EL CONTRATO

Capítulo 100

Las invito a que lo lean escuchando la canción ☝️☝️☝️

Tres años después. Narra Maximiliano.

Mi vida ha sido maravillosa, desde que Alexandra llegó a ella. Realmente no sé qué hubiera sido de mi, pero agradezco al destino por haberla cruzado en mi camino, aquel día en el aeropuerto, si supiera ella que todavía guardo ese teléfono roto con su tarjeta de presentación, porque ese fue el día en que mi vida cambió, y más cuando firmamos aquel contrato. Yo sabía que ese contrato me trairía algo más que ganancias, me haría estar al lado de la mujer que amo, de la mujer que me robo los pensamientos desde la primera vez que nuestras miradas se cruzaron, esos hermosos ojos que ella tiene me vuelven loco, amo su sonrisa, amo todo de ella, y me hizo el hombre más feliz del mundo cuando aceptó andar conmigo y mas aún cuando me entere que sería papá, Alexandra es una mujer maravillosa, ella es el amor de mi vida, ella es mi alma gemela de eso no me cabe duda alguna.

Desde hace más de tres años, Alex y yo nos comprometimos, pasaron tantas cosas que aún no hemos podido celebrar una boda, y quiero darle la mejor boda de todas, nuestros hijos acaban de cumplir tres años, están hermosos, Ariana se parece un poco a mi, pero tiene la nariz y boca de su mamá y Alexander, ese chiquillo se parece un poco más a ella pero tiene mis ojos, amo a mis hijos, amo a Alexandra y en unos días será mi esposa, el lugar de la boda será en donde le declare mi amor, en donde pedí su mano, en donde los dos nos dijimos cuanto nos amamos.

Estoy a tres días de contraer matrimonio y muero de los nervios, quiero que nuestra boda sea perfecta, lo único que mi mujer no sabe, es que nos iremos de luna de miel, por un mes, mi madre y mi suegra me convencieron para hacerlo, argumentando que necesitamos tiempo para nosotros dos, Alexandra ha tenido mucho trabajo y a mi me pareció una excelente idea, ella no querrá irse sin nuestros hijos, pero tanto mi suegra como mi mamá decidieron cuidar de ellos en nuestra ausencia.

Narra Alexandra.

Por fin, por fin en tres días seré esposa de Max, estoy que muero de los nervios, estoy más nerviosa que la primera vez que me case, que irónico no, este será mi segundo matrimonio, pero siendo sincera lo siento como el primero. Jamás en mi vida creí sentir esto que siento por Max, él me enseñó lo que es el verdadero amor, amo a ese hombre con todo mi corazón, Maximiliano es el amor de mi vida, es el hombre que rompió todas las barreras que yo misma me había puesto, con su amor, con su comprensión, fue destruyendo una a una, llegando hasta lo más profundo de mi corazón, y ahora ya no me veo una vida sin él. Él y mis hijos lo son todo, son mis tres amores y estoy muy agradecida con la vida, con el destino que lo cruzó en mi camino, ese día en el aeropuerto, quien diría que desde ese día mi vida cambiaría radicalmente. Recuerdo lo nerviosa que me ponía, ese día que chocamos y nuestras miradas se cruzaron, recordar ahora como mi corazón latió al mil por hora al sentirme entre sus brazos, he de confesar que tenía miedo, miedo a que pasara otra vez por lo mismo, pero con el tiempo me fui dando cuenta que él era un hombre totalmente diferente, a decir verdad yo nunca había tenido una cita o algo así, los chicos en mi escuela eran un tanto locos y solo buscaban acostarse con las chicas, eso hizo a que yo no les hiciera caso, yo odiaba que ellos hablaran de ellas y por eso siempre me alejaba, pero después de llegar aquí y conocerlo, fue lo mejor que puedo haber pasado en mi vida.
Él me entregó su corazón, su confianza hacia mí, e hizo que yo creyera de nuevo en el amor, amo a Maximiliano de eso no tengo la menor duda, con él soy feliz con él soy una mujer totalmente diferente, con él soy yo misma, con él siento que todo en ésta vida lo puedo lograr.

Toda mi familia y amigos están aquí para ese gran día, Javier dice que lleva tiempo esperando este día, Eva está feliz por mi.
David dice que merezco toda la felicidad del mundo y que nunca me había visto así.