Me miré al espejo procurando verme bien, esa pequeña conversación que tuvo con Iván me dejó pensando bastante, Christopher realmente tenía interés en mi.
- Tí...o, em, hola - saludé a su novia.
- ¿Ya te vas? - preguntó él.
- Sí, Christopher está por llegar, intentaré no llegar tarde.
- Dame un momento, te daré dinero.
- Tío yo tengo, además...
- Sé que te invitó, pero de todos modos prefiero que andes con más.
Reí sabiendo que no iba a poder contradecir su palabra, siempre procuraba pagar mis cosas con el dinero que mi madre me mandaba.
- ¿Tú de casualidad no conoces la palabra vergüenza? - consultó acercándose.
- Si habla por lo de su hijo...
- Claro que hablo por él, tú ni siquiera conoces lo que es la decencia niñito inmaduro.
- Yo no obligué a su hijo y le voy aclarando que él fue el primero en acercarse a mi, así que si de no conocer la decencia hablamos parta por su hijo.
Toqué mi mejilla sintiendo algo que antes no estaba, ese ardor en compañía de un leve sangrado me llevaron a un estado que no lograba comprender.
Apresuré mi paso al baño, busqué lo necesario para limpiar y desinfectar aquella zona, para mi desgracia no era algo pequeño.
Chris ❤ 21:11 pm.
Ya estoy afuera 😳❤
Erick 21:13 pm.
Dame un momento,
ya salgo 🙏❤
No tenía más opción que salir, Christopher no era tonto y siempre se fijaba hasta en el más minimo detalle, sin duda era un mal día para tener problemas.
- Erick.
- No te preocupes tío, te llamo apenas llegue - dije cubriendo mi mejilla.
No quería que por mi culpa hubiera un doble problema, quizás estaba siendo un idiota pero comenzaba a cansarme de tanto lío.
- Hey, que bien te ves - halagó.
- Gracias, tú también.
- A ver, a ver, a ver. ¿Eso es un rasguño?
- Te explico luego, vamos - pedí.
- Quién fue - detuvo.
Suspiré rendido, su expresión facial me lo decía todo y ya conociendo su insistencia no habría forma de librar.
- La mamá de Gael, está adentro e insiste en culparme a mi.
- Vieja de mierda.
- ¡Espera!
- ¿Te vas a quedar callado? ¿Es enserio Erick?
- Se supone que tiene que ser una noche especial, por favor, yo arreglo las cosas después.
- No harás nada, te conozco.
- ¡Chris, Chris, no!
Tocó la puerta insistentemente, por más que le pedía que no lo hiciera no había modo de hacerlo entrar en razón.
- Christopher, hola - saludó mi tío.
- Cálmate, Chris ya.
Mi nerviosismo aumentó apenas vi como empujó la puerta, sus pasos lo llevaron directo a ella quien posiblemente ya sospechaba a que se debía todo esto.
- ¿Quién mierda se cree usted para golpear a Erick? - encaró.
- A ver, que falta de respeto son esas Christopher.
- ¿No ve como esta señora le dejó la cara a su sobrino? No sé usted, pero yo no voy a permitir que lo vuelva a tocar.
- Tu sobrino me faltó el respeto.
- ¡Eso no es cierto! - exclamé.
- Erick, te dije que no quería más problemas en esta casa.
- ¿Está escuchando? Erick no hizo nada.
- Mide la forma en que me hablas - exigió mi tío para Christopher.
- Yo a usted lo respeto mucho y sabe que le tengo mucho cariño, no le voy a faltar el respeto porque gracias a Dios me enseñaron lo que es educación, pero a Erick no lo va a tocar a nadie.
- Tío, en verdad yo no hice nada, esta señora insiste en culparme por lo que pasó - dije en desespero.
- Mañana mismo llamo a tu madre - añadió serio.
- Hágalo ahora, llame - desafió mi ex novio.
- ¿Perdón? ¿Después de que te trato como si fueras un hijo para mi me hablas así?
- Vamos, Chris - pedí.
- Te quedas en casa, no tienes permiso.
- Tú te vienes conmigo.
Caminé apenas tomó mi mano, a veces odiaba no mostrarme fuerte, el miedo siempre lograba estar un escalón más arriba que mi valentía.
- Cruzan esa puerta y llamo a la policia - advirtió.
- Entonces vaya marcando de una buena vez, porque Erick se va conmigo con o sin su permiso.
