La universidad Wandlung, una de las más famosas de la ciudad y prestigiosas. Su reputación cada vez es mejor y todo gracias a la fraternidad "Alpha", regida por los hombres considerablementes más populares de la universidad.
El lider, William Wang...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Al fin, malditos. ¿Por qué tardaban tanto? —recrimina Venus apenas nos acercamos
—Estábamos rezando —sonrío acercándome a ella, rueda los ojos
—Tuve que pelear con una para que no se sentará aquí —señala la silla
—Venus —rodeo su hombro—. ¿Ves esa zona de ahí? —señalo la escalera que da a la zona VIP
La mira por unos segundos y luego a mi pareciendo entender.
—Ahh —sonríe
—Ahh.
—Estúpida —me empuja—. ¿Por qué no me dijiste? Casi agarro de los pelos a una.
—Porque era obvio —la empujo de vuelta—. Vámonos.
Camina conmigo y al rato los otros dos nos siguen, me dirijo a las escaleras para luego subir. El guardia en la entrada nos deja pasar en cuanto digo mi nombre, ingresamos encontrando pocas personas. Venus corre como una niña hacia un sofá y le hace seña a un camarero para pedir.
Me siento con William a mi lado, Venus termina de pedir las bebidas y siento una mano en mi rodilla. Lo miro unos segundos en los que me besa castamente.
Frunzo el ceño.
—¿Qué te dije de lo de en publico? —muevo mi puño
Sonríe más y rodea su brazo a mi hombro, sostiene mis mejillas con su otra mano para volver a besarme.
—Oigan, oigan —se escucha Brian y me quejo intentando alejarme—. Nada de cursilería hoy, es nuestro ultimo día aquí y hay que despedirlo como se debe.
Me suelta luego de unos segundos y golpeo su costado por la agresividad, finge que le duele ganándose más golpes.
—No empiecen a pelear porque les daré una tunda que no se olvidarán —Venus me jala del brazo impidiendo que le siga golpeando—. Mira, ahí viene el alcohol.
Levanto mi cabeza y veo al camarero acercarse. Baja la bandeja para dejar las bebidas, estiro mi mano para tomar mi daiquiri.
—Ahora si —Brian toma su cerveza—. Ahora solo faltan las chicas.
Dejo de tomar mirándolo mal, Venus parece darle la mejor de sus miradas asesinas porque se le borra la sonrisa al verla.
—Me refería a ustedes, amorcito —sonríe—. ¿Para que otras chicas? —ríe nervioso
—Imbécil —murmura
Continuo tomando. Pasan algunos minutos en donde traen bocadillos, Brian comienza a decir chistes malos, William intenta robar de mi bebida y Venus llama al camarero para pedir mas.
—Oigan, el alcohol me esta dando ganas de bailar —mueve su cabello—. ¿Vamos? —me mira
—Aun no. Quiero tomar un poco mas, luego te alcanzo.
