—Aquí es.-Dijo Anastasia dejando las maletas en el suelo.
—Hermosa casa —sonrió Christian, mirando hacia arriba. —Y justo al lado de la playa. Qué bonito —se acercó a Anastasia y buscó su boca. —El pequeño beso que te di este medio día no sació mis ganas ... —murmuró contra su boca. —No sabes cuanto he echado de menos estos labios.
—Christian ... —Anastasia se sintió jadeante. Dejó ir su bolso y buscó las llaves a toda prisa. —¿Qué pasa? ¿Quieres estrenar ya la cama de la habitación?
—Claro ... oferta, metiendo la mano por la falda de ella, rozando el borde de sus bragas, pellizcando una de las nalgas. —Mm ... es de noche, el cielo está medio nublado ¿Dónde quieres ir? Mejor espera hasta mañana para ver el panorama de la bella Argentina ...
—Sí, será mejor —la puerta se abrió. Christian metió las maletas de golpe en la casa y abrazó a Anastasia. Apretó su cintura contra él. Buscó su espalda, le quitó la chaqueta. —Mi esposa ... —susurró contra el cuello femenino. —Mi mujer ... mía. —La respiración de ella se aceleró. Dejó que Christian la tomara en brazos. —Llevo toda la semana como un jodido perro en celo ... .-dijo jadeando. Anastasia estaba tan divertida, viendo como Christian buscaba desesperadamente la habitación. —Te tengo —abrió una puerta. —No, mierda —se adentró por otro pasillo. —Ahora sí —abrió la puerta. Ahí estaba, esplendida y enorme, cama matrimonial. No se fijó ni en lo bonita que era la habitación. Tumbó a Anastasia con delicadeza sobre el colchón, y se quitó la chaqueta. La dejó a un lado, seguido el jersey.
—Mm... deja que eso lo hago yo —Anastasia se agachó para desabrocharle el cinturón y bajarle los pantalones.
—No se vale, tú aún vas vestida —la levantó y, entre besos más caricias le quitó el jersey, le bajó la falda. Christian tuvo un escalofrío, se estremeció al sentir como algo helado bajaba por su espalda.
—Oh... te ves tan...sexy —murmuró Anastasia.
—¿Quieres jugar? —dijo Christian, arrebatándole el cubito de hielo. —¿De dónde lo has sacado?
—Del mini bar de la habitación —dijo ella. —Es que tú no te fijas en nada —negó con la cabeza.
—Mm... Veamos... —Christian ocupó la boca de Anastasia con otro beso. Succionó su labio inferior hasta dejarle una marca morada. El sujetador, fuera. —¿Cómo están mis estimados pechos? —dijo él divertido. Y pasó el cubito de hielo por uno de sus pezones. Anastasia gimoteo cuando Christian posó su caliente boca en ese mismo. Contraste, calor con frío, exquisitas sensaciones...
Christian succionó el pezón con fuerza. Anastasia pasó la mano entre sus cabellos. Se arqueó como nunca. Repitió la acción en el otro pecho. Anastasia se separó.—¿Sucede algo? —dijo Christian, relamiéndose.
—Christian... —jadeo ella. —Siento como corre por mis piernas... — se mordió el labio, inocente. Él no sabía a qué se refería en esos momentos. Toda la sangre de la cabeza, le había bajado a la otra cabeza... Volvió los ojos hacia abajo y vio como los jugos de Anastasia se escurrían por los muslos. Pareció llegar en ese mismo momento al éxtasis. Christian gimió. Anastasia había llegado al orgasmo con tan sólo unas caricias.
—¡Santo cielo! —dijo pasándose una mano por el cabello. —Dios, mi amor... —se acercó de nuevo a ella y le besó la boca con furor. Estaba hambriento, y eso solo había hecho que su apetito carnal aumentara. La echó a la cama. —Estás tan empapada... —dijo frotando las bragas de ella. —Di que me deseas...
—Te deseo... —gimoteo Anastasia. —Fóllame ya... lo necesito...
—Sabes que es lo que más quiero en estos momentos... —dijo despegando las braguitas de Anastasia de su dulce coño. —Pero te haré esperar un poco más... —ella se quejó. Christian no hizo caso y se inclinó para besarla toda. —Mm... mi vida, echaba tanto de menos este sabor tuyo en mi lengua —recorrió el estómago de Anastasia con esta, dejando un leve rastro de saliva y se centró en el ombligo. Lo besó, por su alrededor. Reprendió el camino de besos por el Monte de Venus. —Dime qué es lo que quieres...
—Hummh... todo lo que tú me des...
—¿Y si no te doy nada? —Christian vaciló. Anastasia se quejó de nuevo, la hacia esperar demasiado. —Dímelo nena, y lo tendrás. Quiero oír esas sucias palabras salir de tu boquita.
—¿Qué quieres que te diga?
—Lo que quieres que te haga con la boca...
—Ya lo sabes...
—Quiero escucharlo salir de ti... —suspiró. —eso hace que tu mejor amigo aumente más y más... no sabes lo duro que estoy... —Anastasia jadeo al sentir lo grosero que Christian se había puesto. Esa noche la cama iba a arder.
—Quiero que...
—¿Qué...? —la ayudó Christian. —¿Quizás que te chupe? ¿Mm?
—Sí... —jadeo ella de nuevo.
—¿El que? —Christian le pellizcó el pezón. —¿Por aquí, quizás? —Anastasia negó con la cabeza. —¿Entonces,nena? Sigo esperando...
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Protégeme 3
Fanfiction"Protegerlas siempre será mi misión" -Tercera temporada de "protégeme", es necesario haber leído la primera y segunda parte. Historia adaptada al universo de Cincuenta sombras con los personajes de Christian Grey y Anastasia Steele. Todos los crédit...