Varios soldados corrían desesperados hacia el salón principal junto a Wen ShanShui, quien al escuchar ese terrorífico sonido se levantó para ver la situación. El gong parecía ser tocado con tanto descontrol como sus pasos apresurados, retumbando por todo el sitio.
Resultaba que otro montón de soldados habían llegado con noticias de la defensa del puente, enviados por Yi Hen y Feng Baoshi para notificar.
Pasada la media noche anterior, Yi Hen y los demás llegaron sin inconvenientes a la zona en donde se desataba la batalla. Los líderes, Chang Gao y compañía, comunicaron la situación de inmediato. Resultaba que Tian Huo había enviado, no uno, sino tres pelotones enormes. Ellos no serían suficientes, incluso si contaban algunos arqueros que disparaban desde lejos, era imposible.
El ataque fue terrorífico, tanto que Yi Hen había ordenado que algunos soldados regresaran para pedir ayuda con urgencia.
El rey Tian LiuYun estaba sumergido en la cólera y solo gritaba maldiciones al aire. Fue hasta que se calmó un poco que pudo hablar con cordura.
—¡El escuadrón que está en espera! ¡Busquen al cultivador rubio de Tian y diríjanse de inmediato allí!
El rey estaba tan ensimismado que no había notado a Wen ShanShui, quien tenía la mirada congelada por la orden que acababa de escuchar.
Varios soldados salieron despavoridos del salón para buscar al joven, y otros emprendieron la búsqueda de armaduras y caballos.
Wen ShanShui se adelantó hacia el frente de la fila, y el rey Tian LiuYun lo vio con claridad.
—¡Tú! Tú eres uno de los maestros. Quiero decir, uno de los más fuertes, ¿verdad? Prepárate, saldrás con el pelotón que irá después del chico rubio. Si ellos no pueden con la situación, deberás estar preparado.
Wen ShanShui estaba con las pupilas contraídas y su piel cenicienta. Más que un hombre, parecía un papel. No era de extrañar que su reacción fuera esa luego de escuchar los gritos del anciano.
Al ver que Wen ShanShui había quedado helado en el lugar, exclamó otra vez con venas casi reventando en su cara:
—¡¿Me estás escuchando?!
Tras ese grito, que casi hace sangrar sus oídos, Wen ShanShui dio dos pasos hacia delante
—¡Déjeme ir ahora! ¡Deje que vaya con You YuMo! —No podía tolerarlo. ¿Él se quedaría allí? ¿Mientras su hermano, compañeros, discípulos, y su persona más preciada, estaban en medio de la guerra? No le gustó nada esa idea.
—¡No! Tengo que esperar, no puedo enviar todas mis fuerzas de una sola vez. ¡Si ordeno que vayan todos ahora, no me quedará nada para proteger el palacio! Necesito esperar, necesito tiempo. ¡Esta batalla la ganaré yo, maldita sea! —exclamó escupiendo saliva—. ¡Prepárate desde ya! No se sabe lo que pueda ocurrir.
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Espadas del Cielo 《Tiānkōng Zhī Jiàn》
Fantasy❀DISPONIBLE EN AMAZON❀ You YuMo, un chico sin muchas preocupaciones y proveniente de una aldea remota, ve como su vida da un giro completo al cruzar su camino con Wen ShanShui, un maestro reconocido y respetado de la Academia del Palacio Tian. Desde...