Me faltan palabras para definir esto,
Para hablar sobre ella,
Me siento contradictoria ,a veces,
Creo que hemos dejado de pensar en las dudas,
Solo nos tomamos de la mano,
Suspiramos fugazmente,
Nos miramos y decidimos no bifurcar el camino,
porque hacer eso ahora nos parece como transitar por la lengua bífida de una serpiente que se ha mordido a sí misma.
Tomo su rostro entre mis manos y me parece estar lo frágil y valioso.
Era más fácil hablar de amor cuando nos habíamos rendido,
Lo asumí con ligereza:
"Sé que el amor se puede transformar"
Tal vez debí haber sido más honesta:
"Siento que te amo y también tengo miedo, es por eso que no he querido rogarte"
Pero sus ojos me queman por dentro
Y me me muero,
Cómo me morí aquel día,
Por abrazarla y hacerla sonreír, sin adelantar ni un solo segundo nuestra despedida,
Sin hacer el mínimo esfuerzo por espantarla,
Solo ejerciendo el egoísmo de disfrutar cada una de sus caricias,
De pegarla a mí,
De darle todo aquello que sale de mi pecho,
Que es todo lo que produce ella en mí.
Y es que hay tanto que me gusta de ella, tantos motivos para quererla.
Está mañana despertaste y yo te estaba abrazando,
Eso ni dudarlo.Mi musa amada,
La que afirma mi cabeza contra su pecho y está en mi mente justo ahora, envío entre mis brazos, pegada a mí cuerpo.