Oiga vecino#1 |𝘁𝗲𝗿𝗺𝗶𝗻𝗮𝗱𝗮|

033

Ayer después de que se fue la Maria dormí toda la tarde y pase de largo, ahora me duele la espalda si porque dormí en el sillón y mi mamá ni me despertó.

Ahora estoy afuera de la sala, apoyada en la baranda que hay para no caerse.

Esta baranda me a salvado la vida más de una ves.

Una vez por andar jugando a la pelota y querer botar a un ex compañero me resbale por todo el piso y choque con la baranda culia.

Me reí.

—Hola.—dijeron a mi lado

Mire al Ulises que tiene una wea morada en el pómulo, trato de tapársela pero no le funciono.

—Ese no es tu tono de piel.—dije

—¿Que?—frunció el ceño

—La base que te echaste para tapar ese moretón, es más oscura que tu piel.

—No tenía otra.

—¿Que te paso?

—Me puse a pelear con un weon.—solto una risa nasal—obvio le gané.

Rodé los ojos.

—Creo que en mi mochila hay una base, sácala.

—¿En que bolsillo?

—En el chico.

Escuché su risa y le pegué una patada, me pasó la base y la abrí, le eché en la mano y es casi igual a su piel.

—Haber, ven.—le dije y se acercó a mi

Le traté de sacar lo que más pude de la otra base y le eché de la mía, tape lo que más pude.

—¿Me funai' si te digo una wea?—pregunto

Guarde mi base y lo mire.

—¿Que cosa?

—No, mejor no.—se rio

—Oye weon, ¿adonde anduviste ayer?—fruncí el ceño

—¿Me extrañaste?

Apoye mi cabeza en su hombro y suspire.

—¿Que te paso?—puso su mano en mi pelo

—Es que discutí con la Jesús ayer.

—¿Muy grave?

—Si.—hice una mueca

Me dio un beso en la cabeza y me sobo el brazo.

—Ya se van a arreglar, estoy seguro.

—Cuando pienso que todo esta mejorando, todo se va a la mierda otra vez.

—¿Queri' ir a donde fuimos el otro día?

—¿A que hora?

—Como a las cinco o seis.

—Buta no puedo, quede en juntarme con el Pedro.—lo mire

—¿Con el Pedro?—frunció el ceño

—Si, me va a enseñar inglés.

Asintió.

—Me tengo que ir, chao.

No alcancé a decirle ni una wea porque se fue casi corriendo.

El timbre sonó así que me entré a la sala, me senté al lado de la Jesús y ninguna dijo nada.

La clase empezó y empecé a anotar toda la wea que el anotó el profe en la pizarra.

—¿Me pasas goma?—me preguntó la Jesús