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La expreso en el rostro de la chica les espanto,  los pertenecientes a LanlingJin que continuaban despiertos pensaron que este seria su fin. Luo Qingyang con la mirada fija en su familiar le un regaño, Su She solo asentía para hacerle saber a su hermana que escuchaba cada palabra, la chica respiro dandole una oportunidad para hablar al otro, Su She no busco que decir y bajo su cabeza. 

—Entiendo tu razón, lo hiciste por gratitud y es un aspecto entendible —Su She volvio a elevar su mirada. —Eso me demuestra que pude educarte bien, pero sabes bien que ninguno de los jades es estupido, tú te fuiste de LanlingJin y esta familia esta desaparecida, en algun momento ellos vendrán, lo descubrirán, entonces ¿Qué harías cuando ellos lo sepan?

El chico solo nego, su mente se encontraba en blanco y no podía pensar adecuadamente. Luo Qingyang suspiro, acaricio el cabello de su hermano, luego a la familia detras de su hermano, les informo: —Si quieren agradecer mi gratitud hacia ustedes, no le quiten la aguja hasta que las heridas hayan sanado, si la niñita chillona vuelve a soltar otro grito alertara a la gente de aquí. No pienso soportar al Segundo Jade y mucho menos al hombre que lo acompaña, ¡Me tiene harta!

La familia asintió, ella al asegurarse que los demás hayan entendido la orden se dio la vuelta, acto seguido abandono la habitación, Su She se despidio de las personas en el cuarto y salio detras de su hermana, en sus manos llevaba el traste donde trajo el medicamento. 

Desde afuera se podia escuchar el regaño de Luo Qingyang hacia su hermano por la medicina que preparo, más el tono de este no sonaba afectado en lo más minimo. 

La puerta se abrio, Lan JingYi junto a los otros dos que llegaron tiempo después a esta dimensión, ellos sonrieron por llegar tarde, Jin Ling nego mientras llevaba una mano a su frente. 

Una semana fue suficiente para realizar las acciones que debían hacerse, las heridas de la chica sanaron en su mayoría, Meng Yao tuve el tiempo suficiente para escribir una carta y enviarla a YunmengJiang; igual recibieron respuesta positiva por la hija del lider. Jin Ling junto a sus amigos lograron descifrar algunas cosas del libro que no entendían.

El ultimo día dentro de la torre de vigilancia Meng Yao retiro la aguja de la cabeza de su hermana, ella con lentitud abrio los ojos, se encontraba despierta sin moverse, no le interesaba ahora estar despierta. No bebía o comia nada de lo que era ofrecido por sus hermanos. 

—¡Oye! ¿Acaso quieres morir? —pregunto Meng Yao algo cansado del comportamiento de la chica. 

—Seria lo mejor, si en esta vida no puedo tomar venganza, tal vez convertirme en un cadáver feroz me permita obtener venganza —soltó Qin Su. 

—Imposible, recibiste el apaciguamiento espiritual cuando naciste, aún si mueres será imposible convertirte en un cadaver feroz —le recordo el mayor de los tres. 

—Gege ¿Puedes dejarme hablar con Qin Su a solas? —cuestiono Meng Yao, el otro asintio abandonando la habitación. —Qin Su ven a comer —Se levanto y dirigió a una mesa con dos platos de comida. 

—¿Cuál es el sentido de comer si de cualquier forma voy a morir? —Meng Yao soltó un suspiro cansando, le era demasiado molesto escuchar a su hermana hablar de ese modo.

El chico sujeto los palillos acostados a un lado de los platos, sujeto un poco de comida y antes de llevárselo a la boca hizo su pregunta: —¿Qué dirías si te dijera que conozco la forma de recuperar tu núcleo dorado?

Los ojos de la chica se iluminaron, se sentó de repente y miro fijamente al otro en la habitación, le ordenó decirle como.

Meng Yao se lo diría siempre y cuando Qin Su aceptara la condición de comer. La chica se levanto de golpe, corrió hacia la mesa, sostuvo su plato y los palillos para comenzar a comer. Meng Yao término de tragar el pedazo de carne en su boca, acto seguido le contó.