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Capítulo 26: Estudios.

Al volver de las vacaciones de Navidad, los alumnos que querían las mejores notas en sus ÉXTASIS se pusieron manos a la obra.

Ese fue el caso de Demetria y Remus, los cuales se quedaban en la biblioteca del castillo durante horas y horas para que no se les amontonara el trabajo.

A finales de enero, ambos estaban terminando un trabajo de Herbología en silencio, evitando que la bibliotecaria Irma Pince les regañara por el más mínimo ruido.

-Oye, Remus.- Susurró Demetria.

-¿Qué pasa?- Dijo sin levantar su vista del pergamino.

-¿A ti no te gusta ninguna chica?

-¿Por qué dices eso?- Preguntó con tono de sorpresa.

-No sé... Todos tenemos pareja o nos gusta alguien, pero tú no dices nada con respecto a eso.- Dijo algo tímida pero con mucha curiosidad.

Remus dejó de escribir al poner su pluma a un lado y levantó su vista para mirar a su amiga.

-No quiero tener novia de momento. No quiero poner a otra persona en riesgo por mi condición.

-¿De verdad que no sales con chicas por tu condición?

Lupin asintió con la cabeza.

-Es duro no querer a más personas en tu vida por miedo a hacerles daño.- Explicó, apartando su mirada de ella.

-Entiendo...

-Además , ahora estoy muy centrado en los estudios, no quiero que ninguna chica me despiste. Los ÉXTASIS son muy importantes, ¿lo sabías?

-Sí, claro que lo sé.- Dijo Demetria, acordándose de las notas que tenía que conseguir para ser aurora.

Tras estar un par de horas en la biblioteca, Remus empezó a recoger sus cosas.

-¿Te vas?- Le preguntó la chica.

-Sí, ya he terminado el trabajo.

-Yo me voy a quedar un rato más repasando la lección de pociones.

-De acuerdo. Suerte.

Ambos se dieron un beso en la mejilla y acto seguido, Remus se fue para dejarla completamente sola.

Tras terminar ella también el trabajo que les había mandado la profesora Pomona Sprout, empezó a estudiar la lección de la clase del profesor Horace Slughorn.

Luego de estudiar durante un buen rato, sintió que alguien caminada cerca de ella pero no le dio la importancia necesaria como para girarse.

-Demetria Lestrange estudiando, qué raro.- Susurró Sirius en su oído con ironía.

Automáticamente todos los vellos del cuerpo se le erizaron al escuchar el susurro.

Se notaba que Sirius sabía los puntos débiles de su novia y se aprovechaba de aquello.

-¿Qué haces tú aquí?- Le preguntó mientras él se sentaba a su lado.

-Remus me dijo que estabas aquí y he venido a verte. ¿Qué estudias?

-La lección de pociones.

-¿Y cómo se te está dando?- Demi no dijo nada, dándole una clara respuesta. -¿Necesitas ayuda?

-No me vendría mal.

En ese momento, la bibliotecaria Pince mandó a callar a la pareja.

-¿Prefieres ir a otro sitio?- Dijo Sirius bajando la voz.

-¿Y qué sitio es mejor que la biblioteca para estudiar?

-La Sala de Menesteres. Esa sala se presenta dependiendo de tus necesidades, allí tendrás todos los libros necesarios y estarás mejor que aquí.

-Pues vamos.

La chica empezó a recoger sus cosas para irse de la biblioteca.

Ambos salieron de allí para ir al séptimo piso donde se presentaría la puerta para entrar a la Sala de los Menesteres.

-¿Por qué no tenéis esta sala en el Mapa del Merodeador?- Preguntó ella mientras caminaban.

-La descubrimos demasiado tarde. Se le presentó a Peter cuando necesitaba ir al baño, y para aquel entonces ya teníamos el Mapa del Merodeador hecho.

Nada más llegar al corredor del séptimo piso, se les presentó una gran puerta en medio de la pared.

Los dos entraron a la vez a la sala y pudieron ver estanterías por todos lados llenas de libros, pero Demi notó un detalle que no venía necesario.

-¿Una cama? ¿De verdad, Sirius?

-¿Qué problema hay? Para estudiar hay que estar cómodo.- Dijo con tono de burla.

Ella soltó una carcajada mientras que el chico se sentó en la cama.

Demetria buscó libros de pociones en las estanterías para que él le preguntara las lecciones que habían dado hasta el momento.

Tras unos minutos buscando, se sentó en la misma cama y puso los libros frente a Sirius.

-Empieza a preguntarme.

Sirius abrió el primer libro buscando preguntas que le llamaran la atención.

-¿Cuál es el tiempo de preparación de la poción Veritaserum?

-Un ciclo lunar.

-Vaya, qué lista.- Dijo con gracia. -¿Para qué poción se utilizan los crisopos?

-Para la poción multijugos.- Respondió casi al momento.

Luego de que Sirius le preguntara unas cuestiones más, acabó con Demetria entre sus brazos, la cual le estaba dando la espalda.

-¿Cuál es el efecto de la poción agudizadora del ingenio?- Preguntó mientras empezaba a darle besos en el cuello.

-Mejora el intelecto del consumidor.- Dijo Demi en un suspiro, con los ojos cerrados.

Sirius no volvió a preguntar más, ya que se centró en seguir dándole besos por el cuello a su novia.

-Sirius...- Susurró para que parara.

-¿Qué ocurre? Necesitas un descanso, llevas toda la tarde estudiando.

Ella se dio la vuelta para mirarle mejor pero Sirius aprovechó y besó sus labios con deseo.

La chica optó por finalizar el beso de malas maneras, empujándolo levemente y sentándose en el filo de la cama.

-¿Es para eso por lo que me has traído a la Sala de los Menesteres? ¿Para esto querías la cama?- Preguntó bastante enfadada.

-Demi...

-Ni Demi ni nada. Me dijiste que me ibas a ayudar a estudiar.

La chica cerró los libros y los cogió, presionándolos contra su pecho.

Se dirigió a la puerta para irse, pero Sirius fue más rápido y la agarró por la cintura.

Ambos caminaron hacia atrás hasta llegar a la cama otra vez, y el chico sentó a su novia.

Le quitó los libros de entre los brazos y buscó más preguntas para hacerle.

-¿Cual es el antídoto para la mayoría de los venenos comunes?

Mientras Sirius formulaba la pregunta, Demi no pudo sonreír levemente.

Se notaba que Sirius estaba arrepentido por su actitud y quería ayudarla a conseguir sus objetivos, así que estuvieron estudiando hasta la hora de la cena.

Rompiendo las normas || Sirius Black.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora