Crazy Stupid Love (Niall Horan y tu) TERMINADA

8.

Estaba en la cafetería del estudio con los auriculares puestos y escuchando una de las muchas canciones favoritas que tengo. Casi parecía que estaba en otro mundo, era una loca más mirando la pared, llena de ofertas del día. Releí por millonésima vez el mensaje de mis padres. Era un breve:

"Necesitamos hablar contigo, por favor."

Pero como buena cabezota que soy no respondí ni llame y me senté a mirar a la nada en busca de consuelo. ¿Sinceramente? Estaba cansada de todo este rollo, de tener que vivir sola en un país distinto alejada de las personas que me criaron. Mi vida no había vuelto a ser la misma desde que comencé mi carrera, nada es como era antes. Pero lo que me mantenía en mi posición era la sensación de no sentirme apoyada cuando más lo necesitaba, eso no podía perdonárselos. Mis ganas para comenzar a grabar en unos minutos eran nulas. 

-Un dólar por tus pensamientos.-dijo alguien sentándose a mi lado. Era Niall.

-Nada, memorizaba el guión.-dije tan segura que hasta yo me lo creí, que buena actriz soy.

-¿Coca cola?-me ofreció una de las latas de esa refrescante bebida que traía.

-Gracias, es mi bebida favorita. ¿Como lo has....

-Internet.-me interrumpió sonriendo.

Me sorprendí, no sabia si estar asustada porque a lo mejor me iba a secuestrar o si alagada porque quiere saber cosas de mi. Pero igualmente no me agrada que busque cosas en internet sobre mí.

-Niall, me gusta que quieras saber sobre mí pero evita buscarlo todo en internet. Podemos conocernos bien el uno al otro sin necesidad de que me espíes por las redes.

-De acuerdo.-dijo mirándome con su profunda mirada azul.

-¿Y...en que pensabas?-preguntó tras un breve silencio.

-Nada importante, tengo mucho que aprender y me da pereza.-me queje mirando el guión.

-¿Odias tener que aprendértelo?-dijo frunciendo el ceño.

-No, pero hoy si. ¿Me explico bien?-él asintió sonriendo, un gesto que se me antojo adorable.

-¿Qué escuchas?-dijo quitándome un auricular. Yo me reí.

-No tenías que tomarte tan enserio lo de preguntarme todo.-dije riéndome, aunque no se realmente de que me reía.

-Me gusta estar contigo, así que si para evitar tener un silencio incómodo tengo que ser pesado. Lo siento por ti.-dijo enseñando su perfecta sonrisa que nunca se cansaba de mostrar.

-No eres pesado. A lo mejor a veces un poco molesto, como un dolor en el trasero pero es agradable estar contigo.-me burlé.

Él se rió tan fuerte que me dolieron los oídos.

-Que graciosa. No sé porque decidiste ser actriz su hubieras sido buena humorista.-se carcajeó con notoria ironía.

-Perdona pero yo soy muy divertida.-dije pareciendo ofendida.

-Yo creo que no.-dijo riéndose como un loco.

De pronto, en medio de uno de sus ataques de risa, se cayo hacia atrás con la silla. Pero Niall es Niall y siguió riéndose aún estando tirado en el suelo.

-Como dice mi mejor amiga, el karma lo devuelve todo.-me reí al ver sus perfectas mejillas rojas de tanto reír.

Se levantó de un salto y se volvió a sentar. Me miro serio pero comenzó a reírse de nuevo.

-¿Alguna vez estarás serio?-dije luciendo molesta aunque no lo estuviera.

-Lo dudo.

-Me lo imaginaba.-dije poniendo los ojos en blanco. Cuando consiguió parar me miro de nuevo, esta vez sin volver a reír.

-Deberías ir ya al plató. Van a comenzar a grabar.-dijo mirando el reloj.

-¡Oh! Es verdad.-dije y salí corriendo.

-¡Hey! ¡Espérame!-grito Niall detrás mía.

-¿Vas conmigo?-dije sin dejar de caminar.

-Si, hoy nos dejan ver la grabación para "inspirarnos".-dijo haciendo comillas con los dedos.

-¿Y no lo hacéis para eso?-dije confusa.

-Yo me inspiro con otras cosas, como pensar en mi familia o en lo que siento.

-¿Entonces?-dije llegando a donde ya estaban todos.

-Queríamos ver como se graba la película y ya de paso verte actuar.-dijo sonriendo.

Llegamos con el equipo y comenzamos a grabar. Hoy tocaba una escena en la que la protagonista, yo, se ponía en peligro y la salvaba la persona que de verdad la amaba, osea Ryan, ya que la persona que se suponía que debía salvarme huyó como un cobarde. Ñoñerías, me van más las películas con un poco más de acción. Aunque estas películas tampoco me disgustan, me gusta ver cosas que me pongan sentimental de vez en cuando. La peor parte es el beso que le tenía que dar a Ryan, odio besar en las escenas pero es parte de mi trabajo y lo tenía que hacer.

Acabamos cerca de ocho horas más tarde, con sus respectivos descansos. Y juntos nos fuimos a ver lo que habíamos grabado. Había quedado muy bien y realista para solo haber empleado ocho horas, nótese la ironía.

-Me encanta.-dije felicitando al director por las buenas tomas.

Los chicos de la banda seguían viendo la grabación, me acerque a ellos. Niall estaba un poco apartado de ellos y evitaba mirar la pantalla. Me sorprendió verle de ese modo.

-¿No te gusta, rubio?-dije sonriendole. Él me sonrió.

-No me gusta ver como se besan, no soy partidario de besar a alguien que no amas.-dice mirando de reojo a Ryan que nos observa desde una esquina.

-A ti por no gustarte, no te gusta ni mi sentido del humor.-dije riendo al recordar la escena de la cafetería.

Él se río suavemente al recordar ese momento.

-Enhorabuena, _____. La película quedará genial.-dijo Ryan llegando junto a nosotros.

-Igualmente.-le sonreí.

Él me abrazó de repente y me guiñó un ojo antes de alejarse de donde estábamos nosotros. No sé a que venía eso pero no me había disgustado. Él chico olía bastante bien.

Harry, Louis, Liam y Zayn se acercaron a nosotros cuando acabaron de analizar las escenas a fondo.

-¡_____! ¡Actúas genial!-grito Louis abrazándome.

Los chicos eran muy cariñosos y divertidos, costaba no cogerles cariño tan rápido. Sobre todo a Louis que era muy espontaneo y siempre te regalaba una hermosa sonrisa con la que alegrarte el día.

-Salgamos para celebrarlo.-opinó Harry mirándonos a todos. Los chicos asintieron y me miraron a mí.

-Esta bien, salgamos a pasarlo bien.-sonreí ante sus miradas.

-¡PARTY ALL DAY, ALL NIGHT, DJ MALIK DJ MALIK!- grito Zayn.

Todos reímos y nos pusimos de acuerdo para ir a tomar algo. Fuimos a un bar cerca de donde estábamos, había fotógrafos por algunos lados. Pensaban que no se les veía pero todo lo contrario, no podían ser menos disimulados. Mañana habría miles de portadas insinuando que yo tenia algo con alguno de los chicos. Puras chorradas. Estábamos convirtiéndonos en buenos amigos, nada más. Después de una cuantas copas y muchas bromas, sin llegar a emborracharnos, volvimos a casa.