Rompiendo las normas || Sirius Black.

1.

Capítulo 1: De vuelta a Hogwarts.

Como era habitual, el día uno de septiembre Demi y su mejor amigo Andrew iban de camino a la estación de King's Cross para comenzar un nuevo curso en el colegio Hogwarts.

Para Demetria, la última semana antes de volver a Hogwarts era la mejor del verano, puesto que se quedaba a dormir en casa de Andrew y no tenía que estar en la casa de su familia.

A decir verdad, Demetria aún no comprendía cómo sus padres le dejaban quedarse en casa del Hufflepuff, ya que ni él ni su familia eran seguidores de Voldemort.

Ella suponía que era porque era sangre pura, y con eso les bastaba.

Aunque según los señores Lestrange, Andrew era un insignificante Hufflepuff que no estaba a la altura del honor de su familia de sangre limpia.

Al llegar al andén nueve y tres cuartos, los dos jóvenes se despidieron del padre del chico, para luego subir al gran tren color escarlata.

Tras recorrer casi todo el expreso, pudieron encontrar un vagón vacío casi al final del pasillo para estar durante el trayecto.

-¿De verdad te lo has pasado bien en casa? Te avisé que mi padre y yo no hacemos nada especial en verano y que te ibas a aburrir- Se excusó Andrew con cierta preocupación.

-No te preocupes, he estado de maravilla.- Respondió con amabilidad, haciendo que su amigo sintiera un alivio inmenso.

-¿Dónde estará Amy? Quedamos en que íbamos a estar en el mismo compartimento, como siempre.- Cambió él de tema.

-Estará de camino.

Nada más decirlo, Amy y su hermano Sam pasaron por el pasillo a toda pastilla.

-¡Eh, Smith!- Exclamó el Hufflepuff para que la chica le prestara atención.

Sam agarró a su hermana mayor por la muñeca para frenar su paso, ya que ella no se había enterado.

-Por fin os encontramos. Estaba cansada de tanto caminar por el pasillo.- Se quejó la chica, mientras que ella y su hermano se acomodaban en sus asientos.

-¿Cómo habéis pasado el verano?- Preguntó Sam.

-Bastante bien, pero lo mejor fue cuando Demi vino hace una semana a casa. Papá y yo nos alegramos mucho de que viniera.- Contestó Andrew.

-¿Este verano también has ido a casa de los Stone, Demi?

-Claramente. No aguantaba estar un día más en mi casa, era insoportable.

-Nadie aguantaría más de cinco minutos en esa casa.- Bromeó Sam para aliviar tensiones.

-¡Oye, dejar de gritar y correr por los pasillos!- Gritó Andrew a unos niños de segundo año en cuanto este se levantó de su asiento y fue hacia el marco de la puerta.

Demi también se puso en pie y fue a su lado, dejando a los hermanos Smith charlando entre ellos.

-Cómo se nota que eres prefecto.

-Estoy nervioso, no sé si el año pasado lo hice del todo bien. ¿Crees que este curso lo haré bien?- Murmuró mirando a un punto fijo.