Capitulo 7: Visitas misteriosas

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James se alejó sin decir nada más, Ariadna se apresuró a guardar la capa y sentarse en la mesa de Slytherin; esperando a que terminaran de cenar para poder irse cuánto antes a la torre de Astronomía; Ariadna no dijo ni escuchó nada de lo que decían sus amigos, pero Scorpius y Albus parecían entender por qué y no le hablaban mucho.

Cuando la cena concluyó, Ariadna se apresuró a buscar a James entre la multitud; lo encontró hablando con Rose, quien se puso rígida y tensa cuando vio que Ariadna se acercaba.

—Lo siento, James—se disculpó—. Pero recordé que no me gusta estar con traidoras—miró de reojo a Ariadna y se marchó.

—¿Traidora?—dijo Ariadna con el ceño fruncido—. ¡Ja! ¡Algún día te darás cuenta de que yo no soy la traidora, Rosebud!—gritó lo suficientemente fuerte para que Rose la oyera—. Te devolveré la capa mañana por la tarde.

—¿Capa? ¿Qué capa?—preguntó James fingiendo inocencia.

Ariadna lo miró fijamente.

—¡De acuerdo! Suerte con lo que vayas a hacer.

—Gracias, Potter— respondió Ariadna sin darle mucha importancia.

Fue hasta un grupo de Slytherins y caminó con ellos hasta que estuvo alejada de los demás y se colocó la capa, abrió el mapa y comenzó a caminar rumbo a la torre de Astronomía.

Torre de Astronomía

Ya era tarde, hacía un poco de frío y el viento cálido hacía crujir las ramas del bosque prohibido. Se quitó la capa un segundo, pero se la colocó de nuevo al oír la voz de Peeves; Ariadna pensó que se trataba de una simple broma, estaba por marcharse cuando una voz la llamo desde el umbral.

— Sabía que vendrías, Ariadna Malfoy-Granger—dijo una voz áspera.

—Corrección— dijo Ariadna secamente aún bajo la capa—. Ariadna Granger-Weasley.

—Yo nunca me equivoco.

— Nunca es tarde para equivocarse por primera vez— dijo sabiamente Ariadna tratando de ubicar de dónde provenía la voz.

— Eres igual a tu madre, pero no heredaste mucho de los Weasley.

—¿Y a ti quién te dijo que no me parezco a mi familia paterna?— preguntó Ariadna un poco asustada.

—Sólo lo sé...te pareces más a tu mejor amigo, ¿Scorpius Malfoy?, sí...el heredero Malfoy. Hace unos días te enteraste que él tiene dos hermanas, mellizas. Una en Francia y la otra con su madre.

—¿Y tú como sabes eso?.— preguntó Ariadna desconcertada.

—Sé quién es la otra melliza, y quién es su madre...—La voz evadió la pregunta de Ariadna—. Hasta sé que tiene dos medio hermanos y un supuesto padre. ¡Pero qué casualidad!... tú eres igual a la otra melliza en ese sentido...

—¡Sal ahora mismo!.— Exclamó Ariadna ya comenzando a asustarse en serio.

—No puedo salir, Aria—se limitó a contestar la voz—. Te veré en la biblioteca, no diré día ni hora...solo,  apareceré sin que te lo esperes.

—¿Qué?—preguntó Ariadna. Silencio. Suspiró y salió lo más rápido que pudo de la torre.

¿Cómo que era igual en ese sentido a la otra melliza?  ¿Dos medio hermanos?, pero si Rose y Hugo eran sus hermanos de sangre, había fotos de su madre embarazada de ella y de ambos; era simplemente imposible.

» Solo es mi imaginación « se dijo mentalmente.

» Oh, vamos, admítelo, no eres una Weasley del todo« Dijo su conciencia, en cierto modo era cierto, era Granger-Weasley, pero era más Granger que Weasley, o...¿Más Granger que Malfoy? ¡Bah! Eso era estúpido.

¿Yo? ¿Una Malfoy?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora