Lo que deseas // UcrArg

Capitulo 39

--¿Sabes algo de Argentina?--Preguntó el canadiense a su novio, acariciando sus mejillas mientras se acostaba en su pecho. Bielo suspiró al oírlo, empezando a acariciar el corto y hermoso cabello pelirrojo del mayor.

--Si, me llamó diciendo que en unos días vendría, la licencia de su padre duraba quince días, así que en teoría volverá pronto.

--Mañana ya son veinte días...

--No me preguntes, he visto a su padre en la escuela así que supongo que Argentina está en su casa. No tengo idea de porqué no va.--El canadiense se sentó sobre su novio, quedando sobre sus piernas para poder mirar directamente hacia donde escuchaba un ruido.

--Mi porqué se llama Ucrania y está en la puerta de tu habitación.

El europeo miró hacia donde decía el canadiense, notando que allí estaba su hermano escuchando todo. Al instante se cruzó de brazos, frunció el ceño y con enfado habló--¿Que quieres? Estoy enojado contigo.

--¿Por que?--Preguntó el pelinegro, ingresando al lugar, incómodo por la posición en la que estaban los otros dos.

--Quizás porque eres la razón por la que mi amigo desapareció.

--No desapareció.

--Pero no le contestaba a nadie y no nos dice nada concreto desde hace casi veinte días. Es casi lo mismo.

--No es mi culpa.

--Claro que si, y lo sabes. Ecuador habló conmigo y ya lo admitiste.

--Sólo me enoje.

--Ucrania, sigue intentando convencerte solo porque yo no te ayudaré. Es tu culpa, arreglalo.

--¿Que se supone que debo hacer, Bielorrusia? Porque no ayudan en nada tampoco.

--¿Siquiera has pedido perdón? No ¿Verdad?

--No contesta.

El bielorruso dio un pequeño grito de frustración, dejando de ver a su hermano para cerrar los ojos y acostarse de nuevo en la cama.

--Intenta no inventar excusas si quieres mi ayuda.

--No estoy...

--¡Claro que si! Y lo haces siempre. Ya, vete de mi habitación no quiero soportarte ahora.

--Pero...

--Nada, ya, fuera. Si quieres a Argentina lo irás a buscar, sino ya no lo molestes Ucrania.

Quiso volver a reiterar, pero en vez de eso gruñó y salió de la habitación. Bielo es tan insoportable cuando quiere.

--¿No eres demasiado duro?

--No, Ucrania es así, no le importa una mierda lo que le diga.

¿Verdad?