Romeo Y Julieta {Zayn Malik y Tú}

Capítulo 41 "it's okay not to be okay"

-¿Qué necesitan? - la señora de enfermería abrió la puerta.

-¿Le puede dar un pase para retirarse? Por favor - pidió Liam al entrar junto a mí.

-¿Por qué motivo? - se preocupó al ver mi rostro, mis ojos estaban hinchados tanto llorar.

-Se siente muy mal, enserio.

-Está bien, aquí está, rellénalo - entregó un papel mientras se devolvía a ordenar unas cosas.

-Vámonos - Liam me tomó y nos marchamos.

-¿Y tú? ¿Y las cosas? - comenté.

-Le enviaré un mensaje a Hannah para que nos guarde las cosas - se paró junto a mí.

-¿Y tú? ¿Tienes pase?

-No, pero no importa, me las arreglaré mañana.

-No, no quiero que tengas problemas por mí - posé mi mano sobre su pecho.

-¡Hey! Soy tu mejor amigo ¿Recuerdas? Tengo que estar contigo, eres más importante - tomó mi mano y nos dirigimos rápidamente hacia la salida.

Tomó mi auto y gracias al gps logró llegar a mi casa. Sacó las llaves de mi bolso, y abrió las puertas.

-Te irás a tu habitación - mandó.

-Pero...

-A tu habitación dije, estás cansada y tienes mucho que pensar, unas buenas horas de sueño te harán sentir mejor.

Acepté con un ligero movimiento de cabeza y subí lentamente las escaleras hasta llegar a mi habitación, y sin ganas de nada, me lancé hacia mi cama como si estuviese inmóvil.

Estaba ahogada en mis lágrimas, boca abajo sobre mi cama. Con mi bolso aún en las manos.

-Tomate esta agua de hierbas, te calmará - Liam se sentó a mi lado mientras me enseñaba el tazón blanco.

-Gracias, déjalo por ahí.

-Ven.

Sentí como me tomaban como si fuese una muñeca de trapo. Me sentó en la cama y dejó el tazón en mis manos.

-No eres nadie para venir y rechazar una de mis milagrosas aguas de hierba - dijo con tono de mamá.

-Lo siento, Liam.

-¿Quieres algo más? - comentó mientras se acomodaba frente a mí.

-Necesito descansar - fui cortante.

-Está bien... Pero tómate esta agua de hierbas, si necesitas algo, no dudes en llamarme. Dejaré todo cerrado - antes de marcharse se acercó a mí y besó mi frente.

Escuché el ruido de la puerta cerrarse y tomé un sorbo de agua mientras dejaba escapar un largo suspiro. Dejé el tazón a un lado y nuevamente las lágrimas no tardaron en llegar, los recuerdos inundaban mi mente, me levanté me senté en mi escritorio tomé una foto que tenía de ambos, con una sonrisa radiante en nuestros rostros. Y el llanto no tardó en llegar, en el fondo sabía que nunca más lo volvería a ver... 

-¿___________? - Sentí como picaban mi espalda para que despertara. Me había dormido en el escritorio. Estaba un poco perdida, mareada.

Me acomodé e intenté ponerme de pie. Mamá se encontraba en la habitación.

-Te estuvimos llamando, preguntamos por ti apenas entramos a la casa.

-No los oí.

-Lo sé, te habías dormido. ¿Y Margaret?

-No ha venido.

-¿La volviste a despedir? - Miró enfadada.

-¡No mamá! No está, no ha venido, no sé de ella, no ha llamado ¡¿Qué se yo por qué no ha venido?! - Me exalté.

-Baja el tono, hija - miró amenazante.

-¿Qué está pasando aquí? - Interrumpió papá mientras se asomaba por la puerta.

-Solo está alterada.

-Vaya forma de recibirnos en casa - dijo papá en tono sarcástico.

-Se pueden ir de mi habitación por favor, no me siento bien, no tuve un gran día, váyanse, por favor - intenté mantener la calma.

-Somos tus padres - dijo firme papá.

-¿Ah sí? - dije molesta - ¿Y DÓNDE HAN ESTADO TODO ESTE TIEMPO? - me levanté furiosa - ¿TRABAJANDO? ¿DE VACACIONES EN OTRAS PARTES DEL MUNDO? MIENTRAS SU HIJA ESTÁ SOLA EN ESTA ENORME CASA, SIN TENER A SUS PADRES PARA CONVERSAR, SIN TENER UNA MADRE EN LA QUE CONFIAR Y PODER LLORAR CUANDO TE DESTROZAN EL CORAZÓN - limpié una lágrima de mi mejilla - Ustedes no son esos tipos de padres, estoy destrozada, lo único que me hacía feliz en esta vida, se ha ido, al igual que ustedes cada semana. ¿Se merecen una buena bienvenida? Tienen una hija, somos una familia, recuerden. 

Y me encerré en el baño de mi habitación. Dejé corriendo el agua en la ducha, y me tiré al suelo, esperando que mis padres se fueran de una vez.