Esperando

Capítulo 54

Nota de la autora: os dejo la canción arriba por si la queréis reproducir cuando os indique. Pienso que se vive más la situación.
Que disfrutéis del capítulo <3

Hugo

Salgo del apartamento de Eva sintiéndome una mierda. No he podido procesar bien todo lo que ha ocurrido. Me duele en el alma haber traicionado a mi mejor amigo de esta manera. Pero lo que incluso más me duele ha sido la mirada de rendimiento de Eva. La conozco a estas alturas tan bien para saber que se está volviendo a acobardar sobre lo nuestro. Tengo mucho miedo ante las decisiones que vaya a tomar a partir de ahora y que una de ellas sea que no quiere estar conmigo más.

No me cabe en la cabeza de esa posibilidad. Mi corazón no puede aceptarla.

Observo mi reflejo en el espejo del ascensor. Aunque Eva me haya limpiado los cortes, el color morado del puñetazo en la mejilla y en el ojo está cada vez más hinchado. Me llevo las manos a la cabeza.

Esta noche tenemos cena con todo el grupo. No sé si Rafa y Anne van a ir, y tampoco sé si Eva lo hará. Yo si voy es sobretodo para encontrarme con Eva y hablar con ella. Quiero decirle que pase lo que pase, lo superaremos juntos. Que no tiene nada de lo que temer.

Dudo en ir a mi apartamento por si está Rafa. La verdad es que no he llegado a pensar en lo que va a pasar a partir de ahora estando los dos ahí. Él no va a perdonarnos de ninguna manera en un futuro cercano, y nuestro lugar de descanso es tan pequeño que por más que quisiéramos no vernos las caras,sería imposible. Uno tendría que dormir en el baño.

Llego a la residencia y subo a mi planta. Rezo con todas mis fuerzas para que Rafa no esté en nuestra habitación, al menos para que pueda pensar en lo que puedo hacer.

El día definitivamente no está de mi parte y cuando abro la puerta, Rafa está caminando rápidamente de un lado al otro, a pasos enfurecidos.

Sé perfectamente cómo es mi amigo. Sé lo que le tiene que estar jodiendo esta situación y no puedo con la pena de haber perdido a mi mejor amigo.

Siempre ha estado para mi cuando más lo he necesitado. Nunca tuve la intención de hacerle daño.

A veces el amor es una verdadera putada, pero cuando surge, surge y no hay ninguna cosa que puedas hacer para no verte envuelto en esos sentimientos.

Desearía con todas mis fuerzas que todo hubiera ocurrido de forma distinta, pero al revés que Eva, yo no me achico ante la situación. Yo quiero pensar que todo va ir bien a su ritmo.

Tengo que ser optimista por los dos porque todo esto habrá sido en vano si no.

—Rafa... —Digo tratando de llamar su atención. De pronto comienzo a fijarme que el motivo por el que está de aquí por allá por el cuarto, es porque está sacando ropa del armario y metiéndola de cualquier manera en una maleta. Y lo peor que la maleta y la ropa es mía —. Rafa, ¿qué se supone que estás haciendo?

Rafa para en seco y me mira fríamente.

—Te vas.

Le miro confuso.

—No puedes echarme...

—Mira como lo hago. No acepto traidores y mentirosos viviendo conmigo. Mira, búscate otra habitación o me la suda lo que hagas, pero te marchas —Hace una pausa para tragar saliva—. Me iría yo, pero yo no soy el que ha hecho que mi novia me ponga los cuernos.

Miro hacia abajo. No puedo sostenerle la mirada.

—Rafa perdóname por favor.

—¿Qué te perdone? —Suelta una risa irónica —. Mira tienes suerte que no termine de rematarte el otro ojo morado. Esta noche tenemos cena y espero sinceramente no tener que verte la cara por ahí, pero si no, menos mal que vienen las vacaciones para poder alejarme lo máximo de ti.