La universidad Wandlung, una de las más famosas de la ciudad y prestigiosas. Su reputación cada vez es mejor y todo gracias a la fraternidad "Alpha", regida por los hombres considerablementes más populares de la universidad.
El lider, William Wang...
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—¿¡Puedes dejar de golpearme!?, ¡te dije que lo siento!
—No quiero escuchar tus malditas disculpas, quiero que me digas que lo tienes solucionado —tomo su camisa—. Ayer estaban la feria, en la maldita feria —aprieto mi puño—, y cerca de Emma.
—Lo se, lo se —levanta sus manos—, y lo estoy solucionando. Estamos re negociando, y lo estoy logrando. No volverán a molestarte, ni a Emma. Por favor, ya estoy lidiando con ellos no sigas enojado conmigo.
Suelto su camisa, aún mirándolo mal.
—Mas te vale, Brian —me giro unos segundos—, ¿y ahora que mierda estamos esperando?, los chicos ya están allá.
—A las chicas —vuelvo a mirarlo
—¿Las chicas?, ¿qué chicas?
Gira su cabeza y señala hacia adelante. Miro hacia donde señala, las chicas de la fraternidad Gamma por supuesto.
Todas resaltan en la oscuridad de la noche con sus vestimentas blancas, yo me detengo en Emma, caminando ultima.
Lleva un vestido de tiras finas que lo hace lucir como el vestido más extravagante en su cuerpo. Esta al lado de Jenny y eso me hace fruncir el ceño.
¿Desde cuando son amigas?
Todas se detienen frente a mi auto y en el de Brian, mirándonos expectantes.
—No sabia que éramos unos malditos choferes —vuelvo a mirarlo
Me sonríe en modo de disculpa y yo lo golpeo una vez, para luego caminar hacia a mi auto.
—Divídanse en dos grupos —me limito a decir, abriendo la puerta
Me adentro y a los segundos empiezan a subir.
La fiesta es de algún caprichoso de esa ciudad pero todos de aquí sabemos que esas son las más divertidas de corromper. Además estará la fraternidad Delta y siempre es un placer pelear con ellos.
Miro por el espejo retrovisor para ver quien entró y me resultan desconocidas. Solo esta esa amiga de Emma, Astrid.
Aprovechare también para estar cerca del renacuajo. No exactamente para molestarla como antes, ella dijo que no quería más y eso hare.
No se que sucede por esa mente que le impide correr hacia mis brazos. Emma es alguien decidida y para nada vueltera, al menos con la mayoría. Pero si conmigo es lo contrario, si yo soy el único que la deja desconcertada como una niña, me sentiré muy halagado.
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