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Jin Ling giro en dirección a esas voces, lo que vio le hizo congelarse

Jin Rulan frente a Jiang Cheng, la mano del adulto se mantenía sobre el dobladillo de la ropa contraria, las prendas del menor cayeron al suelo en un instante, el pecho del chico quedó desnudo.

Jiang Cheng pateó las prendas lejos, después se sentó apoyando su espalda en la pared, tomó la mano de Jin Rulan obligando acercarse.

—Finge bien o Jin Chan sufre —amenazó Jiang Cheng.

Jin Rulan traga duro, obedeciendo las ordenes del otro término sentado sobre sus piernas contrarias, Jiang Cheng sonrió y dio una palmadita sobre la cabeza del menor en señal de aprobación. 

Jin Rulan tomo el rostro del contrario entre sus manos, ambos se quedaron quietos esperando algún sonido.

En poco tiempo escucharon el ruido de pisadas, Jiang Cheng le sonrió y Jin Rulan tembló.

En ese momento la puerta se abrió, Jin Rulan se obligó a besar al otro, el rostro de Jiang Cheng mostró una expresión de incomodidad fingida.

—Maldito —murmuro Jin Ling viendo la escena con un nudo en el estómago.

 Pingxing coloco su mano sobre el hombro del contrario para retenerlo, podía sentir el fu

Por la puerta apareció Wei Wuxian acompañado de unos cuantos guardaespaldas.

Jiang Cheng empujó con fuerza a Jin Rulan, se levantó de golpe y escondió detrás de los guardaespaldas de su esposo.

Todas las miradas cayeron sobre Jin Rulan, Wei Wuxian se acercó a él y en menos de un segundo el sonido de piel chocando recorrió la habitación, Madame Jiang acaba de abofetear a Jin Rulan.

Wei Wuxian dio un chasquido, de este modo los guardaespaldas tomaron a Jin Rulan y lo sacaron de la habitación.

Jin Ling no pudo verlo, pero si escuchar, sus oídos alcanzaron a percibir los gritos de Jin Rulan al ser castigado, eran el dolor de las tablas.

Le dio una mirada a Jiang Cheng sus ganas de apuñalarlo aparecieron cuando una sonrisa triunfante apareció en sus labios.

—Tranquilo —habló Pingxing, minutos después Jin Ling sintió como el agarre en su hombro incremento la fuerza. —Respira, aun tengo que mostrarte algo y necesito que estés tranquilo.

Jin Ling respiro un par de veces, le indicó a Pingxing cuando logro tranquilizarse, el escenario frente a sus ojos cambio, seguía siendo la habitación de Jiang Cheng pero esta vez solo se encontraba Wei Wuxian dentro, él se encontraba distraído leyendo un libro. 

La puerta se abrió, Jin Ling miro a la persona que entró, Jin Rulan tenía en sus manos una tetera y una taza.

Jin Rulan recordó algo y Jin Ling pudo escuchar su pensamiento.

—Vas a intentar envenenar a Madame Jiang —fue la voz de Jiang Cheng. —Antes de darle el té debes hacerme una seña por la ventana para que entre.

Jin Rulan trago duro, hizo una pequeña reverencia mientras llamaba a Madame Jiang, Wei Wuxian le pidió que le diera un poco de té.

Jin Rulan saco de su manga un líquido oscuro, dejó un poco en el interior de la taza sin que de Madame Jiang lo viera, después sirvió el té.

Wei Wuxian lo recibió, Jin Rulan se levantó, llevo su mano a su espalda e hizo un movimiento con ella, Jiang Cheng logró verlo desde la ventana.

Wei Wuxian llevó la taza a sus labios, antes de poder beber el contenido la taza se rompió, en la pared se encontraba clavado un dardo.

La atención de los dentro de la habitación se dirigió a la puerta donde Jiang Cheng se encontraba con un expresión asustada y su respiración agitada. Unos discípulos entraron en la habitación tiempo después, tomaron a Jin Rulan de los brazos cuando Jiang Cheng lo ordeno.