XVIII

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Kara

Cuando desperté la mañana siguiente sentí una fuerte presión en mi cuerpo, al aclarar mi vista puedo ver un pelaje blanco que me hace cosquillas en la nariz; no sé ni cómo pasó pero Santi está acostado sobre mi, completamente dormido, incluso puedo jurar que ronca, me quedé un rato viendo el techo, pensando en todo, pensando en ella. Lena Luthor, mi dolor de cabeza, el rompecabezas más complejo que haya encontrado. Ayer accedió a ir conmigo a ver a los niños, además de que por primera vez pasamos una tarde realmente juntas, disfrutando de la compañía de la otra y por mucho que me cueste aceptarlo me agrada su presencia, aunque puede ser una mujer loca a veces tiene una personalidad adictiva que te hace querer más de ella, además de que mis ojos se deleitan con su maravilloso físico, desde que Lena empezó a vivir en esta casa, todo parece diferente; las empleadas parecen más alegres, aman a Santi y Lena, incluso el palacio parece más colorido, lleno de luz, mi vida ha sido más que trabajo ahora que ella está aquí, aunque a veces puede ser un grano en el trasero, no me puedo quejar que ha sido una experiencia agradable. Escucho una suave risa, volteó para ver a Lena recostada en el marco de la puerta mirándome con una expresión diferente, sus ojos tienen un brillo especial que nunca antes había visto, su sonrisa parece ser más brillante de lo normal.

-. ¿Cómoda? - pregunta divertida.

-. No tengo idea de cómo llegó aquí ni a qué horas. - digo, ella suelta una risa.

-. Seguramente en la madrugada. Vamos muchacho es hora de levantarse. - dice haciendo que Santi abra sus ojos y estire sus patas sobre mi cuerpo mientras suelta un bostezo que lo hace levantar la cabeza pero al segundo deja caer su cabeza en mi pecho nuevamente y se acomoda mejor, Lena suelta una risa mientras se acerca hacia la cama.

-. ¿No quieres levantarte aún campeón? - le pregunto, el gruñe mientras se acomoda más entre la cama y yo.

-. ¡Vamos Santi! Es hora de empezar el día. - dice Lena, yo sonrió, jalo de su mano y ella cae sobre la cama y mi cuerpo, quedando la mitad de su cuerpo sobre mi y la otra sobre el colchón, nuestros rostros están cerca, demasiado cerca.

-. ¿Por qué no te unes a la rebelión del sueño? - susurro lentamente, ella suspira, su respiración cálida choca con mis labios, trago en seco; quiero besarla, necesito besarla. Me acerco más a su rostro, midiendo cada uno de mis movimientos, nuestras narices se rozan, su cuerpo sobre el mío me enciende, una llama interminable de deseo me consume, necesito tenerla, casi de manera ilógica. Más sin embargo antes de cometer una estupidez y dejar de lado todo lo que he avanzado con Lena, Santi se remueve para acercarse más a ella, haciéndome recuperar la cordura; estuve tan cerca de tocar el cielo, tan cerca del fruto prohibido.

-. Es hora, debemos alistarnos para ir a ver a tus niños. - me dice y yo asiento. Santi se levanta después de ella y ambos salen de la habitación, yo me quedo mirando al cielo falso, con la respiración acelerada y el cuerpo en llamas. Sin pensar demasiado en lo que estaba a punto de pasar me zambullo a la tina de agua termino medio.
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Al llegar al enorme orfanato nos recibe la encargada del lugar, la mujer me abraza efusivamente, siempre se comporta de la misma manera amable y cálida, incluso cuando empecé a llegar y ella no sabía que yo era la reina, fue gracioso cuando lo descubrió. Ella nos guió al enorme patio donde están los enormes juegos infantiles coloridos que había mandado a construir para mis niños. Lena toma de mi mano con una sonrisa, se mira demasiado hermosa con su sencillo vestido blanco de flores rojas, su cabello está recogido en una coleta alta dejando a la vista el incitador lunar en su cuello, sus ojos verdes parecen más de un tono celeste hoy, ella no necesita mayor cosa para verse hermosa. Siento como un huracán me derriba, puedo ver a varios niños abrazarme fuerte y los demás están al rededor, hay como unos veinte y cinco niños, yo conozco la historia de cada uno de ellos.

-. Escuchen loquillos y loquillas, quiero presentarles a alguien especial, ella es Lena. - digo señalando a la ojiverde quien sonríe.

-. Es muy bonita. - dice Victor con una sonrisa.

-. ¿Ella es tu novia Mamá? - dice Lara, yo la tomo en mis brazos y beso su frente, ella sonríe. Es mi hija, no la adoptó por qué necesito estar casada para adoptarla y hasta hace unos meses no tenía planes de contraer nupcias, no encontraba a la persona ideal para el puesto, todo eso cambio cuando conocí a Lena quién me dará la posibilidad de adoptar a Lara, por eso desde un inicio había querido casarme con ella, esa era la otra motivación que tenía, aunque ciertamente la busque por hacerle un favor a Lois, la forma en como se dió el encuentro me dió la excusa perfecta para montar todo este escenario. Siempre he estado al pendiente de ella, cuando Lara era solo un bebé sus padres tuvieron un accidente automovilístico, ellos murieron en el acto, la pequeña salió ilesa pero tristemente Lara nació con un problema de corazón y sus medicamentos eran demasiado caros para que el orfanato pudiese costearlos, cuando Annette me contó la triste situación de Lara quise ayudar, lo que no esperaba es que me iba a enamorar de esos enormes ojos duales y esa pequeña sonrisa que tiene, no pude separarme de ella desde entonces, aunque Annette se ofreció ayudarme a adoptarla yo quiero hacer las cosas de manera legal, pero ella sabe que Lara no está en adopción, nadie puede optar por ella por más que quieran y Annette me ha facilitado que Lara salga del orfanato para irse conmigo por algunos días o semanas, Lara me dice mamá desde que pudo hablar, jamás me queje de ello, me encanta que lo haga y a pesar de todo soy la única figura materna que ha tenido. Lena me mira sorprendida.

-. Ella se va a casar conmigo. - le digo, los ojos de mi pequeña se iluminan y una sonrisa se apodera de sus labios.

-. ¿Entonces podré irme contigo pronto? - pregunta emocionada.

-. Cuando menos lo imagines estaremos juntas en el palacio, Lena tiene un enorme perro llamado Santi que vas a amar. - le digo.

-. ¡Si! - dice levantando sus manos emocionada, haciéndome reír.

-. Bueno, espero que estén listos por qué haremos muchos juegos hoy. - dije a todos y los niños gritan emocionados. Le hago una señal a mi guardaespaldas, a los minutos el y otros dos más traen muchos juguetes, desde pelotas, muñecas, carros, etc. Baje a Lara para que pudiera ir a elegir su juguete, ella corre hacia el tumulto de niños que esperan ansiosos por los juguetes, yo sonrió al verla.

-. Ya decía yo. - escucho la voz de Lena a mis espaldas.

-. ¿Qué? - pregunto sin entender.

-. Yo sabía que había una razón más por la cuál querías casarte conmigo, ahora sé que es ella, quieres adoptarla y necesitas estar casada para hacerlo.- dice con una sonrisa.

-. Eres inteligente, te concedo eso. - le digo.

-. Lo que no entiendo es ¿Por qué esperar? Digo eres la reina y puedes hacer lo que quieras. - dice.

-. Que pueda no significa que deba, quiero que todo sea un proceso legal, ella es lo más importante para mí, quiero hacer las cosas bien. - le digo.

-. ¿Cómo la conociste? ¿Por qué te dice mamá? - pregunta.

-. Sus padres murieron cuando era una bebé, tiene problemas cardíacos y aquí no podían pagar sus facturas de hospital, yo lo hice, cuando la conocí la ame, jamás me separé de ella, me dice mamá por qué soy la única figura materna que conoce, por qué yo estuve con ella de bebé, por qué yo la llevaba casi todos los días al médico cuando era necesario, por qué siempre he estado allí. - digo, ella asiente lentamente.

-. ¿Cuánto tiempo has esperado? - pregunta.

-. Cinco años. - le digo.

-. Es mucho tiempo. - me dice, yo asiento.

-. ¿Tienes algún problema con el hecho de que adoptemos a Lara? Por qué si es así podemos dejar esto aquí y yo conseguiré a alguien dispuesta. - le digo, ella se queda en silencio por largo rato y sonríe

-. Si ya esperaste cinco años ¿Por qué esperar más? Casemonos el mes que viene. - me dice, yo abro los ojos sorprendida y le miro, ella me sonríe.

-. ¿Estás hablando enserio? ¿No tienes problemas con Lara? - le pregunto.

-. Jamás he hablado más enserio, además tú dejaste entrar a tu vida a un lobo enorme por mi ¿Por qué yo no haría lo mismo con una criatura tan hermosa como Lara? - me dice, yo sonrió.

-. Entonces el otro mes será, nos casaremos. -

El Perfecto suicidio {Completa✔️}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora