Capitulo 19

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(Salvador)

Una vez instalados en el hotel decidimos ir a comer así que nos pusimos cómodos y salimos a buscar un buen restaurante. Ya en el restaurante, pedimos la orden yo pedí camarones a la diabla y mi mama un coctel de camarones con pulpo y luego me dijo —Y que ha pasado con tu situación, ¿ya aclaraste tus sentimientos hijo?— casi me ahogo, tome agua y cuando pude hablar dije —No mama. No he aclarado nada. Por eso quise que saliéramos de vacaciones, para dejar de pensar en todo. Y estaba funcionando doña Lilian— sí, así se llama mi mama. Se vio avergonzada y dijo —Lo siento Chava— tome agua de nuevo y le respondí —No te preocupes mami, de todas maneras las vacaciones no serán eternas— seguimos comiendo y hablamos sobre mi futuro, mi restaurante. Desde que tenía 12 años mi mama me abrió una cuenta en el banco porque le insistí que quería empezar a ahorrar para mi restaurante y aparte mi papa me había dejado fideicomiso. Y pues ahora tengo lo suficiente para al menos dar el enganche de un buen lugar.

Cuando terminamos, pague la cuenta y fuimos a caminar y conocer Acapulco. Más tarde fuimos a la playa y vimos la puesta de sol. Muy hermosa. Y después regresamos al hotel y la recepcionista nos ofreció un itinerario de actividades para la semana, era opcional y decidimos tomarlo. Esta semana seria genial.

El lunes nos levantamos temprano, nos dimos un baño, pedimos el desayuno a la habitación y luego bajamos a la recepción, donde un joven nos dijo que hoy daríamos un tour a los lugares más visitados en Acapulco. Así que fuimos a varias tiendas turísticas, y así. Ese día regresamos muy cansados y con muchas bolsas. Mi mama se había emocionado comprando cosas. El martes me darían clases de surf y como mi mama no podía surfear decidió tomar el sol. El miércoles el guía turístico nos llevó a varios restaurantes a probar toda la gastronomía de Acapulco. El jueves nos dieron masajes. Eso realmente fue grandioso tanto mi mama como yo los necesitábamos. El viernes para finalizar el itinerario fuimos a un acuario donde vimos varias especies de peses que no tenía idea que existían. Mi mama quedo encantada. Al terminar nos fuimos al

hotel a empezar a empacar pues el sábado regresábamos a casa. En la noche, mientras mi mama dormía decidí salir a caminar un poco, y cuando llegue a la playa, la vi. Sin duda era ella. Nicole estaba ahí. Parpadee y corrí hacia donde estaba, pero cuando llegue, se había ido. ¿Me estaba volviendo loco acaso? ¿Qué haría Nicole aquí? Debí haberla confundido. Seguí mi camino y vi unas pulseras muy bonitas. Compre una color negro con unas flores rosas. Y estaba pensando únicamente en ella. Creo que era mejor que aceptara de una buena vez lo evidente.

Yo me había enamorado profundamente de Nicole.

Al día siguiente, regresamos a casa, y le dije a mi mama —Doña Lilian, usted tenía razón— me miro intrigada y pregunto — ¿En que tuve razón?— le pase mi brazo a sus hombros y le dije —Estoy enamorado de Nikki mama— sonrió y dijo —Esa chica vale la pena. Y estoy segura de que ella igual te quiere— la abrace y rece porque aún me quisiera y me fui a desempacar mis cosas.

Tenía un plan. En dos semanas más entraríamos de nuevo a la universidad. Ya quería verla de nuevo.


Enamorado de un Fantasma. ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora