Destinos - Remus J. Lupin

Seis

"Y la magia se produce cuando vez a una persona entre tanta gente".

—??? 

— ¿Así que eres buena en pociones?

La voz de Sirius Black resonó por toda la habitación de las mazmorras mientras veía como Aura prestaba suma atención a la poción que tenía ante ella, la cual tomaba poco a poco un color púrpura.

— Eso creo —anuncio ella con una pequeña sonrisa.— Por algo me habrán puesto como tu tutor no lo crees.

La muchacha no era estúpida, sabía que esa pregunta no era tan inocente como parecía, y viniendo de Sirius esto tendría un trasfondo oscuro.

— Si... pero yo me preguntaba, todo tipo de pociones.

— No las he hecho todas pero siempre me salen bien si tienen sus indicaciones —. Le dio una rápida mirada antes de seguir— ¿ A que se debe esta pregunta? —pregunto finalmente mientras sacaba su varita y con un leve movimiento de esta la poción púrpura cambio a negro.

Ante la falta  de una respuesta Aura levanta la vista hacia su compañero, notando que esta mirando nervioso hacia un punto fijo de la sala.

— Sirius...

— ¿Nos harías un favor?

— ¿Nos?

— Es una poción muy avanzada, es más hasta podría ser peligrosa si la ingerimos mal hecha —explico nervioso turnando su mirada entre Aura y la esquina de la sala.

A estas alturas la ojiazul sabía que había algo o alguien en esa zona de la habitación, y por lo que concierne esa persona entro con Sirius o ya estaba en el lugar.

Probablemente eran sus amigos debajo de la capa que usaron para acompañarla hasta su sala común.

— ¿Qué hay ahí? —pregunto con un leve ceño fruncido, sin sacar sus ojos de ese lugar.

— Nada... —. Se silencio al momento en el cual la Hufflepuff le dio una dura mirada, sabía que ella no aceptaría alguna mentira.

— Las pociones que llegan a ser mortales no las van a encontrar en un libro que pueden obtener en cualquier librería, estarán en la zona prohibida de la biblioteca. No es un sí a tu favor, pero creo que te estuve enseñando perfectamente para realizar cada una de ellas.

Sirius estaba por responder, tenía la escusa perfecta para que ella los ayude a el y a sus amigos en crear la poción para volverse animago. Pero fue duramente interrumpido por la puerta de su sala, la cual se abrió rápidamente, revelando a Sombra con un sobre negro en la boca.

— ¿Desde cuando los gatos envían cartas?

— Si te soy sincera, no lo sé —. Tomo la carta para darle una rápida leía— Me tengo que ir, nos vemos luego Sirius y personas que no puedo ver.

Una pequeña risa salió del pecho de la joven al escuchar varias voces desde la sala que acababa de dejar. Fue un alivio que no haya dicho nada estúpido.

El resto de la tarde pasó normal, teniendo varios encuentros con Lily y Severus en la biblioteca, ir a las tres clases que tenía hoy (por suerte para ella no tenía astronomía) y llego la hora de la cena, donde se sentó junto a Andrew el cual estaba hablando sobre algunas cosas que tenía pensado para las vacaciones de invierno.

— Nos iremos a América Latina, ahí el clima es cálido por lo que se —comentó mientras llevaba un poco de su puré de papa a la boca.

Aura asintió tranquila mientras tragaba  su porción.