Solo otro Fanfic Isargas

O por Dios, un dinosaurio!

Pov narrador:

Llegaron a la cocina. No es que Isaza supiera mucho de cocina, pero por lo menos sabía algunas cosas básicas.

- Sabes hacer arepas? - preguntó el mayor, y Martín solo lo miró mal - Bueno pues hoy vas a aprender. Trae un bowl - le dijo mientras husmeaba la alacena.

Martín llegó usando el bowl de tambor - un día llegaré!! No importa la distancia! El rumbo encontrare! Y tendré valor! - cantaba e Isaza rápidamente se dio la vuelta para mirarlo.

- Hércules? - preguntó.

- Si, la conoces ? - dijo dándole el bowl.

- Pasó a paso iré, y persistiré  - siguió la letra.

- A cualquier distancia yo el amooooor encooooontrareeeee - terminarón de cantar juntos.

(Cof ¡paréntesis! perdón por romper el momento, pero cabe destacar que esta no es la letra que sale en la película. Pero quedaba mejor con la historia así que se hm.. perdón por la interrupción. Pueden seguir con su lectura cof)

Yo amaba esa película - dijo Isaza abrazándolo por detrás recargando su barbilla en la cabeza de Martín - Bueno pequeño, hay que poner manos a la obra o este desayuno terminará siendo cena. - dijo dándole de regreso el bowl - una taza de agua - le dijo sentándose en la barra. Martín lo miró confundido - qué? Yo no sé francés y tú padre se va a enojar si no te enseñó algo! - Dijo burlón y Martín fingió una cara de indignación.

- Tiene suerte de que lo quiera un montón - dijo Martín llevándose el bowl para ponerle agua.

- Qué haces? Espera. Deja el bowl en la
Mesa y usa una taza para traer el agua - dijo dándole la taza .

- Esto va a terminar mal si no me ayuda - dijo Martín tomando la taza.

- Que poca confianza tiene, vamos va a salir perfecto. - Volvió a sentarse.

- Agua, que más? - Martín puso sus manos sobre la barra intentando levantarse a sí mismo.

- Sal y mantequilla - respondió Isaza.

- Bien, pero cuánto? - dijo levantando la barra entera de mantequilla.

- Solo una cucharada - terminó riendo.

- Una cucharada. Bien - empezó a mezclar con una cuchara.

- Usa el tenedor. Será más fácil - le sugirió Isaza. Martín incrédulo sacó un tenedor y cuando vio que era cierto solo sonrió de vuelta.

- Y bien? Ahora qué ? - dijo aún din dejar de mover la acuosa mezcla

- Se le agrega la harina poco a poco, una taza - dijo y se paró de la mesa - pondré el sartén y preparare el chocolate en lo que terminas.

Martin vertió la taza de harina en la mesa y le hizo un hoyo en el centro. Le tiro el agua ahí y al ver el desastre que hizo solo le quedó pedirle auxilio al mayor - AAAAAHH ISA!! hice algo mal ayuda!

- No pudiste haber hecho nada mal... o por Dios Martín qué hiciste!? - se puso detrás de él e intentó que los ingredientes se unieran - porqué no le hechaste el agua al bowl? - preguntó Isaza conteniendo una risa.

- No lo sé - dijo volteando la cara para mirarlo - Porqué eres tan lindo? - dijo sin pensar y ambos enrojecieron.

Isaza solo río nervioso, miró sus manos que estaban sobre las de Martín en la masa, le dijo un beso en la frente y devolvió la masa al bowl - ven - dijo dejando el bowl a un lado de la estufa - vamos a hacer las arepas - dijo dándole la forma de plativolo - y luego le pones él queso y la aplastas - dijo mientras lo hacia.

Martín en un estado de transe//concentración logró hacer una primera arepa: deforme pero comestible. - Soy un fracaso - dijo algo triste.

- No eres un fracaso. Solo vuelve a intentarlo - dijo Juan ayudándole a hacerla - mira. Mucho mejor no crees?

- Hm.. si - se dibujo una sutil sonrisa en su rostro.

- Bien, termínalas y dales la vuelta cuando estén doraditas - dijo Isaza regresando a preparar el chocolate.

Martín se sentía más confiado y como todo un artista, así que empezó a jugar con la masa. Esas arepas ya no eran circulares.

- Listas - dijo dejándolas sobre la mesa donde ya estaba el chocolate.

- Pero qué son estas bellezas? - dijo Isaza tomando una arepa con forma de corazón

- Si quedaron bien ? - dijo tomando una con una carita feliz dibujada

Isaza no dijo nada, se sentía extrañamente orgulloso. La sensación le invadió el pecho. Simón estaba dejando marchitar un diamante en bruto. "Él no merecía esto" pensó. Estaba a punto de llorar, así que lo abrazó para que no se diera cuenta - están perfectas - dijo calmándose.

- Estas llorando?  - preguntó Martín sonando preocupado.

- No no... bueno si, pero es porque eres muy talentoso. - se limpió las lágrimas y Martín no dejó de mirarlo.

- No me mientas - dijo.

- Pero lo eres. Por favor. Mira estas joyas. Estrellas, corazones... o por Dios un dinosaurio! - Isaza tomó la arepa y miró a Martín - eres un maldito genio - dijo dándole un mordisco - uno te explica "X" y tú ya le diste la vuelta al abecedario entero.

Martín solo sonrió, no dijo nada pero su sonrisa hablo por el, terminaron de desayunar.

- Quieres ver una película? - Preguntó Martín de repente.

- Claro - respondió Isaza sin pensarlo.