Enamorado de un Fantasma. ©

Capitulo 2

(Nicole)

¡Dios! Pero ¿porque me sucede esto a mí? ¡Mi primer día de universidad, a un paso de terminar mi sueño y llego tarde! ¡Aggg! Y para colmo, el lugar que quería ya está ocupado, y para acabarla, me toco en el rincón, eso sí que es mala suerte, en eso sentí su mirada sobre mí, ¡Dios! ¿Esto podría ir peor? ¡Si! ¡Él estaba aquí! El chico de los ojos bonitos, el que vi en el examen de admisión, pero ¿porque me miraba? Como sea no creo que me mire por lo bella que soy ¿verdad? Él es tan lindo. Pero por lo que veo una chica ya llamo su atención, ¿Qué demonios pensabas Nicole? ¿Qué se enamoraría de ti en cuanto de viera y vivirían su romance como en los libros que lees? ¡Pues no! En fin, la profesora llego en cuanto me senté, y nos pidió que nos presentáramos, ugg, odiaba las presentaciones, eso significaba que todos me mirarían y eso, también lo odiaba, pero que podía hacer, esto era pura formalidad porque los maestros solo se aprenden los nombres de lo que les caen bien y bueno yo no era de esas. Y por cierto el chico de ojos bonitos se llama Salvador Peralta y la chica junto a él, Lucy Rivas, que coincidencia su nombre es como Lucifer. Bueno no, yo decía. Después formamos equipos de 5, yo me fui con las chicas que estaban cerca de mí, Nefertiti Gómez, Alejandra Castillo, Eliza Luna y María Torres creo que seriamos buenas amigas, en el almuerzo me invitaron a sentarme con ellas, y Salvador se fue con Lucy y los otros chicos que no recuerdo sus nombres.

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Mi gran sueño siempre ha sido ser chef, pero mi familia aunque mis dos papas trabajen pues hay gastos, aun así, han hecho de toda para apoyarme, más mi mama. Tengo un hermano menor se llama Braulio que está en la preparatoria, y pues pese a todo, estoy ya en la universidad, estudiando lo que me gusta, no quiero decepcionarlos, y yo les prometí, que en cuanto terminara la universidad, con los ahorros que tengo y mi abuelita materna me dijo que me ayudaría a establecer mi restaurante, y como mi hermano quiere estudiar lo mismo, el también colaborara, ¡eso será estupendo!

Mi vida amorosa es un asco, o mejor dicho, es inexistente, solo he tenido un novio, pero no lo quería, termine con él y desde entonces no he tenido otro y creo que no lo necesito, lo que necesito es ser el orgullo de mi familia. Soy antisocial, casi no tengo amigos y pues tampoco me gusta salir mucho, prefiero estar en mi casa leyendo y escuchado música. Si me he enamorado, pero pues por ser como soy, nunca me han hecho caso, si, no soy bonita, no estoy tan delgada como quisiera y tampoco soy alta, ¿Quién querría estar con alguien como yo? Mis enamoramientos desaparecen después de que los dejo de ver, así que ya estoy acostumbrada a eso. Me enamoro, pasan años, los dejo de ver y puf el enamoramiento desaparece, no es que no quiera un novio, a veces sí, porque veo como mis amigas son felices, pero igual tanto drama me molesta así que cuando aparezca el indicado estaré lista, bueno no, o ay no sé, Dios dirá cuando ¿o no? No tengo prisa.

¡Pero entonces lo conocí!, un chico guapo, estatura media, cabello negro, tez clara y ¿ya dije guapo?, fue en el examen de admisión, me senté atrás de él, pero él nunca volteo a verme, ¡pero sus ojos! Eran color avellana, hermosos ¡Rayos! ¡Quería despertarme y ver esos ojos diario! Bueno no, como sea, no creo que él se fijara en mí, y la prueba estaba en que ni porque me senté de tras de él me miro. Y cabía la probabilidad de que no lo viera más porque no estaba segura de quedarme, el examen estuvo algo complicado, y él fue el segundo en terminar, yo fui de las ultimas, ¡qué vergüenza! Cuando fui por los resultados me sorprendí, porque ¡si me quede! Lo malo es que no sabía si ojos bonitos se había quedado, no sabía ni su nombre ¡Wow! Y tampoco lo vi ese día, así que solo me quedaba esperar, y bueno tanto espere que llegue tarde a mi primer día de clases y él estaba en mi clase, y estaría en todas mis demás clases porque ¡éramos compañeros! Y no sabía si estar feliz o triste...

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Dos semanas después, los de segundo año, nos fueron a invitar a su "Estupibaile de bienvenida" seria el viernes y era de parejas ¡por dios! No era obligatorio ir,

pero las chicas ya tenían pareja, yo no, eso era malo y triste, pero pues no podía invitar a Salvador porque nunca había hablado con él y él era obvio que iría con Lucy,así que me invente un pretexto y no iría al baile de bienvenida.