Sé que Tzamn dijo que todo podía mejorar, pero no fue así. Pocos días después de la llegada de Leda y el Escribano, comenzaron a desaparecer campistas. Cecil Markowitz desapareció un día. Al principio creímos que se trataba de una broma preparada por él mismo, pues es un hijo de Hermes, pero cuando no apareció hasta el anochecer, fue cuando todo el mundo comenzó a preocuparse. Lo buscamos por todas partes, sin éxito.
Una semana después, ocurrió otra desaparición y fue cuando las cosas se salieron un poco de control. La primera reacción de todo el mundo fue apuntar dedos acusadores a Leda, por obvias razones. Admito que yo también pensé que ella tenía algo que ver. Se le hizo una especie de juicio en el anfiteatro, presidido por Quirón.
—¡Es culpable! —ladró Sherman Yang—. ¡Cuélguenla de una buena vez!
No era de sorprender que estuviera así de furioso, pues fue su hermano Ellis Wakefield quien desapareció. No había muchas pistas que revelarán la naturaleza de su desaparición: una cama vacía, una puerta abierta y unas pisadas que llevaban al bosque, pero desaparecían de repente.
—Calma, Sherman —dijo Quirón—. Debemos analizar las pistas antes de señalar culpables.
—¡Por favor! —gritó una de las gemelas Víctor, no estoy seguro cuál—. ¿La dejamos entrar al campamento y, una semana después, alguien desaparece? No hay que ser hijo de Atenea para conectar los puntos.
—No es justo asumir —respondió Tzamn—. Es decir, no existe una prueba de que Leda haya hecho algo.
—Sherman, ¿tienes pruebas de que ella tuvo algo que ver? —preguntó Quirón.
El hijo de Ares se quedó callado en su sitio. El ojo de Orión captó cómo apretaba sus puños y su cuerpo temblaba. Negó con la cabeza.
—Edward, Malcolm —Quirón se dirigió a los hermanos de Leda—. ¿Ustedes la vieron salir o algo por el estilo?
Edward se levantó de su sitio.
—Nuestra cabaña tiene un sistema de vigilancia hecho por los hijos de Hefesto —dijo seriamente—. Lo usamos para evitar que alguno de nosotros o de las otras cabañas robe o maltrate nuestra biblioteca.
—Ayer revisamos la grabación —agregó Malcolm—. Sé que no nos agrada mucho nuestra nueva integrante y, subjetivamente, lamento decir esto, pero ella ha dormido con normalidad estos días.
Edward le mostró la grabación a Quirón y este asintió.
—En ese caso, comencemos con las patrullas de búsqueda —dijo—. Estoy consciente de que somos pocos, así que todos ayudaremos a buscar a Ellis. Vayan en parejas, quiero que la mayoría busque en el bosque, pues es el lugar donde desapareció el rastro. Sherman, tú estarás a cargo ahí. El resto busque por el aire y el mar.
Todos formaron sus parejas y pusimos manos a la obra. En un principio iba ir con Nika, pero Leda se acercó con timidez.
—¿Puedo ser tu pareja de búsqueda? —preguntó—. Entiendo porque me culpan de la desaparición de ese chico y quiero hacer lo posible por ayudar.
Asentí.
—Sígueme entonces.
La llevé conmigo hasta los establos, nos seguía Valentina Díaz y Damien White, quienes se ofrecieron a buscar conmigo por el aire. Me hubiera gustado tener a Chiara Benvenuti, su suerte me vendría de maravilla. Bueno, siendo así, sería mejor que estuviera en todos los equipos. Cada uno subió a un pegaso y comenzamos a buscar por el valle. A pesar de que sólo tenía un ojo, el que tenía me otorgaba gran percepción, era capaz de ver a varios kilómetros de distancia e incluso hacer acercamientos, como una cámara fotográfica. Me asusta pensar en cuantas jóvenes y mujeres fueron asesinadas usando este ojo, sin mencionar incontables animales inocentes.
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No es fácil ser un semidiós. Parte III. Ojalá que sea la última.
FanficLa diosa Gaia y sus gigantes han sido derrotados gracias al esfuerzo del Campamento Mestizo y el Campamento Júpiter, peleando juntos. Ahora los romanos y griegos han establecido una relación de amistad y cooperación. Pero pronto descubrirán que la p...