El Perfecto suicidio {Completa✔️}

XXI

El dolor de Lena Luthor II
Kara

Lena llora, en silencio sus lágrimas se deslizan por su piel, ya no puede ocultar sus emociones, ya no puede escapar del dolor, es la primera vez que ella se abre ante mi y estoy segura de que es la primera vez que ella muestras sus sentimientos ante alguien más, me siento feliz de que ella haya abierto esa pequeña brecha para mí, que ella me haya dejado entrar aunque sea un poco a su vida, a su pasado, creo que es hora de que yo también haga lo mismo, un suspiro cansado sale de mis labios.

-. Cuando Kripton explotó no solo perdí mi planeta, yo era muy joven. -ella me mira con interés y algo más que no puedo diferenciar, yo sonrió triste antes de continuar.

-. Mi hermana había renunciado dos años atrás a la corona porque quería ser militar. Mis padres sabían que Kripton iba a morir, se habían dado a la tarea de salvar a cuántos pudieran de la aniquilación. Las naves salvavidas eran de muy avanzada tecnología, eran cinco naves con espacio para más de veinte y cinco millones de kriptonianos, lastimosamente el despegue de las naves tenía que hacerse de manera manual. -

-. Tus padres se sacrificaron para salvarlos a todos. - dice Lena con voz rota pero llena de sorpresa, yo le doy una sonrisa triste.

-. Yo solo tenía once años cuando el peso de toda mi gente callo bajo mis hombros, lo irónico es que nunca quise ser reina y sí Kripton no hubiese explotado seguramente habria rechazado la corona también dando paso a la siguiente casa real a gobernar, pero mis padres habían muerto, ante los ojos de mi gente no existía otra persona para gobernar que no fuese yo, mis padres se habían convertido en héroes y yo como su hija debía honrar su legado y así lo hice. - ella baja su mirada.

-. Lo siento Kara. - me dice con total sinceridad, yo le sonrió y niego con la cabeza.

-. Es un honor servir a mi pueblo, jamás podría haber hecho algo diferente, es mi deber, mi destino. -

-. Y eres muy buena en eso. - dice con una leve sonrisa. Ambas nos quedamos en silencio por un rato hasta que yo uno mi valor y hablo;

-. ¿Qué paso con Rhea? - pregunto con cautela. Ella suelta una risa seca, soba sus brazos con sus manos, casi queriendo pellizcar su piel en señal de frustración, más sin embargo se contiene de hacerlo, solo pasa sus manos por sus antebrazos rápida y erraticamente.

-. No quieres saberlo. - dice desviando su mirada, yo tomo su mano, ella voltea a verme, sus ojos brillan por las lágrimas acumuladas pero aún así es hermosa.

-. Si quiero. - le digo, ella desvía su mirada nuevamente.

-. Yo siempre fui curiosa, tenía unos doce años cuando empecé mi investigación de Kriptonita, más sin embargo era algo secreto, mis diarios de campo estaban ocultos dónde nadie podía encontrarlos, tampoco fue algo que hice para querer matar a tu gente, simplemente en una clase de química avanzada el profesor nos compartió el dato curioso de los cristales y sus habilidades reflejativas, de allí surgió la idea, más sin embargo el prototipo que yo hipotizaba también era mortal para los humanos. Rhea tenía un hijo llamado James, el fue mi primer amor, mi primera ilusión. Una noche mis padres me invitaron a una reunión familiar por primera vez. Mis padres tenían mis diarios de campo y hablaban maravillados de como mi investigación podría ayudarlos a...- se quedó en silencio

-. A hacer un genocidio con todos en Europa. - le digo, ella asiente.

-. Yo sabía que la sustancia era peligrosa, yo no quería ser parte de un genocidio en masa, sin importar si fuesen kriptonianos o humanos yo no podía así que me negué. Mi padre mato a James frente a mis ojos, me amenazó con Lois y Rhéa, yo acepte. Al día siguiente obligue a Rhea a irse y nunca supe nada más de ella. - yo me quedé estática, en silencio. Sin saber que decir, sin saber que pensar, yo siempre pensé mal de los Luthor, jamás fueron santos de mi devoción pero nunca me imaginé que ellos llegarían a semejantes límites con su propia hija, jamás imaginé el grado de maldad, ahora entiendo porque Lena es como es. Aunque algo me dice que esa solo es la punta del iceberg, algo me dice que Lena Luthor ha sufrido más de lo que yo pueda siquiera imaginar.