El Rarito De Los Park

Delicado

A la mañana siguiente, justo cuando el sol comenzaba a ponerse en el punto mas alto, un pequeño omega rascaba sus adormilados ojos.

Café y menta.

Todo. Absolutamente todo lo que su resfriada nariz le dejaba oler era aquel aroma tan perfecto y potente.
La luz del sol comenzaba a molestar.
Maldecia el dia en el que despintó sus ventanas, a pesar de haber estado de ese modo por motivos deprimentes no quitaba el echo de que era perfecto cuando olvidaba cerrar las cortinas.

Estiró sus brazos a los costados, sintiendo la suavidad y calides de sus grises sabanas y notando la ausencia del dueño poseedor del delicioso aroma.

-¿Yoongi?- preguntó en voz alta, aún manteniendo sus ojos cerrados.

-¡En la ducha!- gritó Yoongi desde alguna parte.

El alfa habia despertado una hora y media antes, acomodando un poco los blanquecinos desastres de la noche anterior y tomando una refrescante ducha antes de irse a la escuela.
Si, a la escuela. Tenia clases temprano por la mañana y no podia faltar.

Jimin se calmó un poco. El echo de que Yoongi no le haya abandonado después de lo ocurrido anoche le hacia sentirse feliz.

El peso de sus acciones y su calentura le cayeron encima de pronto, golpeandole duro en su mente y... en su trasero.

-¡Ah, hyung!- gritó adolorido. No habia sido nada cuidadoso cuando se enderezó de la cama.

El grito alarmado de Jimin asustó tanto a Yoongi que no tuvo tiempo ni de cerrar la llave siquiera.
Se coloco la toalla mas cercana y corrió fuera del baño para encontrarse con la imágen mas sexy pero triste que sus ojos dejaban ver.

Jimin estaba desnudo, solo con una suave sabana que cubría su cintura para abajo.
Sus manos sostenian su espalda baja mientras que su rostro tenia muecas de dolor y una pequeña lagrima que resvalaba por la mejilla.

-¿Te duele mucho?- cuestionó Yoongi, acercandose despacio para ayudar al omega a regresar a su posicion anterior.

-S-si.- confirmó en voz baja, aún puchereando.

Guardaron silencio durante unos segundos, perdiendose en los ojos del otro y apreciandose mutuamente.
Los cabellos de Yoongi seguian mojados, haciendolos ver mas oscuros y gruesos. Sus hombros tenian rasguños débiles y su cuello tenia una que otra marca; casi nada a comparación de Jimin.

Marcas, mordidas, rasguños y otras cosas mas adornaban y posaban con orgullo desde su pecho hasta su cuello.

Las mordidas en las claviculas y los chupetones en el cuello, justo donde la marca del Alfa debía ir, le hacian tener un aspecto tan sexy.
Yoongi gruñó por eso, su lobo se mostraba orgulloso por todo lo que habia echo.

-Buenos dias, mochi.- saludó Yoongi, apartando con sus dedos delicadamente los cabellos pegados en la frente de Jimin. Depositando un húmedo beso en los esponjosos labios.
El omega respondió gustoso, soltando un leve suspiro ante el bonito recivimiento de un nuevo dia.- Lamento si te lastimé mucho, te cuidaré bien antes de irme.

-¿Te irás?.- aquello no le gustó en lo absoluto. Seguía en celo, y lo que menos quería era tener al Alfa lejos.

-Solo por la mañana, volveré en la tarde. ¿Deacuerdo?

-Con una condición.- chantajeó Jimin,

-¿Cuál?

-Marca mi ropa con tu aroma. Necesito sentirte cerca o juro que voy a enloquecer.

Yoongi asintió gustoso.
Caminó hasta el bulto donde se encontraba su ropa, notando que esta seguía húmeda por el agua de la piscina.
Estaba en problemas, no tenia ropa para ir a la escuela y tampoco tiempo suficiente para ir a su casa y recoger un cambio.
Otro problema apareció también. No habia llamado a su casa ni tampoco llegó para dormir anoche, tendría que darle una buena explicación a su madre.

-Jimin, ¿me prestas ropa?- gritó desde el armario, escogiendo la ropa que marcaria personalmente para el omega.

-Si, busca algo que te quede.

Yoongi rebuscó en el armario, descubriendo que la mayoria de los pantalones del menor eran de pijama y uno que otro normal.
Terminó tomando prestado un pantalón negro ceñido, una camiseta de manga larga en color blanco y una enorme sudadera de color naranja. La mañana era demaciado fria para solo usar una playera.

Para Jimim escogió algo mas cómodo, dedujendo que este se quedaria en cama todo el dia.
Tomó una pijama e dos piezas en color celeste y un par de calzoncillos de un cajón y salió del armario.

Alzó a la vista la pijama, obteniendo un pulgar arriba por parte de Jimin.

-También tomé uno de los calzoncillos empaquetados que tienes en el baño, espero que no te moleste.

-Los puse ahí para que los usaras.- respondió Jimin, enderezandose de a poco hasts quedar sentado en la cama.
Yoongi colocó algunas almohadas detrás de la espalda del menor para que se sintiese mejor.

-¿Mi bello novio necesita algo más?

Jimin amó escuchar aquello salir de los labios de Yoongi.
Ahora era el novio y omega de un maravilloso Alfa como es Yoongi, no podía estar mas feliz en toda su vida.
Tenia la confianza y la autoestima por los cielos, pero la energía por los suelos.
Estaba agotado, adolorido y necesitaba un baño.

-¿Pondrías a llenar la bañera para mi?- pidió con voz melosa, abultando sus labios para convencerle.

-Y te cargaré hasta ahí mi cielo.-respondió el Alfa, cargando con delicadeza el frágil cuerpo hasta el baño de la habitación.

El agua caliente corria por el grifo, relajando y destensando los musculos de las piernas y caderas del omega dentro de la tina.
Yoongi colocó un poco de burbujas y le tendió un vaso de agua para que tomase los supresores.

Jimin aceptó gustoso, cerrando sus ojos por la sensación de alivio que su cuerpo estaba sintiendo.
Su primera vez no habia dolido tanto como creyó e imaginó que dolería. Yoongi fue tan cuidadoso y delicado con él que se sentía en las nubes.
Su celo no solo se habia enfocado en la necesidad de reproducirse o quedar encinta, no le dominó como creyó y se permitió disfrutar y amar cada segundo en el que él alfa recorría su piel. Monopolizandola como propia.
Pero ahora entendía que el dolor y sufrimientl venia después, repercudiendo justamente en su cuerpo. Su adolorido y cansado cuerpo.

Yoongi seguía ahí, mimando a Jimin y ayudandole a lavar su cabello, importandole poco que sus pantalones se mojasen por el agua que salpicaba de la bañera.
El omega fue levantado delicadamente, ayudado por el alfa que le puso una toalla para cubrir su cuerpo y recostado de nuevo en una recién tendida cama.

Yoongi se tomó la molestia de cambiar las sabanas para que Jimin estuviese más cómodo.

-Tengo que irme mochi, pero vendré en cuanto mis clases terminen. Te lo prometo.

Yoongi besó con cariño el rostro de Jimin, haciendole sonreir y suspirar gustoso.
Al parecer el Alfa era de las personas que se ponian cariñosas y melosas después de una grandiosa noche de sexo.

-Te quiero mucho Jiminie.

-Y yo a ti Principe gatito.

Un capitulo bien soft por el lanzamiento oficial de Life Goes On.
Las tqm a todas. 💜