N U E V E

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El sábado llegó y con él, el cumpleaños de mi mejor amiga. Lo primero que hice según me desperté fue ir hasta su cuarto, tirarme encima de su cama y abrazarla con fuerza mientras le cantaba el cumpleaños feliz a toda voz. Maddie se quejaba a gritos mientras me pedía que la dejase en paz y juraba que era la peor amiga del universo por hacerle aquello.

Me pasé el día preparando las cosas para la cena de amigos que había organizado. Hice la compra, ordené el salón y guardé las decoración más frágil, nunca se sabía qué podía pasar y menos con Hobi en casa. Intenté por última vez convencer a Lucas para que viniese, pero mi llamada fue a parar directamente al contestador de voz.

A las siete de la tarde ya estaba todo listo. Dejé que Maddie eligiese la playlist que sonaría aquella noche y solo quedaba que los invitados apareciesen. Mark y Kai fueron los primeros en llegar, seguidos de Vittoria y Namjoon. Cuando el timbre sonó de nuevo todos esperábamos que fuese Hobi, el último que faltaba por llegar. Intenté no parecer demasiado sorprendida cuando Maddie entró en el salón seguida de Lucas, quien había decidido quedarse a cenar.

Empezamos a cenar tras recibir un mensaje de Hobi disculpándose por retrasarse e informando de que aún tardaría un poco más en llegar. Estábamos todos comiendo tranquilamente mientras charlabamos y le relatábamos a Vittoria y Namjoon algunas de nuestras mejores anécdotas juntos. Mark aprovechó para mostrarnos una selección de las mejores fotos del grupo en la época del instituto y no supe dónde esconderme para morirme de la vergüenza.

Tuve que levantarme para abrir la puerta al oír el timbre sonar. Lo último que esperaba encontrarme era a Hobi acompañado por sus cinco amigos cargados con varias botellas de alcohol.

– Ya hemos llegado. – dijo Jimin más contento de lo habitual.

– ¿Qué hacéis vosotros aquí? – pregunté atónita.

– Estaban todos en casa, me hicieron demasiadas preguntas. No tuve más remedio que contárselo y decidieron apuntarse. – contestó Hobi mientras se llevaba una mano a la nuca y sonreía nervioso.

– Una cena nos pareció un plan demasiado aburrido para un cumpleaños y por eso pensamos en traer la fiesta aquí. – explicó Jungkook.

– ¿Podemos quedarnos? – pidió Jin con una expresión tan dulce que consiguió ablandarme.

– Está bien, pero solo si Maddie acepta. Es su cumpleaños, no el mío. – dije entrando al piso y dejándoles espacio para que se quitasen los zapatos en la entrada.

La cara de Mad al ver a todos los chicos aparecer fue un poema, y no supe si para bien o para mal. El poder de convicción de Jimin bastó para conseguir que mi amiga les dejase unirse a la celebración. Lo que nadie se esperaba era ver la cena convertida en una fiesta en toda regla. Jimin se encargó de volver a poner la música mientras Jungkook y Tae movían el sofá para improvisar una pequeña pista de baile en el salón de nuestro hogar. Yoongi empezó a preparar copas para todos con la ayuda de Jimin y Hobi ayudo a repartirlas.

– ¿En qué momento decidí dejaros pasar? – le pregunté a Jin, quien estaba mirando el panorama con una expresión cómica mientras bebía de su vaso.

– Reconoce que se veía venir. Nos hemos presentado con siete botellas de alcohol, creíamos que era obvio. – confesó antes de echarse a reír – Venga, bébete la copa y pásatelo bien, ya no puedes hacer otra cosa.

– Imagino que no me queda otro remedio. – contesté mirando al vaso lleno de ginebra y Sprite antes de llevarlo a mi boca y dar un buen trago.

Intenté no preocuparme demasiado por el desastre que se había desatado en la pequeña cocina entre tanta botella de alcohol y cosas para picar. Yoongi se sentó en una silla mientras observaba como Tae, Jimin, Hobi y Kai bailaban al ritmo de las canciones que Mad y yo solíamos escuchar para montar nuestras fiestas. Estuve un buen rato escuchando todas las tonterías que Jin y Mark eran capaces de decir, y eran más de las que me podía imaginar.

Shetland (Min Yoongi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora