sepas que estoy convencida que llegue a esta parte del universo ese amor entre tú y yo que ha sido a través de todas las vidas.

Querido amor de todas las vidas no sé si en este planeta soy la mujer perfecta para ti, si lleno tus expectativas, pero estoy segura que tu si llenaras todas las mías, será mi complemento perfecto, sueño con alguien que aparte de amarme me proteja, me guie, sé que tu serás ese alguien con quien creceré a la par y formaremos una vida una continuación de la eternidad.

Cuando te conozca sé que me regalaras tus sonrisas yo a cambio te daré mis suspiros, esta carta no queda inconclusa solamente la dejo abierta para escribir la última parte en tu presencia el día que el destino sin duda me presente al hombre de mi vida.

Quiero que vivas en mi mundo, ese mundo tan mío donde a veces duele la soledad, el hastió, quiero que juntos reguemos el desierto que habita en mis adentros para que juntos veamos florecer vida.

Te dejo un beso en la luna para que lo ponga tus labios el viento.

Te ama aun sin conocerte alguien que te espera yo

Valentina Carvajal

Quise escribir un tanto más de la inspiración que tenía, pero el motor del auto de Leonardo me saco de concentración.

Luis: Hola Baby. Vine por ti para ir por un café, un helado no sé lo que quieras, no sales y no todo es estar de la escuela a la casa.

¿qué haces con esa libreta en la mano?

HV. Nada, escribo algo de la universidad, realmente cosas sin importancia, así que déjame guardarla y le aviso a mi madre que saldré contigo por un café.

(guardé a libreta lejos del alcance de mi hermana, me recogí el cabello y Salí dispuesta a pasar un rato con Luis)

Quizás no tanto por mi sino por mi padre quien miraba desde su habitación por la hendidura de las persianas, esa escena donde él estaba convencido que Luis es el hombre de mi vida.

Con la situación tan difícil que tenía mi padre no sería yo quien le daría otro disgusto por el contrario haría todo por complacerle, así que fuimos al centro de Texas, y lo que solo sería un café termino siendo una cena en el majestuoso restaurante giratorio de Dallas, la verdad es que esa sorpresa por parte de Luis no me la esperaba.

HV. Luis, ¿Por qué no me dijiste que vendríamos a este lugar?

Ve mis fachas, de menos hubiera mejorado mi aspecto, ve tu pareces todo un príncipe y yo la bestia del cuento.

Luis: No Baby no digas eso tu eres y luces hermosas no necesitas arreglarte ya naciste hecha una Diosa, eres perfecta.

Hv. Que cosas dices Luis, pero...

Luis: Pero nada, cenemos y volvamos a tu casa, no quiero que tu don Jacobo, mal interprete mis intenciones contigo.

HV. Te agradezco que pensaras en mí y me sacaras de la tensión no aparente que existe en casa, entre los gritos de Dany y el mal humor de Leonardo de verdad que necesito un momento de paz.

Gracias, de verdad por distraerme.

Luis: Pues, aunque llevamos poco tiempo de conocernos, Valentina, quiero ser para ti el novio perfecto, no quiero que te arrepientas de darme la oportunidad que me has dado.

Porque déjame decirte que te tardaste en aceptarme Val, pero también sé que no te gusta la cursilería y mucho menos crees en el amor a primera vista.

Sin en cambio yo estoy convencido de que eres la mujer de mi vida que te he amado desde la primera vez que te vi sentada al lado mío en el salón de clases de geografía.

Fue ahí donde me dije Luis, eres un niño, pero esta princesa es la chica perfecta para tu vida.

Por cierto, nena en unas semanas serán las vacaciones de verano y mis padres están planeando un viaje la verdad esta cena es para invitarte a que vayas con nosotros, ahora que eres mi novia no quiero separarme tanto tiempo de ti.

¿qué dices vas? Digo a tus papás ya les comenté y gustosos dieron el permiso.

HV. Déjame ver leo, porque para mí no es tan fácil la vida como lo es para ti, en verano debo trabajar para ayudar a mis padres.

Al término de la cena Leo me fue a dejar a casa ya en garaje por primera vez me beso, no sentí nada ni emoción ni nada tal vez porque me tomo por sorpresa, pero de reojo vi a mi padre que otra vez espiaba ahora por la ventana de la sala.

Pero no se aguantó y salió a recibirme a la puerta

Leon - Vaya jóvenes veo que esta relación va muy seria y muy formal, Luis, no esperaba menos de ti, tanto tu padre como yo estamos felices por este noviazgo, que va como manda el creador.