Capítulo 16: "No tengas miedo de enamorarte"

39.7K 1.4K 282
                                    

Hola! como prometí hoy es lunes y subiré nuevo capítulo :) quiero agradecerles por los lindos comentarios y votos. Me emociona cada vez más cuando veo y leo que les gusta mi novela. Además he leído que hay lectoras de México, Guatemala, EE UU, Perú! <3 .......

GRACIAS CHICAS!!!!!!!!

"No tengas miedo de enamorarte. Es lo único que vale en esta vida, la única cosa".

Lena no podía superar la pérdida de Simon. Se supone que ellos se amaban y que iban a estar juntos, pero todo se había venido abajo. La morena tenía el corazón destrozado, y una conciencia que le repetía constantemente, que eso le pasaba por meterse con un hombre que siempre ha sido de otra.

No podía seguir así, necesitaba aclarar las cosas. Contar su parte y decirles a los demás que ella no era ninguna "perra" por meterse con un hombre casado, sólo era una mujer que deseaba ser amada y querida.

Tal vez estaba haciendo mal en ir ahí, pero era lo mejor. Quería hacer todo bien, antes de que se vaya de viaje.

-¿Qué haces tú aquí? – habló Hannah molesta al verla parada en la puerta de su casa.

-Por favor, Hannah déjame hablar contigo. Sólo te pido 10 minutos. – rogó la morena.

-Que no pasen de los 10. - la dejó y se puso en posición de escucharla.

-¿Sabes que Simon terminó conmigo? – confesó con tristeza.

-¿Eso que tiene que ver conmigo? – La otra mujer la miró confundida.

-¿Es que acaso no te das cuenta, que lo hizo por ti? – Lena ya estaba a punto de llorar. – Simon te eligió a ti. Siempre has sido tú...

-Eso no es verdad... tú sabes que ...

-Hannah... – la interrumpió. - no porque haya estado conmigo, significa que sea mío. Al principio pensé que Simon se iba a divorciar de ti y que luego él y yo nos íbamos a casar, pero con el pasar de los meses, me di cuenta que él ya no me miraba como antes. Soy mujer y sé cuándo un hombre gusta de otra. Yo le decía que se divorciará de ti, pero siempre terminaba diciéndome que no lo podía hacer y otro par de excusas. Pero tú y yo sabemos que podía divorciarse cuando él quisiera. Tal vez e iba a perder la conexión con la empresa de tu padre, pero económicamente iba a seguir igual. ¡Por Dios! ¡es un Collins! - Hannah asintió. – ¡Ves! Hasta tú me entiendas. Él te quiere, siempre lo ha hecho. Cuando fui al hospital a verlo por última vez, yo estaba muy emocionada, porque él había despertado, pero cuando hablamos, lo único que recuerdo es que me decía "Lena, lo siento" y luego lágrimas en mi rostro... - La morena sollozaba dolorosamente. Hannah sentía compasión por ella, pero aun así seguía molesta. Y bueno era entendible. ¿Qué mujer en sus 5 sentidos hablaría civilizadamente con la "otra" de su esposo?

-Lena tú puedes conseguir al hombre que quieras. – opinó la joven con voz neutral.

-Puedo tener a millones de hombre detrás de mí, pero sólo uno puede amarme verdaderamente y yo puedo amarlo de la misma manera. ¿De qué sirve ser sólo hermosa por fuera, si al final lo que manda es lo de acá adentro?- Hannah miró la mano de la morena que se encontraba en su pecho. – Sólo he venido a decirte que allá afuera tienes a un hombre esperándote. No lo desaproveches.... Tienes una hija muy linda, que necesita de una familia.... Ya quisiera yo tener una familia como la tuya. – Lena sonrió irónicamente. – Hannah Parker creo que ha llegado tu momento de ser feliz. No lo desperdicies... Y bueno yo... creo que me iré y trataré de encontrar el amor. Aunque lo dudo. – se secó rápidamente las lágrimas y luego miró a la castaña.

-Sólo asegúrate la próxima vez que no sea un hombre casado. - eso le había dolido, pero ella tenía que decírselo. - Adiós Lena. – dijo con los ojos cristalizados. Lena trató de sonreírle y con paso lento, salió de la casa de Hannah.

La de la mala suerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora