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Capítulo 14: la bestia de la cueva pt2

El olor a sangre por más mínimo que sea lo despertó; la bestia apareció. 

El suelo debajo de sus pies tembló, por un momento Jin Ling quiso engañarse: considerarlo como un terremoto repentino, sin embargo, los gritos y la preocupacion de la gente de enfrente no era causado por el terremoto, no, ni siquiera en la tran tierra había señales de un movimiento de tierra. Lo comprendió, el islote no era un islote, sus pies pisaban el caparazón de la bestia. 

Jin Ling trago duro y vio su vida pasar frente a sus ojos por un breve segundo; su intención nunca fue lastimar a Hanguang-Jun, quería utilizar el miedo y la desesperación de una espada para empezar una negociación, la libertad por algo más valioso para los Lan, pero el repentino movimiento pudo arruinar sus planes. La pequeña herida en el cuello de Hanguang-Jun se hizo más grande, cuando antes era del tamaño de una hormiga pequeña, ahora es del tamaño de un dedo, la sangre no se filtro, sin embargo, la marca roja es una prueba viva de un corte peligroso; Jin Ling temió por todos. 

La empuñadura de Bichen en su mano, la hoja a centímetros de la nuez de Adán del Segundo Jade, a pesar de eso, ningún grito de miedo salió de sus labios. A diferencia de Lan Wangji, los gritos de Wei Wuxian volvían a la vida cada vez que la espada en la mano del chico de amarillo temblaba, el silencio roto por su ruido; al final Wen Ning no lo soportó más, una mano en la boca de Wei Wuxian y el único ruido ahora vivo procedía de sus intentos para hablar. 

La bestia se detuvo, el corazón de Jin Ling se calmó y él agradeció a los cielos por eso, sin embargo, eso no fue lo peor, para su desgracia, su suerte cambió de forma radical, sin poder dar un suspiro la bestia se levantó, la gran cabeza apareció ante los ojos de todos. 

La cabeza de serpiente salió del agua, dos hojas de maple se mantuvieron quietas en la coronilla. A diferencia de todas las bestias que ha visto durante toda su vida, Jin Ling nunca había conocido a una tan extraña: su cuerpo era similar a una tortuga, en especial por su gran caparazón capaz de igualar al campo de entrenamiento del Muelle de Loto, pero la cabeza es tan grande y larga como una serpiente. 

La bestia giró su cabeza para ver a las dos personas sobre su espalda, sus pupilas de una sola línea larga hizo un esfuerzo por enfocarlos, como acababa de despertar su vista era algo borrosa, no distinguía bien que eran aquellos "puntos" en su espalda. 

Jin Ling retrocedió con miedo, una voz en un susurro le dijo: —No. Te. Muevas. 

Una palabra a la vez, lento, corto y bajo; de ese modo lo dijo Lan Wangji. Si hubiera sido otra ocasión Jin Ling no hubiera obedecido, sin embargo, viendo la situación actual decidió confiar en la persona delante de él, aun sabiendo que esa persona no era el verdadero Hanguang-jun de quien todos confiarían de forma ciega. 

No se movió y la calma pareció llegar a sus corazones cuando vieron que la bestia no podía distinguirlos, lentamente la bestia movió su cabeza, miró al agua y el movimiento de su cuerpo se sintió otra vez, ahora descendiendo. Lan Wangji se sujeto de Jin Ling y él hizo lo mismo con el cultivador de blanco, ambos se agacharon hasta tocar el caparazón, si el movimiento era demasiado fuerte, en esa posición la caída no sería tan dolorosa. La bestia dejó de moverse, al parecer había quedado dormida, pero Lan JingYi se movió con la espada en mano, saltó al caparazón de la bestia e intentó atravesarle el cuello, tanto Lan Wangji como Jin Ling miraron perplejos. 

La espada chocó contra las escamas de la bestia a la vista, más nunca logró atravesar la piel, Lan JingYi miró con los ojos abiertos el lugar, aquel punto donde la espada intentó introducirse, limpio y sin rastro de alguna perforación. Hubo un ruido, la cabeza dentro del agua salió de un solo movimiento, el agua de la laguna empapado el borde de tierra y algunos cultivadores, pronto el cuello de la bestia dio la vuelta; Lan JingYi soltó la espada y sonrió con inocencia.