STEAL HIS HEART [KOOKTAE]

{30} SEGUNDO ASALTO

Pov taehyung

Una semana más en este asqueroso hospital. No digo que me traten mal, o que no me encuentre a gusto entre toda mi gente, sino que el olor y ambiente sanitario las veinticuatro horas del día, más el uso constante de los medicamentos y cuidados intensivos que me ofrecen se hace cada vez más aburrido. He sido siempre una persona muy activa, curiosa y que le gusta ir de fiesta.

En cambio, postrado en esta camilla como he estado desde los últimos cinco meses, ha acortado mucho mi vida social y en cierta manera creo que comienzo a alucinar cada vez que me dicen sobre nuevas mejoras de mi estado, no pudiendo esperar por volver a casa, por sacar a mi tannie, por ir de compras con mis hermanos, mimar a mis sobrinos y hacer tonterías con mis amigos, inclusive, tener mi tiempo a solas con Kookie.

Hablando de Jungkook, ha estado muy agobiado ultimamete, entre todo este lio y su propia carrera temo que no duerma muy bien, y en cuanto salga de aquí pienso recompensarselo, porque lo esta dando todo, pendiente de mi, de sus padres, de nuestro "hijo" y sus notas, dejando de lado la diversión y momentos alocados que debería de estar viviendo en esta etapa de su vida.

A veces me arrepiento de haberlo empujado conmigo a este oscuro foso, pues yo mismo decidí acabar con mi rebeldia juvenil con tal de hacerme un respetado y firme adulto, para buscar al asesino de mis padres que tanto me marcó. Yo no he podido disfrutar de mi juventud apenas, dejando esa última etapa antes de la adultez y tras la adolescencia completamente perdida en lo más recondito de mi ser, creciendo demasiado rápido.

Por otra parte, quiero ser un poco egoísta por primera vez en mi vida, quiero quedarme con Jungkook y ver que es lo que la vida nos depara. Tan siquiera tengo veinticinco años, creo que por disfrutar un poco de lo que me queda de juventud no pasará nada.

Mi mirada repara en mi pierna, repleta de vendas aún, con las cicatrices palpables y sin poder moverla ni un misero centímetro. ¿Volveré al cuerpo? ¿Podré seguir ejerciendo en mi trabajo como oficial?

Y da igual cuantas respuestas quiera escuchar, porque se que va a ser un claro y rotundo no. Por parte de mis hermanos, amigos y compañeros de oficio, aparte del no de mi propio jefe. No hará mucho desde que Woosik volvió a visitarme, realmente preocupado por mi estado, preguntando con todo lujo de detalle sobre todos los acontecimientos e información que pudiera brindarle, a parte de mi propio bienestar por supuesto.

FLASHBACK

Las gafas de pasta gruesa se resbalan por mi tabique sin tope alguno, mientras estoy mucho más concentrado en seguir la línea de la historia que Jisoo me regaló hace poco para acabar con mi dura condena hospitalaria.

-Buenas tardes oso invernal. – Levanto mi cabeza sorprendiéndome gratamente ante la repentina e inesperada visita de uno de mis mejores amigos de la infancia.

-¡Hyung! ¿Qué le trae por aquí? – No tarda mucho en sentarse en la butaca junto a mi cama, dejando su abrigo y chaqueta policial a un lado, encontrándose mucho más cómodo para empezar a charlar un rato.