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Capítulo 11: Volver pt.2

Jin Ling sonrió cuando hombre Lan de nacimiento sostuvo la puerta para él, una sonrisa sobre su rostro blanco ante el "gracias" del otro, sus ojos se encontraron por unos segundos y Jin Ling sintió un poco de pena. De repente una manga amarilla apareció frente a sus ojos, en medio de ambos, rompiendo a su gusto el contacto visual. Primero sus ojos se abrieron llenos de confusión, elevado un poco, entonces la furia fría se volvió innegable; Jin Ling miró a su "esposo" como si quisiera asesinarlo.

Ese Lan con los labios apretados y asintiendo decidió irse, reconoce bien los celos y este hombre llamado Fai Yi es un caldero de ellos; con una sonrisa se despidió de Jin Ling antes de soltar la puerta e irse como los demás Lan que lo habían hecho momentos antes. Jin Ling se despidió con su mano y miró como la espalda de ese Lan se perdía a la lejanía, luego observó a Lan JingYi con el ceño fruncido.

—¿Qué crees que haces? —cuestionó Jin Ling en un susurro.

—Hay un montón de gente aquí, nuestra mentira se caería si la gente no ve a Fai Yi defendiendo a su esposa —pronunció Lan JingYi. —Yo acabó de cumplir, ahora tú actúa como buena esposa y bésame.

—¡Detente ahí! —Jin Ling pronunció alterado, sin embargo, mantuvo el tono bajo para ser solo escuchado por su acompañante. —Aclaremos algo: Fai Yi es la esposa, Fai Ru el esposo.

—Si te hace feliz creer eso, créelo —dijo Lan JingYi. —Pero Fai Yi es el esposo.

Jin Ling elevó su mano listo para dar el golpe contra la mejilla del otro con toda su fuerza, sin embargo, cuando su mano impactó la intensidad del golpe disminuyó hasta ser un simple roce sobre la piel blanca; una verdadera sorpresa para los dos.

Antes que alguien pudiera preguntar la propia voz de Nie Huaisang consiguió la atención de ambos sobre su persona, acomodado detrás de una mesa entre dos ventanas, con una sonrisa agradable en su rostro, sin rastro de molestia por la humillación de hace poco en el patio.

Lan JingYi tomó del brazo al otro y caminó arrastrándolo disimuladamente, Jin Ling notó en el trayecto las miradas extrañas de unas cuantas señoritas de su edad, por desgracia no eran el tipo de mirada que él preferiría, más el asco y desprecio las llenan... ¿qué les pasa?

En la mesa, Lan JingYi se sentó frente a Nie Huaisang y Jin Ling al extremo de la mesa. La mesa rodeada de los cuadernillos con las tres mil reglas, al parecer la gente aquí estaba estudiando; Jin Ling cerró los ojos con cansancio, por fortuna su mente recuerda al menos mil de las reglas.

Nie Huaisang retrocedió un poco de su lugar y estiró el cuello mientras sus ojos miraban a la derecha, entonces su voz salió tranquila: —¿Nadie viene?

Jin Ling miró sobre su hombro, siguiendo la mirada de Nie Huaisang encontró a un grupo de cultivadores Nie vigilando por la ventana, los segundos se sintieron eternos, al final uno de ellos anunció con la voz muy alta.

—Se han ido —ante el aviso, la silenciosa biblioteca se llenó de ruido.

En menos de un segundo un gran suspiro de alivio termino compartido por todos en el interior, los cuadernillos volaron en el aire, intentando topar con la madera del techo; los ojos cansados por fin obtuvieron un poco de descanso y las voces imparables obligadas a callar soltaron de una todo lo prohibido.

El mundo esperó la ida del ultimo Lan para ser libres, su desfile de diversión, chisme y rumores recorrió sin perder tiempo cada una de las mesas; los asuntos importantes se convirtieron en basura olvidada en un rincón.

Nie Huaisang tomó las manos de Jin Ling, el movimiento tan repentino hizo saltar por un segundo al chico más alto del matrimonio Fai, la voz picara de Nie Huaisang dijo.