Aullidos de Venganza (Una historia de la Tercera Generación)

Capítulo 8: ¿Melney o Ernledy?

Melody ya no sabía cuál sería su futuro. Sabía más o menos cosas de su pasado, pero eso no le ayudaba en su camino.

—A ver. —Ernie sacó una baraja de fotos y se sentó junto a Melody—. Mira, estos somos nosotros.

Ernie mostró a Melody varias fotos en los que salía con Hannah y Justin, y muchas veces con Susan también u otros Hufflepuffs con los que tenían amistad, casi todas chicas.

Melody recordaba de vez en cuando algunas cosas mientras Ernie pasaba las fotos. Entre todas había una carta que Justin había escrito a Ernie. Él se sonrojó, pero Melody recordó bien ese día.

Flashback

"Melody andaba por los pasillos de Hogwarts para despejarse de estar tanto tiempo estudiando los T.I.M.O.S. Sus amigos seguían en ello, pero ella simplemente no podía más.

—¡Ey, Melody! —Justin saliendo de la biblioteca cuando ella pasaba por allí y le entregó una carta—. ¿Te estás dando un paseo? Guay, cuando veas a Ernie, entrégale esto, anda. Pero no la abras, me mataría.

Y dicho eso salió corriendo. Tenía las manos entre las piernas, era lógico que Justin tenía que ir al baño.

Melody guardó la carta y siguió paseando por Hogwarts mientras su mente no dejaba de pensar en la carta que tenía prohibido abrir.

"Pero no la abras, me mataría" Eso para Melody era una invitación para que lo hiciera, así que consumida por la curiosidad abrió la carta.

Apuesto a que estás por Melody, tío. Si no eres capaz de decírmelo a la cara, hazlo por carta, anda. Ya he empezado yo. ¿Tienes nombre ya del ship? Yo he pensado algunos, pero son un asco. Bueno, me alegro de que hayas evolucionado de Hannah a Melody.

Un saludo, crack:

Justin

Melody apretó los dientes. Era una broma de Justin, él sabía lo curiosa que podía llegar a ser y darle una carta diciéndole que a Ernie le gustaba... ¡Estaba más que obvio!

Pero Ernie también era muy sentimental y fácil de enamorar locamente... y si... ¿le gustaba? Un poco. Eso tenía que averiguarlo. Además, era una buena forma de desconectar de los T.I.M.O.S.

Melody recorrió el castillo hasta la sala común de Hufflepuff y entregó su recado confesando que lo había leído y preguntándole sin vergüenza a su amigo, que parecía duro por fuera, pero era un terrón de azúcar por dentro.

—Esto... —Ernie miraba la carta y luego a la sonriente de Melody—. Sí, debe ser una broma. Agradezco tu sinceridad.

—¡Eres tan mono! —exclamó Melody abrazando la cabeza del chico ya que como éste estaba sentando era lo que tenía a su alcance—. Aunque es cierto que no tenemos nombre de ship.

—¿Qué te parece...? Hum... ¿Melnie? —opinó Ernie, Melody soltó una risita.

—¿Y Ernledy? —propuso ella.

—¡Duaj! —respondió Ernie—. Los dos son horribles.

Y ambos rieron."

—Pensaba que quemaste la carta cuando te la di —dijo Melody, Ernie la observó.

—¿La recuerdas? —preguntó y ella asintió—. Tenías que recordar eso —murmuró Ernie—. Bueno, Mel, tenemos que pensar en...

—Sabes que odio que me llames Mel —protestó ella—. Tú no has perdido la memoria.

—Lo siento —rio Ernie—. Bueno hay que buscar que hacer en tu futuro, pero antes deberías reencontrarte con tus padres.

—¿Sabes dónde encontrarlos? —preguntó Melody.

—Tu madre no trabajaba cuando te conocí, pero tu padre es auror, creo que Bill lo conoce —mencionó Ernie—. Te llevaré a verlo.

Melody asintió.

—Gracias, Ernie.

Ernie sonrió también, guardó sus fotos y fue junto a Melody al pasillo.

—Bueno, en cuanto te vayas... esto será el final entre tú y yo —dijo Ernie—. Así que... Adiós.

Melody miró a los ojos de Ernie detenidamente, quería ver a su familia, quería recordar quién era, pero no separarse de quién le había apoyado.

—Adiós, Ernie, gracias —agradeció ella y soltó las manos de Ernie para volver a casa. Él sonrió satisfecho.