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— ¡un momento! — gritó SeHun desde su cocina al oír el timbre, caminando con prisa hasta la puerta mientras limpiaba sus manos con una servilleta. Abrió la puerta e inmediatamente sonrió de una manera amigable y cálida. — ¡hey! — animó SeHun, recibiendo a ChanYeol con una gran sonrisa.

— no creí encontrarte — dijo ChanYeol, adentrándose en el departamento después de cerrar la puerta.

— ¿por qué no habrías de encontrarme?, estos últimos días he estado saliendo temprano de la compañía, me merecía un poco de comodidad —
SeHun se sentó en uno de los sofás, dejándose caer con pereza e invitando a ChanYeol. ChanYeol se sentó a su lado, con las piernas abiertas y los brazos extendidos. — ¿qué te trae por aquí ? —

— necesito pedirte un favor —

SeHun suspiró pesadamente. — ¿tienes problemas con la policía otra vez? —

ChanYeol le miró completamente ofendido. — no — negó de inmediato.

— ¿no? — preguntó SeHun con sorpresa. — bueno...¿qué necesitas? —

ChanYeol rascó su rodilla izquierda, mostrando vergüenza e incomodidad. — ¿podría quedarme a dormir sólo por esta noche? —

SeHun le miró extrañado. — claro, sí — dijo sin dudar. — pero, ¿puedo preguntar por qué? —

— ¿es necesario explicarlo? — se quejó ChanYeol

— Es extraño que no quieras dormir en tu departamento con BaekHyun — añadió SeHun

— quiero un trago — suspiró el menor, masajeando su propio muslo. Levantando la vista cuando observó a SeHun levantarse del sofá, seguido de esto, regresando a su lado con un par de cervezas. ChanYeol extendió la mano, recibiendo la lata fría en medio de su mano cálida. — es la primera vez que duermo fuera de casa en mucho tiempo —

— lo que sea que haya pasado no puede ser tan g- —

— ¿cuál es la mejor versión de mí? — interrumpió ChanYeol, abriendo la lata de cerveza y bebiendo con una mirada perdida.

— ¿por qué me preguntas eso a mí? — dijo SeHun, en medio de una risa nerviosa.

— eres mi hermano, me conoces mejor que nadie...—

— Se trata de Baekhyun, ¿no es así? —

ChanYeol asintió. — entiendo que esté estresado pero me sentí incapaz de continuar con la discusión, era como si algo me impidiera volverme en el gorilla en el que me convertía cuando me sentía atacado —

— ¿se supone que eso es malo? — cuestionó SeHun — tú al igual que Baekhyun estás pasando por un cambio total, pasaste parte de tu vida metido en pandillas, creando desastre por la ciudad sin tomar el peso de tus actos, Baekhyun está cambiando igualmente, ten paciencia —

— no se trata de eso— suspiró ChanYeol — BaekHyun me conoció siendo otro tipo de persona...—

SeHun se levantó del sofá, posando ambas manos en su propia cadera, sosteniendolas entre el cinturón y su propia camisa. — sé lo que estás pensando — le apuntó — y estás muy equivocado—

— alguna vez te has preguntado, ¿con cuántas personas me he acostado? — cuestionó ChanYeol, mostrándose frustrado, impulsandose y logrando así levantarse sin mucho esfuerzo.

— prefiero no hacerlo — añadió SeHun, siguiendo con la mirada a su angustiado hermano menor.

— no tienes idea de todas las cosas a las que me dedicaba, el desastre que era. Ahora yo... — gruñó, tallando sus ojos con suave afán, en un intento desesperado por encontrar una paz que se convirtió en su prioridad.

Miel y galletas - Chanbaek. (En Edición) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora