STEAL HIS HEART [KOOKTAE]

{29} SICARIOS

Despertarme y ver que no me encuentro ni en mi casa, ni en la incomoda casa del hospital, sintiendo unos brazos en mi cintura, es lo mejor que me ha pasado en mucho tiempo.

Con la respiración de Jungkook sobre mi nuca, me remuevo para quedar frente a él, quien sigue con los ojos cerrados en el quinto sueño.
Quiero levantarme al baño, pero no puedo moverme por culpa de mi pierna inmóvil, así que con mucha pena termino despertando a Jungkook quien reacciona abriendo primero uno de sus ojos y frotándoselos. -Hola...

Su voz adormilada y unos tonos más graves me hace delirar, aunque su cara y mueca de bebé solo me piden a gritos que lo bese tiernamente, por lo que no me llego a resisitir, dándole un suave piquito que lo hace reaccionar. -¿Llevas mucho despierto?

-No, pero tengo que ir al baño, de lo contrario no te hubiera despertado. -Ríe ante ello, levantándose a medida que estira todos sus músculos bien marcados. -Entonces vamos a ello.

Me ayuda a levantarme, caminando de mala manera hasta la habitación donde me deja hacer mis necesidades, y luego se sienta para revisarme todas las heridas. – Están bastante bien.

-Han pasado cuatro meses, sería raro que no se hubieran terminado de cerrar. – Hago una mueca al intentar moverme, que llega a ser vista por Jungkook quien no se ve para nada tranquilo con ello. -¿Te duele algo? Vamos al hospital, tendría que haberte llevado ayer por la noche en cuento encarcelaron a esos mafiosos.

-Tranquilo, llevo meses sin poder moverme y solo me duelen los músculos, supongo que tengo que empezar a hacer ejercicios. -Me levanta sin esfuerzo alguno, volviendo a la habitación dónde se viste con ropa cómoda pero formal.
-No me quedo tranquilo, desayunemos algo y luego te llevo al hospital de nuevo. – Me echo hacia atrás, queriendo quedarme por más tiempo en la cómoda habitación, en este ambiente paradisiaco junto a mi novio, que al terminar de arreglarse se posiciona frente a mi, con sus dos brazos a los laterales de mi cabeza. -No quiero volver al hospital.

-Solo un par de semanas más, vas a rehabilitación, te tomas las medicinas necesarias para conseguir un peso normal y quitarte esa anemia, y después podrás volver a casa, continuarás con tu vida y encerraremos a esos cabrones. -Sonrió de medio lado al mismo tiempo que nos besamos.

Obligado, bajo a la cocina, donde quedo sentado poco después al no poder permanecer de pie, acariciando a los dos perros que tan solo escucharnos han salido corriendo en busca de atención.

La madre de Jungkook no tarda tampoco mucho tiempo en aparecer por la cocina, saludándonos muy cariñosamente y preguntando por todo hasta que Jungkook la saca, pidiendo que por favor me deje un poco en paz. -¡Yo no te crie así Jeon Jungguk!

-Mamá por favor, Tae no se siente bien, ya tendrás otro momento para preguntarle. – Sirve un par de tazas con chocolate caliente y unos zumos de naranja, con un bol de arroz con huevo y kimchi. -Sé que te gusta más el melón con jamón, pero no he podido ir a comprar. Nuestros desayunos son un tanto más asiáticos que los tuyos.

-No pasa nada Kookie, está perfecto. – Como dos idiotas no podemos dejar de sonreir, rompiendo la burbuja únicamnee por el sonido del falsh de teléfono móvil de Jihyo.

-Perdón, ya me voy. Te iré a visitar al hospital Tae. – Le doy las gracias, justo antes de verla desaparecer para atender sus asuntos en el hermoso jardín de la casa.

Por nuestra parte, desayunamos tranquilamnete, subiéndonos al coche a eso de las doce de la mañana, no sin antes pasar por mi casa y recoger todo aquello que fuese a necesitar durante el perido de tiempo que me quase en el hospital.

Con Kookie ayudándome a apoyar, paso de largo el salón subiendo directamente a mi habitación, de donde recojo, o más bien recoge Jungkook en una bolsa de Gucci, todas mis pertenencias.
Volviendo a bajar a la sala principal, no puedo evitar mirar como han quedado alguno de los cuadros y pared perfectamente blanca, con aún manchas carmín y pintura de los investigadoes regada por el suelo. – No tardarán en quitarlo, solo no mires.