Narra Erick.
Charlé un poco con mis compañeros de colegio antes de tomar camino a casa, necesitaba de algún modo distraer mi mente.
Busqué entre mis contactos el nombre de Joel, no pude evitar subir la conversación encontrándome con la dirección de Christopher.
El moverme por la ciudad aún me costaba, era el típico necio que no aprendía. Llamé a un medio de transporte que me lleve hasta su casa, ni siquiera sabía porque iba.
- Hola señora.
- ¡Hola! ¿Buscas a Christopher?
- Sí. ¿Está?
- Pasa, si está - sonrió.
Me aseguré de cerrar bien, era una manía muy mía.
- Grácias.
- Sube, está en su habitación.
- ¿De verdad?
- Sí, sube - rió.
Traté de pensar internamente que decir, ni siquiera sabía la razón por la cual vine.
Se me hizo tierno ver cómo estaba concentrado en un libro, los marcadores dejaban rastro en cada hoja.
- Hola - saludé.
- ¿Qué haces acá?
- No seas tan amable. ¿Puedo pasar?
Asintió sin dejar de ver aquellas hojas de papel que estaban captando su atención.
- ¿A qué debo está desagradable visita?
- ¿Sigues enojado? - pregunté al sentarme.
- A ver, que quieres. Estoy estudiando por si no te habías dado cuenta.
- Y yo te estoy hablando - dije cerrando aquel libro.
- Está bien, dime qué quieres.
Ni siquiera sabía que quería, en realidad pensé en el primer tema que se viniera a mí mente.
- ¿Has hablado con Iván?
- Lo veo en la universidad.
- Ya sé, pero no lo has notado extraño o algo.
- Algo, está más callado pero debe estar enojado - respondió tranquilo.
- ¿Y lo dices así como así?
- ¿Y qué quieres que haga? No es la primera vez, se le pasa solo.
- Conmigo también ha estado distante, creo que es por lo de su cumpleaños.
- Gracias a tu estupidez - culpó.
- Tú también tienes culpa, quisiste pegarle a Joel - reclamé.
- ¿Y eso qué? ¿Tanto te gusta?
- No es eso.
- ¿Te gusta?
Negué con sinceridad, debía admitir que estaba cayendo en un juego estúpido, yo no era así.
- Sabes que me gustas tú - respondí.
- ¿Y que pretendes con todo esto? ¿Qué vaya detrás de ti rogándote?
- Quizás. ¿Chris, no te gusto ni siquiera un poco?
- No es un tema para mí.
- Intento hacer lo que puedo por ti, pero estoy cansado de esperar cosas de tu parte.
- ¿Cosas por mi? ¿Y las que yo hice por ti? Te llevé a Ollie, te llevé a cenar...
- Por culpa, siempre ha sido por culpa Christopher.
- Tú ni la culpa conoces - reclamó.
- Está bien perdón, solo quise ver cómo era tu reacción al verme con Joel, fue una bajeza - dije sincero.
- Mide tus actos, estuve a punto de golpearlo por unos celos estúpidos.
- ¿Entonces si te dieron celos? - pregunté emocionado.
- Yo no dije eso.
- Lo acabas de decir.
- Lárgate ya - dijo dando un golpe de almohada.
La risa me estaba consumiendo, como pude logré para su pequeño ataque.
Posé mi cabeza sobre su pecho sintiendo como los movimientos eran rápidos, me aferré lo suficiente para que no lograra quitarme.
- ¿Por qué eres tan mentiroso Chris?
- ¿Vas a dejarlo?
- Pero si no estoy con él, solo fue algo como lo que hacías tú conmigo, beso de amigos - contesté.
- Um...no lo sé Erick.
- Estoy depositando mi confianza en ti, sé cómo eres y quiero asumir el riesgo, no seamos novios pero al menos andemos e intentemos conocernos, admite que algo te pasa conmigo - señalé.
- Solo me atraes, quizás me gustas un poco pero...mierda esto suena tonto - negó.
Me atreví a robarle un pequeño beso, estaba entregado y eso era evidente.
- ¿Entonces?
- Lo intentaré, veamos que pasa - contestó.
